ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Condorcet


Enviado por   •  17 de Enero de 2014  •  7.962 Palabras (32 Páginas)  •  264 Visitas

Página 1 de 32

CINCO MEMORIAS SOBRE LA INSTRUCCIÓN PÚBLICA*

Condorcet.

Lo que Condorcet proponía y defendía no era sólo una educación basada en sugerencias, las aspiraciones son muy idealistas, creo que lo principal era hacer de los ciudadanos seres cultos con visión y sobre todo con reflexión crítica ante cualquier situación. Sobre todo los invitaba al uso de la razón ante la situación política de la época-

Comparo esta situación con la presente situación magisterial, particularmente con la del estado de Oaxaca. Cierto es que dentro de la formación como docentes se incluye la cita de: “son los maestros los que van a despertar las conciencias de los pueblos, la revolución no será ahora con armas, será con el pensamiento”. Esto con el objeto de ser el maestro el que despierte las mentes de la sociedad, de hacerla capaz de entender y reflexionar.

Haciendo la relación de ambas situaciones, menciono que las ideas de Condorcet eran consideradas modernas para su época, pero ¿es que acaso la situación de los gobiernos y sus pueblos siempre ha sido la misma?, ¿han habido verdaderas revoluciones en toda la extensión de la palabra, o somos de esos pueblos mencionados que creen ser libres?

Para ser parte activa de una sociedad entonces es necesario instruirse, instruirse para ser libres, para ser autónomos,

y todo aquel en desventaja en cuanto a instrucción también está en desventaja de ser un miembro crítico y razonable de la situación y sociedad en la que vive.

La instrucción debe estar separada del gobierno pero debe trabajar conjuntamente para que en la medida de lo posible los ciudadanos puedan emitir un juicio, una opinión o una idea que pueda mejorar dicho gobierno.

La educación hará libres a los hombres.

“Una sociedad sin escuela o una sociedad donde la escuela no está pensada como un órgano de libertad, está sin duda expuesta a la enajenación y lo político está necesariamente erigido como principio absoluto de autoridad o subordinado a la realidad”

SOBRE LA NECESIDAD DE LA INSTRUCCIÓN PÚBLICA

Condorcet

La Revolución proclama la igualdad y la libertad entre los ciudadanos, la instrucción hace posible esos ideales.

“Un pueblo instruido confía sus intereses en individuos cultos, pero un pueblo ignorante se convierte en victima de los malintencionados”

La educación hará posible que los ciudadanos mejoren su sociedad, la igualdad en la educación hará posible que tanto gobernantes como gobernados se encaminen hacia una sociedad próspera.

Los maestros y los medios deberían facilitar el camino hacia la igualdad, la instrucción y la libertad. Alejándose del imperioso deseo natural de aprovecharse de quien intelectualmente

es menos dotado no porque así lo desee, sino porque sus circunstancias lo han orillado a permanecer en la ignorancia.

La instrucción sin duda ha sido objeto de ambición de los poderosos, por los beneficios que tiene el control de su esencia. De la instrucción depende que los privilegiados sigan dándole información falsa al pueblo que los llene de ignorancia y prejuicio que afirme o niegue rotundamente sin la posibilidad de reflexionar. La instrucción debe estar en manos del pueblo, de todos y no de unos cuantos para encaminar a la sociedad al progreso.

¿Después de todo, quién nos asegura que la historia que nos han dado sobre nuestros orígenes no es “mandada a hacer”? , ¿Cómo podríamos saber diferenciar lo falso de la verdad? Aseguro que la respuesta se encuentra en la educación.

CINCO MEMORIAS SOBRE LA INSTRUCCIÓN PÚBLICA.

La enseñanza pública tiene como tarea ayudar a deliberar consigo mismo y con los demás, pero también es importante establecer un vínculo de los conocimientos a enseñar y cómo poner los conocimientos al servicio de los demás. Aquí ya entra el papel del maestro al dominar los contenidos que le servirán para instruir a los alumnos. Condorcet apunta hacia algo muy importante: la razón y menciona que la labor de la escuela es enseñar, pero enseñar a que cada uno sea su educador, capaz de consultar

su razón, de tomar sus propias decisiones.

Entra en juego la enseñanza humanista, aprender a ser buen ciudadano pero también a estar en armonía con todos los que nos rodean, siento que la clave principal es la razón, no conformarnos con lo que ya está hecho porque de igual manera puede ser modificado a partir de un entendimiento que será en base a la razón.

TEORÍA DE LA ESCUELA PÚBLICA.

PROPOSICIONES PREVIAS.

La instrucción se basaba en la razón, el ideal de que cada quien podría decidir por sí mismo; ser autónomos y no practicar esto sería como exponernos a ser tiranos de la misma sociedad.

Entra el dilema de acatar los derechos, del por qué los acatamos y del porqué tomamos las decisiones, de saber que no estamos exentos de cometer errores y tampoco tenemos garantías de evitar los mismos; como seres humanos estamos tan acostumbrados a obedecer a una autoridad aunque no nos parezca la función que desempeñe. Las leyes tienen una función no es sólo querer reglamentar o condicionar a las personas, sino que para ser aplicada, anteriormente fue razonada sobre la necesidad que surgió para que se implementara. La capacidad que tenemos para razonar es de naturaleza y también somos capaces de decidir por otras personas o que lo hagan por nosotros pero debemos acatarnos a los resultados, ya sea que sean.

Cuando se vincula la

libertad y la educación; somos capaces de elegir los conocimientos y sobre todo qué conocimientos queremos tener, satisfaciendo nuestras necesidades, al mismo tiempo aumentando el acervo de nuestros saberes.

La reflexión razonada nos da la medida de cualquier control, de cualquier moral, ahí nosotros dependemos de nosotros mismos.

La escuela debe estar pensada como órgano de libertad, siendo la que nos permite a nosotros como seres humanos hacer uso de nuestra razón y permitirnos adentrarnos a otras problemáticas que nos acontecen como sociedad y que desafortunadamente nos son escondidos y en otros casos nos son indiferentes por falta de conocimiento.

SOBRE LA NECESIDAD DE LA INSTRUCCIÓN PÚBLICA.

Europa como otros países se encontraba sumergido entre tanta ignorancia y amarrado a un yugo que era casi imposible desatarse de ella y hasta el momento existen países que se encuentran en esas condiciones por falta de iniciativa o por miedo a represalias, es casi falso afirmar que la libertad se aplica porque decir que el pueblo sabe lo suficiente, de que sí puede ser libre, es confesar que se le quiere engañar para dominarlo.

La atención que se le brinda a la educación del pueblo no debe basarse en mentiras, tampoco se trata de gobernar a los demás; de ejercer en ellos el típico explotado-explotador que se maneja como capitalismo

que se ha presentado en toda clase social.

La igualdad debe abarcar en la universalidad de todos los conocimientos sin excluir a ni uno y así estar a favor de la especie humana e implementando y aplicando la enseñanza misma que estuvo basada en la imprenta; en libros que apoyaron a que la enseñanza fuera más fácil porque anteriormente estudiar, acceder a una institución educativa resultaba un gasto económico muy elevado y que los maestros estuvieran más preparados fue y ha sido una exigencia, es más fácil juzgar a los profesores si se les ha preparado en una institución pública, si sabe lo que en verdad se le enseñó, sería necesario examinar la doctrina que practica y el aprendizaje que obtuvo, en la mayoría de los casos juzgamos el trabajo de un maestro aprobando o reprobando la modalidad de trabajo que adopta.

La educación fue utilizada con doble filo porque se quería sacar a las personas de la ignorancia basándose de la razón pero al mismo tiempo se le ocultaba la verdad de las cosas que los sumergen aún más a vivir a expensas de lo que la mayoría diga o a estar influido por las ideas de los demás sin ejercer su autonomía.

Los movimientos sociales han permitido cambios en nuestra sociedad pero aún así estamos inmiscuidos en tanta ignorancia porque no sabemos o no queremos conocer los derechos y obligaciones que tenem

_-----------------------------------------------

udar a los ciudadanos, instruirlos para que sean autónomos y autores de su propia educación, es la tarea que tiene la enseñanza pública. Con la ésta se pretende no solo ser buenos ciudadanos sino estar en armonía con la humanidad.

Para la enseñanza pública, necesitamos relacionar lo epistemológico, didáctico y jurídico- político; es decir ¿Qué conocimientos enseñar? ¿Cómo presentar los conocimientos? Y ¿Cómo poner estos conocimientos al servicio del bien público?

Condorcet presenta tres aprendizajes que deberían trabajarse en la enseñanza pública: 1) el aprendizaje de los conocimientos elementales, 2) el aprendizaje de la ciudadanía ilustrada y los derechos humanos, es la instrucción cívica indispensable y 3) el aprendizaje del sentimiento de humanidad. Estos tres aprendizajes en realidad son uno mismo ya que conforman el saber mínimo o elemental.

Asimismo unifica los aprendizajes: debemos instruirnos y cultivarnos de conocimientos, lo cual ayudará a la autoestima y al amor de la humanidad.

Desde la época de Condorcet se confundía lo que era educación e instrucción y democracia y la republica. La diferencia entre la primera, es que el propósito de la escuela, es instruir a cada uno para que sean su

propio educador.

Condorcet transforma la educación pública en instituciones y programas escolares, que trabajan en teorías de la república. Dentro de ellas se presentan los principios teóricos de la enseñanza pública junto con los de republicanismo. ¿Para qué ayudaría lo anterior? Nos ayuda “Hacer hombres que admiren la legislación, además que sean capaces de entenderla y corregirla”.

Teoría de la escuela pública

Esta teoría hace una reflexión acerca de la legislación y las leyes que existen para la organización de un pueblo.

Menciona que nadie está exento de cometer errores, y nadie puede venir e imponernos una decisión errónea; aunque obedezcamos a una autoridad. Podemos pedir a esa autoridad que nos determine los propósitos sobre los que existe la necesidad de hacer leyes.

Surgen tres exigencias: 1) nadie puede ser excluido a priori del cuerpo político, 2) es indispensable encauzar la espontaneidad de las voluntades y alejarlas lo más posible de las particularidades y 3) las decisiones deben prevenir el error.

Vincular la educación con la libertad supone la elección de la sabiduría, modelo abierto y razonado que satisface dos exigencias:

La primera es epistemológica y real. Existen dispositivos intelectuales en los que el poder explicativo es mayor que otros

y resultan más apropiados para enfrentar los avances ineluctables de un progreso sin rumbo.

Una segunda exigencia, la jurídica: encontrar una forma de saber que permita al que lo obtenga escapar a la servidumbre intelectual.

El concepto de conocimiento escolar presenta otro problema: la proporción entre lo ideal de un conocimiento mínimo satisfactorio para el conjunto de las exigencias y la extensión real de los conocimientos en un determinado momento. Una diferencia de conocimientos entre dos hombres, por mínima que ésta sea, puede engendrar servidumbre.

La instrucción surge de lo jurídico, no de lo social. Porque en ella se encuentra la libertad pública necesaria para el ejercicio de la soberanía y no la libertad privada, es deber del poder púbico garantizar la homogeneidad, el desarrollo y la protección.

Es preciso proteger a la instrucción de los grupos de presión, incluido el que pudiera formar un gobierno republicano.

Se podrían tomar tres clases de disposiciones:

1. Situar los conocimientos y sus agentes fuera del alcance de los poderes civiles, políticos, religiosos o económicos.

2. Es menester proteger a los ciudadanos del poder de los maestros.

3. Si la instrucción proviene de la organización pública, no podrá ser objeto de un monopolio como lo

son la justicia o la policía.

Una sociedad sin escuela o una sociedad donde la escuela no está pensada como un órgano de libertad, está sin duda expuesta a la enajenación y lo político estaría necesariamente erigido como principio absoluto de autoridad o subordinado a la realidad.

INTRODUCCIÓN

El presente ensayo nos habla sobre el tema “Cinco memorias sobre la instrucción pública” de Condorcet. Aquí nos menciona cual es la tarea principal de la enseñanza pública y aborda los aprendizajes complementarios y necesarios que unifican la tesis de Condorcet.

Se hablará en una forma sintetizada sobre la teoría de la escuela pública que nos habla de que ninguna persona puede estar sometida a otra, que existen autoridades a las cuales se debe obedecer pero que éstas no pueden imponer decisiones sobre ninguna persona.

Se hace mención de la importancia de libertad pública, necesaria para el ejercicio de la soberanía.

CONCLUSIÓN

Esta teoría nos deja como conclusión que la fuente de la autoridad no es ni una voluntad, ni un afecto, aun cuando sea tan notable como el amor a las leyes. Sólo la reflexión razonada y clara nos da la medida de cualquier control, cualquier moral, de cualquier política porque ahí radica la única y verdadera fuerza, la que jamás nos puede decepcionar

Condorcet “presentación”, “segunda memoria” y “Sobre la necesidad de |

|la instrucción pública”, en Cinco memorias sobre la instrucción pública. |

|Presentación, notas y bibliografía de Charles Coutel y Catherine Kinstzler |

|París, Flammarion 1994, pp. 1-58 (originalmente 1791) |

| |

|Tesis: |

| |

|La labor de la escuela es enseñar a que cada uno sea su propio educador, capaz en todo momento de consultar su razón. (pág. 2) |

| |

|Argumento. |

|La enseñanza pública tiene como tarea ayudar a los ciudadanos a deliberar consigo mismo y con los demás. (pág. 1) |

|Es importante establecer un vínculo entre lo epistemológico, lo didáctico y lo jurídico-político. (pág. 1) |

|Cicerón: aprender a no solo ser un buen ciudadano sino también a estar en armonía con toda la humanidad sin renunciar al libere albedrio. (pág. 1) |

|Tres grandes aprendizajes complementarios y necesarios:

1) el aprendizaje de los conocimientos elementales en el marco de una historia general de la razón |

|humana, es la exigencia epistemológica- didáctica de la enseñanza pública. 2) El aprendizaje de la ciudadanía ilustrada y los derechos humanos, es la |

|instrucción cívica. 3) el aprendizaje del sentimiento de humanidad. (págs. 1,2) |

|Si no has llevado las artes a un determinado grado de perfección, si tu espíritu todavía no está formado, abierto y fortalecido por estudios metódicos, de nada|

|te servirán tus recursos: el cansancio y el disgusto de tu propia mediocridad pronto predominaran sobre tu razón. (pág. 2) |

|Roberspiere pretendió suplir la enseñanza pública condorciana por la educación patriótica y espartana de Lepeletier (pág. 2) |

|El objetivo de la instrucción no es hacer que los hombres admitan una legislación ya hecha sino que sean capaces de entenderla y corregirla. (pág. 3) |

|La teoría de la educación pública presupone una reflexión previa sobre el problema que se plantea de manera inmediata a un pueblo legislador. (pág. 3) |

|Ninguna voluntad por sí misma, pretende ser legítima. No existe razón alguna para que deposite mi destino en manos ajenas. (pág. 3) |

|Surgen 3 exigencias del cuerpo político 1) nadie puede ser excluido a priori del cuerpo político dado que todos somos seres racionales. 2) Es indispensable |

|encauzar la espontaneidad de las voluntades y alejarlas lo más posible de sus particularidades. 3) las decisiones, en medida de lo posible deben prevenir el |

|error. (pág. 4) |

|Existen conocimientos limitados que encierran al hombre en un estrecho círculo de utilidades inmediatas que obstaculizan la autonomía de la razón. (pág. 5) |

|Vincular la educación con la libertad presupone la elección de la sabiduría, modelo abierto y razonado. (pág.

5) |

|Es preciso que un progreso voluntario y reflexivo del pensamiento prevenga el avance ciego y mecánico de las cosas y las costumbres. (pág. 6) |

|Es preciso enseñar a juzgar remontándose a los principios del juicio es así como Condorcet define el concepto de: conocimiento elemental escolar. (pág. 6) |

|El defecto más grande proviene de que su razonamiento está planteado únicamente en términos de sociedad y no en términos de derecho (pág. 7) |

|La instrucción surge de lo jurídico, no solo de lo social. Porque en ella se encuentra la libertad publica necesaria para el ejercicio de la soberanía. (pág. |

|7) |

|Se dará preferencia fundamentalmente a los criterios de preparación según la materia que se enseña. (pág. 8) |

|Es menester proteger a los ciudadanos del poder de los maestros. (pág. 8) |

|Es menester, entonces, que se haga un examen frio y severo en el que únicamente se escuche la razón antes que surja el entusiasmo. (pág. 9) |

|Nadie puede bastarse en la creencia, lo cual también excluye cualquier religión civil; el racionalismo de Condorcet es directamente contrario al culto de la |

|razón y su juridicidad al de la ley. (pág. 9) |

|Si la instrucción proviene de un monopolio como lo son la justicia o la policía: la naturaleza misma del servicio que proporciona necesita el estimulo de la |

|competencia. (pág. 10) |

|Solo la reflexión razonada y clara, de la cual de todos debemos poder asirnos, nos da la medida de cualquier control, de cualquier moral, de cualquier política|

|porque

ahí radica la única y verdadera fuerza, la única que jamás nos puede decepcionar. (pág. 10) |

|Se pueden tomar unos nueve años para llegar al término medio (13 años) (pág. 12) |

|Los otros dos grados que durarían también el mismo número de años, conducirían naturalmente a la edad de 21 años, termino marcado en Francia. (pág. 13) |

|La mitad de la lección seria dada por el maestro y la otra mitad por un alumno de los primeros grados encargado de esta función. (pág. 13) |

|La acción de imitar a las letras a medida que aprenden a conocerlas, les advertirá y les permitirá retener las formas más fácilmente. (pág. 14) |

|Emplearemos libros de los cuales se pueda encerrar una instrucción apropiada a los primeros momentos de la educación. (pág. 14) |

|No se trata de enseñarles verdades, sino disponerlos a reflexionar sobre sus sentimientos y de prepararlos para las ideas morales que deben nacer un día sus |

|reflexiones. (pág. 15) |

|La piedad por los animales tiene el mismo principio que la piedad por los hombres. (pág. 15) |

|Hagamos al pueblo sensible y dulce para que no se horrorice de ver el poder residir entre sus manos: y para que no se arrepienta de haberlo restablecido en |

|todos sus derechos. (pág. 15) |

|Ellos encontraran placer en recordar cosas que ya han visto sin tomarlas en cuenta. Sentirán ya esa utilidad que tienen los libros. (pág. 16) |

|La explicación del sistema de numeración decimal es decir, que se enseñaran los símbolos que designan los números, y el método de representarlos con 10 |

|signos. (pág. 16)

|

|Habrá al mismo tiempo, un libro correspondiente para la instrucción al maestro que ira acompañando a los que están destinados para los niños (pág. 16) |

|En segundo año los libros contendrán historias morales. Tendrían por objeto hacer crecer las ideas morales… para que puedan formarse por sí solo sus propias |

|ideas. (pág.17) |

|El método de enseñanza de las ciencias debe cambiar a partir de la meta que nos proponemos en la enseñanza. (pág. 18) |

|Hará falta en la educación, insistir mucho sobre los principios de la teoría, ya que sin ella están expuestos a olvidarla pronto. (pág. 18) |

|Al enseñar aritmética… insistir mucho en la razones para todas la operaciones que esta exige, y hacerlos multiplicar estas operaciones, con el fin de hacerlas|

|habituales. (pág. 19) |

|La enseñanza no consiste mas que en mostrar la pista que ha conducido a los inventores en mostrarla ruta que ellos han recorrido y que el alumno realiza |

|necesariamente los razonamientos que ellos construyeron o aquello que hubieran hecho con un éxito semejante. (pág. 19) |

|Las nociones de la geometría, se elevaran a elementos para hacer mediciones, que desarrollaremos de manera suficiente para poder medir un terreno, no por el |

|método mas cómodo y con las simplificaciones que da la practica (pág. 20) |

|Los alumnos que se deben limitar al primer grado de instrucción, y que desde ese momento deben ocuparse domésticamente no podrán dedicarse suficiente tiempo |

|al estudio. (pág. 21)

|

|El curso se terminara con nociones de mecánica, con la explicación de los efectos de las maquinas más simples, una exposición elemental de algunos principios |

|de física, a partir de un cuadro muy simple del sistema general del mundo(pág. 21) |

|Esta imaginación pasiva, que realiza ilusiones extranjeras, tan diferente de la imaginación activa que combina e inventa, tiene como primera causa la vacuidad|

|de ideas justas y la gran abundancia de ideas vagas y confusas. (pág. 22) |

|Contrayendo el plan de estos estudios como si fueran los únicos y a fin de que sean suficientes para la generalidad de los ciudadanos, los hemos combinado de |

|manera que puedan servir de base a los estudios más prolongados (pág. 22) |

|La curiosidad no es uno de esos sentimientos ficticios que hace eliminar del alma de los niños, todavía nueva y débil. (pág. 23) |

|La segunda parte estará destinada a enseñar, con mayor detalle y entendimiento las ciencias particulares, cuya utilidad esta más comprobada. (pág. 24) |

|Si es necesario dirigir la enseñanza hacia conocimientos que son útiles de adquirir, no es menos importante escoger, para ejercitar las facultades de cada |

|individuo, los objetos hacia los actuales se dirigirá por instinto natural. (pág. 24) |

|Se explicaran las principales disposiciones de las leyes a partir de las cuales se gobierna el país; se darán nociones fundamentales de la gramática y la |

|metafísica, los primeros principios de la lógica: algunas instrucciones sobre el arte de discutir las ideas, la historia, y la geografía. (pág. 25) |

|La ignorancia no reposa jamás con la seguridad de que en el seno de la charlatanería y del absurdo de quienes tienen la autoridad de decidir sin la facultad |

|de juzgar. (pág. 26)

|

|La parte de la lógica destinada a la instrucción general debe ser muy simple y basarse en algunas observaciones sobre la forma y los diversos grados de |

|certeza o de probabilidad a los cuales es susceptible. (pág. 27) |

|Los medios de un arte se deben conformar a partir de los efectos que quisiéramos que produzca. (pág. 28) |

|El arte de hacer los discursos escritos es, entonces, la verdadera retorica de los tiempos modernos, y la elocuencia de un discurso es precisamente aquella de|

|un libro hacho para ser entendido por todas las inteligencias de la lectura rápida. (pág. 29) |

|Los libros son un medio para asegurar que serán mejores y de evitar que la superstición o la negligencia intenten demeritar la instrucción. (pág. 30) |

|El poder público no tiene previsto el deber de mantener la igualdad y hacer mejorar talentos naturales (pág. 31) |

|El objetivo principal de la educación que se impone una nación es desarrollar los talentos ahí, donde pueden ser útiles (pág. 31) |

|Si es generoso, si no se rinde a los lujos personales, una parte de su riqueza deberá ser necesariamente empleada en gastos útiles que inspiraran el espíritu |

|público o la beneficencia y aquel que haga esto debe entenderlo como un gasto respetable de su fortuna. (pág. 32) |

|Una educación que les hará perseguir los elementos de un gran hombre de ciencia, que les habrá hecho capaces de cultivarse, se convertirá para ello en una |

|fuente inagotable. (pág. 33) |

|Es en la cultura de las ciencias, en la contemplación de los grandes objetos que ellas presentan,

que el hombre virtuoso aprenderá sin pena a consolarse de la|

|injusticia del pueblo y del éxito de la perversidad. (pág. 34) |

|La función de enseñar supone la costumbre y el gusto de la vida sedentaria y regulada: exige en el carácter la dulzura y la firmeza, la paciencia y el celo, |

|el buen carácter y una suerte de dignidad; demanda en el espíritu la justicia, la fineza, la flexibilidad y el método. (pág. 34) |

|La utilidad pública no exige más que funciones que demandan de una larga preparación y tienen una suerte de perpetuidad Se podrá fijar la duración de la |

|función de los maestros en quince años para algunos puestos y en veinte para otros. (pág. 35) |

|En cuanto a la continuación en un mismo puesto después de la expiración del periodo asignado este debe permanecer solo en aquellos que tienen el interés de |

|que el puesto este bien empleado (pág. 36) |

|El talento de instruir no es el mismo que el que contribuye al progreso de las ciencias: el primero exige sobre todo la organización y el método, el segundo |

|la fuerza y la sagacidad. (pág. 37) |

|Los maestros deben tener sueldos del tesoro público y no de los honorarios pagados por los alumnos. (pág. 38) |

|En el hombre ignorante, la justicia no es más que una pasión incompatible tal vez con la dulzura, en el hombre instruido se trata de la humanidad misma |

|sometida a las leyes de la razón. (pág. 41) |

|El saber en acto, el que se construye, con obstáculos y con rupturas: es la búsqueda, el orden de los descubrimientos. (pág. 45)

|

|Un pueblo instruido confía sus intereses a los hombres cultos, pero un pueblo ignorante se convierte necesariamente en victima de los malintencionados. (pág.|

|51) |

|Es necesario que la instrucción del pueblo pueda ir a la par con los progresos de las artes y de los conocimientos generales. (pág. 52) |

|La igualdad completa entre todos los espíritus es una quimera: pero si la enseñanza pública es general y extensa, si abarca la universalidad de los |

|conocimientos: esta desigualdad estará a favor de la especie humana que se beneficia con los trabajos de los hombre cultos. (pág. 53) |

|Es más fácil juzgar a los profesores si se les ha preparado en una institución pública, si se sabe lo que les ha sido enseñado, lo que han aprendido; porque |

|si no se sabe lo que les ha enseñado, es preciso examinar no solo su capacidad, sino su doctrina. (pág. 53) |

|Antes de que se in--ventara la imprenta la educación era muy cara fue una de las causas que más contribuyeron a conservar el carácter aristocrático de sus |

|gobiernos. (pág. 54) |

|Las clases que ejercieron sobre el pueblo el dominio del que solo la educación lo podía proteger: la de los legistas y la de los sacerdotes. Los primeros se |

|apoderaban de sus negocios, los segundos de su conciencia. (pág. 55) |

|Seria, por tanto, traicionar al pueblo el no darle una instrucción moral independiente de cualquier religión particular, que lo proteja de manera segura |

|contra ese peligro que amenaza su libertad y su felicidad. (pág. 56)

………………….

SEMINARIO DE TEMAS SELECTOS DE HISTORIA DE LA PEDAGOGÍA Y LA EDUCACIÓN II

TEMA 1 EL PROYECTO DE EDUCACIÓN UNIVERSAL, LAICA Y GRATUITA EN LA REVOLUCIÓN FRANCESA. LA PROPUESTA DE CONDORCET

INSTRUCCIÓN PÚBLICA

Francois Furet y Mona Ozouf

Condorcet evoca en sus Memorias sobre la instrucción pública las inesperadas posibilidades que la revolución ha abierto para la instrucción. Desde sus inicios la Revolución aparece investida de una vocación pedagógica y ofrece a las élites ilustradas instruir a la Nación.

Los hombres del Ochenta y nueve se reconocen en la Ilustración. La Revolución pretende ser su mensajera; tiene por propósito disipar la ignorancia y combatir los prejuicios que envilecen al pueblo. La tiranía se basa en la ignorancia; la libertad, en cambio, es solidaria del genio de las letras y de las artes, y convoca a las Luces. Si la Revolución tiene el deber de ofrecer a los franceses la instrucción, las nuevas instituciones tienen igualmente la necesidad de contar con ciudadanos instruidos. Después de la Revolución para devolverle al hombre los derechos que el despotismo le usurpó, todavía es necesario preparar hombres nuevos, dignos de disfrutar los beneficios de la Revolución y aptos para conservarla.

Sólo mediante una educación, regenerada y pública, se podrán reafirmar los valores y los principios del Ochenta y nueve y podrá ponerse de manifiesto con toda su energía el espíritu público. El porvenir de la Revolución va, de la mano de una inmensa obra

pedagógica. En el transcurso de la Revolución se fusionan, dos utopías. La utopía revolucionaria que pretende echar a andar a la Historia desde cero, instalar la nueva Ciudad de la Nación soberana y feliz. La utopía pedagógica que pretende la transformación de los hombres y hacer de ellos ciudadanos a la altura de las nuevas leyes e instituciones.

Darle a la instrucción un carácter público representaba pues, poner fin a la dominación de la Iglesia en la enseñanza, e incluso a su casi monopolio escolar. La desacralización del espacio público, acelerado notablemente por la constitución civil del clero y los conflictos que le siguieron, acarrearon el desmantelamiento progresivo de la antigua red escolar. La supresión de los diezmos, afectó los beneficios relacionados con la segunda enseñanza; la exigencia del juramento cívico eliminó de la enseñanza a los sacerdotes refractarios; la supresión de las congregaciones le quitó las escuelas y las instituciones de segunda enseñanza a las asociaciones religiosas, a partir de 1792 ya prácticamente no queda nada del antiguo sistema de instrucción y, puesto que las nuevas instituciones demoran para establecerse, la voluntad de crear una instrucción pública se traduce, en un principio, en la formación de un vado escolar.

Existía otro punto de acuerdo: la tarea pedagógica se percibía comúnmente como doble: educar e instruir. La educación nacional es el alimento necesario para todos; la instrucción es la posesión de unos cuantos". El gran problema

de fa pedagogía revolucionaria es cómo hacer algo nuevo con lo viejo, existe la promesa de educar y de instruir a la nueva generación cuya formación coincide con la nueva era revolucionaria. De ahí que se den dos medios privilegiados de formación, complementarios pero diferentes.

El gran medio de educación pública se encuentra en las festividades cívicas y en las reuniones patrióticas, la instrucción, indisociable de la educación se hará por intermediación de un sistema escolar que deberá renovarse y que debería corresponder a las nuevas instituciones. En los proyectos pedagógicos revolucionarios se encuentran dos aspectos: uno se dedica a un nuevo sistema escolar, a los programas de enseñanza, etcétera, y el otro al plan de las festividades cívicas. Diferenciar la educación nacional de la instrucción pública no era, por tanto, oponerlas entre sí, sino, era poner en evidencia su complementariedad, la unidad fundamental de estos dos objetivos. La figura ideal del instructor: tendrá que enseñar a leer y a escribir a los niños y, al mismo tiempo, participar activamente en la organización de las festividades cívicas, utilizar todos los días en la escuela los libros elementales, instrumentos indispensables para la enseñanza y, el décimo día, leer a los habitantes adultos reunidos el almanaque patriótico y el catecismo cívico que enriquecen el espíritu y los corazones. También contribuirá a combatir con eficacia los dialectos y los idiomas regionales que reproducen las divisiones heredadas del

antiguo régimen y a fortalecer la cohesión de la nación, única e indivisible. La instrucción pública debe reducir las desigualdades y contribuir a la formación de una opinión pública ilustrada.

Las finalidades de la educación definidas por Condorcet reflejan su fe en el porvenir de una democracia capaz de asegurar la felicidad y el desarrollo de todos los individuos, la instrucción pública tiene como meta ofrecer a cada individuo la facilidad de desarrollar sus facultades naturales, de atender sus necesidades y de asegurar su bienestar, de conocer y de ejercer sus derechos y de perfeccionar su capacidad productiva. Así, la instrucción establecerá entre los ciudadanos la igualdad de oportunidades y hará efectiva la igualdad de los derechos reconocida por la ley. Por otra parte, al cultivar las artes y las ciencias, el sistema de instrucción pública contribuirá eficazmente al "perfeccionamiento general y gradual”. La enseñanza a todos los niveles será gratuita, la instrucción pública será laica. Al instructor no solo le corresponde la tarea de instruir a los niños, sino asegurar también una especie de formación continua de los adultos a los cuales les impartirá, cada domingo, una conferencia sobre la constitución y las leyes.

La instrucción debe conservar, en la medida de lo posible, su independencia en relación con las autoridades políticas. Ningún poder público "debe tener ni la autoridad ni el poder de impedir el desarrollo de las nuevas verdades, la enseñanza de teorías contrarias

a su política particular o a sus intereses del momento". La escuela debe basar las virtudes públicas en el espíritu crítico. El proyecto de Condorcet se distingue por su rigor intelectual, por la amplitud y modernidad de sus ideas, y por su carácter coherente y completo. No propone únicamente un modelo de escuela para la Revolución, sino que se coloca en el centro mismo de todo el debate de este periodo respecto a las relaciones entre la cultura y el poder en la sociedad democrática que deberá inventarse. El proyecto de Condorcet sufrió críticas diversas. Del lado tradicionalista, le reprochaban sobre todo su carácter laico. Los girondinos y los montañeses formularon reservas de otra naturaleza.

Le criticaban su carácter demasiado "abstracto", crítico y racionalista, su rechazo a admitir que se inculcara en la escuela el "entusiasmo revolucionario" y el papel secundario que le otorgaba a las festividades cívicas, no aprobaban, en especial, la autonomía de la enseñanza que dictaba la Sociedad Nacional de Artes y Ciencias, pues consideraban que ésta podía desembocar en una tentativa de restaurar uña "casta de maestros inamovibles". El proyecto de Condorcet, juzgado como demasiado audaz por unos y demasiado tímido por otros, no fue sometido a un examen profundo ni por la Asamblea Legislativa ni por la Convención. El Comité de Instrucción Pública lo tomó, sin embargo, corno base de sus trabajos y, en diciembre de 1792, Gilbert Romme presentó un plan que aun cuando no coincidía en algunos

puntos, se inspiraba en él. Este proyecto modificado tampoco encontró la aprobación de la Convención.

El proyecto de Le Peletier desató tanto entusiasmo como desconfianza. Para apoyarlo, Robespierre acude a la imaginación de los convencionistas: "La imaginación es la que comúnmente pone los límites de lo posible y de lo imposible; pero cuando se tiene la voluntad de hacer las cosas bien, es preciso tener el valor de traspasar esos límites".

CINCO MEMORIAS SOBRE LA INSTRUCCIÓN PÚBLICA

Condorcet

PRESENTACIÓN

La enseñanza pública tiene como tarea ayudar a los ciudadanos a deliberar consigo mismos y con los demás. Es importante establecer un vínculo entre lo epistemológico: ¿Qué conocimientos enseñar? Lo didáctico: ¿Como presentar estos conocimientos para que realmente instruyan? Y lo jurídico-político: ¿cómo poner estos conocimientos al servicio del bien público?

La preocupación humanista de la enseñanza pública se refleja en la problemática de Cicerón “es menester aprender no sólo a ser un buen ciudadano sino también a estar en armonía con toda la humanidad sin renunciar al libre albedrío”.

Existen tres grandes aprendizajes complementarios y necesarios que unifican las tesis que aparecen en Cinq memoires sur l'instructíon publique: I) el aprendizaje de los conocimientos elementales en el marco de una historia general, es la exigencia epistemológico-didáctica de la enseñanza pública. El maestro debe dominar los conocimientos elementales para saber qué es el mundo

e instruir a sus alumnos. 2) El aprendizaje de la ciudadanía ilustrada y los derechos humanos, es la instrucción cívica, indispensable para la revisión razonada de los enunciados jurídicos. 3) El aprendizaje del sentimiento de humanidad; cada derecho llevará explícito el deber que le corresponde. Este aprendizaje abre a cada alumno el panorama de la universalidad ética de la humanidad.

Estos tres aprendizajes en realidad no son más que uno: el saber mínimo, tanto el más elemental como el más humilde, contribuye a la concordia y a la emancipación general.

Condorcet unifica los aprendizajes: instruirse y cultivarse contribuye a la autoestima y al amor por la humanidad. A partir de la Revolución, sus adversarios desconocen y caricaturizan con saña la teoría de Condorcet. En julio de 1793, Robespierre pretendió suplir la enseñanza pública condorciana con la educación patriótica y espartana de Le Peletier de Saint-Fargeau. Según Condorcet, la labor de la escuela es enseñar a que cada uno sea su propio educador, capaz en todo momento de consultar su razón.

Condorcet transforma la educación pública con proposiciones institucionales y programas escolares, con análisis y exigencias de su teoría de la República. Condorcet aplica no sólo todos los principios teóricos de la enseñanza pública sino también los principios de su republicanismo; “El objetivo de la instrucción no es hacer que los hombres admiren una legislación ya hecha, sino que sean capaces de entenderla y corregirla.

TEORÍA

DE LA ESCUELA PÚBLICA

← Proposiciones previas

La teoría de la escuela pública presupone una reflexión previa sobre el problema que se plantea de manera inmediata a un pueblo legislador. Nadie está exento de cometer errores, nadie puede detentar una legitimidad de esencia en cuyo nombre pueda imponerme decisiones falsas o superfluas. Suponiendo que deba obedecer a una autoridad , sería necesario que esta pudiera no sólo probar que tiene razón, sino probar que , para cada decisión , cuanta con todas las garantías para evitar el error.

¿Pero por qué se tendría que obedecer a una autoridad? Porque existen propósitos sobre los cuales son necesarias las leyes y sobre los que es imposible permitir que cada cual actúe según su propia imaginación.

La ley no es la expresión directa de la voluntad de un grupo, es el resultado de una reflexión sobre su propia necesidad y, por ende, conlleva el concepto de humanidad.

Vincular la educación con la libertad presupone la elección de la sabiduría, modelo abierto y razonado que satisface dos exigencias.

Una primera exigencia es epistemológica y real. Existen dispositivos intelectuales en los que el poder explicativo es mayor que otros y resultan más apropiados para enfrentar los avances ineluctables de un progreso sin rumbo.

A medida que se desarrolla, la humanidad descubre continuamente nuevos procedimientos, el acervo de conocimientos aumenta.

Es preciso que un progreso voluntario

y reflexivo del pensamiento prevenga el avance ciego y mecánico de las cosas y de las costumbres.

La exigencia jurídica: encontrar una forma de saber que permita al que lo obtenga escapar a la servidumbre intelectual. Es imposible enseñar todo a todos, pero es preciso enseñar a juzgar remontándose a los principios del juicio. Condorcet define el concepto de conocimiento elemental escolar: al formar el plan de estudios como si fueran a ser los únicos, y suficientes para todos los ciudadanos, se les combinó de manera que pudieran servir de base a estudios más prolongados, y que el tiempo empleado para seguirlos no se perdiera para el resto de la instrucción.

El concepto de conocimiento escolar presenta, otro problema interesante: la proporción entre el ideal de un conocimiento mínimo satisfactorio para el conjunto de las exigencias y la extensión real de los conocimientos en un determinado momento.

← Proposiciones constitutivas

Desigualdad epistemológica, porque se condenarían facetas enteras del conocimiento bajo pretexto de “inutilidad”. Desigualdad jurídica, puesto que los “servicios” dependientes de los elementos locales y de las circunstancias económicas no tendrían homogeneidad territorial: un ciudadano podría no tener los mismos derechos que otro.

Condorcet no se pronuncia en absoluto a favor de la obligación escolar: le basta con que nadie pueda quejarse de haber sido descuidado por el poder público.

La instrucción surge de lo jurídico, no de lo social. Porque

en ella se encuentra la libertad pública necesaria para el ejercicio de la soberanía y no la libertad privada, es deber del poder público garantizar la homogeneidad, el desarrollo y la protección.

Por regla general, todo poder, es siempre enemigo de la sabiduría.

La solución resulta paradójica, pues es precisamente protegiendo la instrucción por medio de la ley como será posible independizarla de los poderes. Por lo tanto, es preciso proteger a la instrucción de los grupos de presión, incluido el que pudiera formar un Gobierno republicano.

En este sentido se podrían tomar tres clases de disposiciones:

I. En la medida de lo posible, situar los conocimientos y sus agentes fuera del alcance de los poderes (civiles, políticos, religiosos o económicos). Esta cuestión se percibe claramente en la contratación de los maestros.

Se dará preferencia fundamentalmente a los criterios de preparación según la materia que se enseña.

2. Esta primera medida implica, a su vez, un problema. Al estar instalados y protegidos, estos funcionarios, aunque sean individualmente responsables y estén rigurosamente controlados, se sentirán necesariamente tentados a abusar de su posición. Por tanto, es menester proteger a los ciudadanos del poder de los maestros. La Pedagogía negativa: deja a los maestros en libertad de aplicar sus procedimientos de enseñanza y de exposición, pero les prohíbe tres clases de comportamiento. No se pueden basar en la afectividad:"entusiasmo", seducción, humillación o terror. Esto significa

que desconoce al sujeto autónomo que está en sus manos educar. Es menester, entonces, que se haga un examen frío y severo en el que únicamente se escuche la razón antes de que surja el entusiasmo.

3. Sin embargo, aun cuando se hayan tomado las dos primeras precauciones, no estaremos protegidos de un insidioso peligro: el aparato podría, por su propio peso, volverse inerte y adormecerse en una mediocridad general. Ante este riesgo de decadencia no existe nada, interno o externo, que la pueda detener. La ley puede pedir a los más conocedores que contraten a los maestros, pero no puede hacer que el nivel de conocimiento esté siempre al máximo de lo que puede estar.

Una sociedad sin escuela o una sociedad donde la escuela no está pensada como un órgano de la libertad, está sin duda expuesta a la enajenación y lo político estaría necesariamente erigido como principio absoluto de autoridad o subordinado a la realidad social.

SOBRE LA NECESIDAD DE LA INSTRUCCIÓN PÚBLICA

Condorcet

A principios del siglo XV, Europa entera estaba sumergida en la ignorancia, se lamentaba del yugo de la aristocracia nobiliaria y de la tiranía sacerdotal, y a partir de esa época, en cada nación, los avances hacia la libertad se manifestaron de acuerdo con lo que indicaba la sabiduría.

Un pueblo instruido confía sus intereses a los hombres cultos, pero un, pueblo ignorante se convierte necesariamente en víctima de los malintencionados.

Aun cuando la libertad se respetara, aunque sea en

apariencia, y se conservara en el código de la ley. Sin duda la libertad no puede morir; pero únicamente porque los avances en los conocimientos le garantizan una duración eterna y la historia es testigo del poco éxito que han tenido las instituciones, en apariencia las mejor coordinadas, para proteger la libertad de los pueblos cuyo nivel de conocimientos no los defendía contra la hipocresía de los tiranos que saben adoptar la máscara de la popularidad o de la justicia.

Mantener la libertad y la igualdad. Exige también una cierta proporción entre los conocimientos de los hombres y sus necesidades. Es necesario, por tanto, que se perfeccionen los métodos de enseñanza, de tal forma que el mismo tiempo y la misma atención sean suficientes para adquirir conocimientos más amplios a medida que vayan haciéndose necesarios.

Así, la atención que el poder público debe otorgar a la educación del pueblo no se puede separar de aquella que debe dar a una instrucción más elevada. Los prejuicios, que casi en todos los países son la única instrucción del núcleo más numeroso, no son obra de la naturaleza, sino de la ambición, que abusando de la ignorancia y la simplicidad de los padres, se apodera del derecho de llevar al embrutecimiento y al error a las nuevas generaciones.

La igualdad completa entre todos los espíritus es una quimera; pero si la enseñanza pública es general y extensa, si abarca la universalidad de los conocimientos; esta desigualdad estará a favor de la especie humana

que se beneficia con los trabajos de los hombres cultos.

Se ha dicho que bastaba con establecer escuelas primarias a expensas de la Nación; sin duda también se consentiría en que se abrieran escuelas para la marina, la artillería y las artes marciales, pues no sería deseable que sólo los hijos de los ricos pudieran ocupar las plazas. Sin duda es bien sabido que esta instrucción es el único medio de evitar tener un gran ejército en tiempos de paz, porque se considera peligroso para la libertad.

Y algo muy importante: es más fácil juzgar a los profesores si se les ha preparado en una institución pública, si se sabe lo que les ha sido enseñado, lo que han aprendido; porque si no se sabe lo que se les ha enseñado, es preciso examinar no sólo su capacidad, sino la doctrina que practican.

Para juzgar a estas corporaciones según la experiencia, sólo hay que considerar a las que han tenido como fin el cultivo de las .ciencias matemáticas y físicas, consideradas como objeto de especulación porque son las únicas que hasta ahora han disfrutado de una cierta independencia.

Antes de que se inventara la imprenta, la educación era muy cara, y en los pueblos de la antigüedad fue una de las causas que más contribuyeron a conservar el carácter aristocrático de sus gobiernos.

La imprenta propició que la enseñanza resultara más fácil, al hacerla menos costosa, pero sólo facilitó la instrucción por medio de los libros, y la que se debe recibir por medio de la observación y

la experimentación; pero la que requiere de instrumentos, máquinas y experiencias, permanece y seguirá permaneciendo por encima de las posibilidades de la inmensa mayoría.

Cuanto más queramos que los hombres ejerzan por sí mismos una parte más amplia de sus derechos, más desearemos, para alejar cualquier predominio de una minoría, que aumente el cuerpo de ciudadanos que pueda cubrir un mayor número de funciones, y deberemos tratar de buscar con más ahínco que la instrucción se extienda; y puesto que todas nuestras leyes deben tender a disminuir la desigualdad de las fortunas, ya no es preciso contar con las riquezas individuales para cubrir los gastos necesarios para el progreso del conocimiento.

Con frecuencia los ciudadanos, engañados por hombres viles y perversos, se levantan contra las leyes; entonces la justicia y la humanidad nos reclaman a gritos emplear las únicas armas, las de la razón, para recordarles sus deberes.

Las quejas del pueblo por la carencia de víveres se elevaron con fuerza y sabemos que hay noticia de inmensas extensiones de terrenos ocupados por pantanos. Los bajos salarios son un indicio de que los trabajadores no tienen en qué ocuparse; y es cuando todo prueba la necesidad de emplear los conocimientos, de perfeccionar las artes, de abrir nuevas rutas a la industria, de dar nuevo impulso a la actividad de las mentes útiles, cuando tendríamos que elegir el momento para erradicar la ignorancia y con ella la miseria, la despoblación, la anarquía y la ser

La teoría más completa y más moderna de la escuela pública se debe a CONDORCET. En el presente volumen se encuentra, por primera vez en castellano, el texto íntegro de las Cinco memorias sobre la instrucción pública, que son uno de los principales puntos de referencia del pensamiento pedagógico contemporáneo. En ellas se formulan los principios que inspirarán la política educativa de las democracias occidentales: - Difusión y democratización de la enseñanza, que ha de contribuir a formar sujetos autónomos. - Promoción de los talentos y cultivo de la excelencia, atendiendo tanto a consideraciones individuales como sociales. - Igualdad de hombres y mujeres en el acceso a la escuela. - Concepción de la instrucción como un proceso que debe abarcar el conjunto del ciclo vital. - Libertad de enseñanza que implica, además de la libertad de cátedra y de creación de centros, la independencia de la instrucción pública con respecto al poder ejecutivo, para proteger así los saberes de los excesos del poder. - Cientificidad y rigor de los contenidos del curriculum, lo que constituye una de las razones para defender el laicismo. Asimismo, CONDORCET advierte contra el peligro de someter la instrucción pública a las voluntades de grupos particulares y de buscar únicamente el utilitarismo más inmediato. En esta edición se incorpora otra obra del mismo autor: el Informe y proyecto de decreto sobre la instrucción pública, que redactó CONDORCET a partir de las Memorias y que constituye uno de los principales documentos de referencia para múltiples innovaciones y reformas educativas contemporáneas. Asimismo Narciso de Gabriel ha redactado un cuidado prólogo para la edición española en el que se deja constancia de la influencia del pensamiento de CONDORCET en España.

Para muchos autores existe la sensación de que aún desde esa época, y a pesar del trabajo de dilucidación, la educación y la instrucción están todavía confusamente mezcladas, mientras que Condorcet se había esforzado no en separarlas, sino en articularlas filosóficamente: el poder público tiene el deber de instruir para que cada uno pueda hacerse realmente autónomo y autor de su propia educación, correspondiéndole a la familia educar al niño en su primera infancia: así es como se explica el rechazo de Condorcet al modelo espartano. Finalmente, Condorcet relaciona la república y la democracia. Es por la razón, que se desarrolla gracias a la instrucción pública, que la democracia se hace consciente de sus propias debilidades y las previene de antemano.

...

Descargar como  txt (50.5 Kb)  
Leer 31 páginas más »
txt