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Montessori Filosofia


Enviado por   •  7 de Enero de 2015  •  7.275 Palabras (30 Páginas)  •  208 Visitas

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Conceptos de Desarrollo del Niño, según María Montessori:

El embrión espiritual

En su desarrollo, el niño no sólo adquiere las facultades humanas, la fuerza, la inteligencia, el lenguaje, al mismo tiempo adopta también el ser que él construye con las condiciones del ambiente.

El despertar de las potencialidades que porta el niño, el patrón síquico mediante el cual el niño se auto-construye desde el nacimiento, es lo que María Montessori llama Embrión Espiritual. Esta energía síquica, le permite al ser humano, desenvolverse en el mundo, alcanzando espontáneamente su meta última: su pleno desarrollo. Lo que el niño forma, permanece para siempre en su personalidad.

El pleno desarrollo de su personalidad, se logra siempre y cuando el ambiente que lo rodea presente las condiciones necesarias:

1. Una relación integral con el medio ambiente (incluídas personas y elementos físicos): A través de ella puede llegar a una comprensión de sí mismo y los límites de su universo y por tanto lograr una integración de su personalidad.

2. Libertad.

“El niño construye un comportamiento adaptado no solo al tiempo y al lugar, sino también a la mentalidad local”p. 91”La Mente Absorbente del Niño”

Mente Absorbente y Periodos Sensibles:

El niño presenta diferentes fases del desarrollo observadas por la Dra. Montessori, el periodo de crecimiento más trascendente de la vida, es la etapa desde el nacimiento hasta los 6- 7 años aproximadamente, “el primer septenio”, se caracteriza por ser un proceso de desarrollo interior, con un desarrollo físico y psíquico notorio y evidente, se construye el yo interior, está presente la mente Absorbente y se presentan los períodos sensibles fundamentales.

Esta primera etapa se agrupa desde los 0 a 3 años y se caracteriza por:

- La creación inconsciente, embrión espiritual.

- El foco se centra en la formación individual.

- Adquisición de las características humanas.

- Desarrollo del movimiento.

- Período sensible del lenguaje y del orden.

- Exploración del ambiente con manos y lengua.

- Gran formación de conexiones neuronales.

- Relaciones con los objetos y su uso.

- Caminar: conquista de la independencia física: el niño ya no necesita de la madre para moverse o comer, el movimiento es otra de las conquistas maravillosas del niño. El recién nacido yace en su cama durante meses, pero transcurrido cierto tiempo camina, se mueve y goza de libertad.

Desde los 3 a los 6 años:

 Reafirmación de las habilidades adquiridas en la etapa anterior.

 Desarrollo de la mente absorbente.

 Trabajo de autoconstrucción consciente, repetición del ejercicio.

 Enriquecimiento del lenguaje.

 Interés por hechos reales y por el mundo inmediato a él.

 Interés por los objetos pequeños.

 Interés por los aspectos sociales de la vida.

 Edad de los “por qué”.

Necesidades afectivas desde el nacimiento a los 6 años:

El niño, está construyendo los aspectos físicos y mentales de su ser, por lo tanto necesita protección dentro de un ambiente preparado, un nido.

Necesita sentirse amado, querido.

Las creencias y sentimientos forman parre de nosotros mismos, se llevan en la sangre, pero es adquirido del ambiente. Todos los hábitos sociales y morales que forman parte de la personalidad, se adquieren en la primera infancia. Aún si la razón se opone a alguna creencia, quedan fijas para siempre, en la Mneme o memoria profunda e inconsciente.

El lenguaje penetra en su mente con toda su complejidad , así como el poder de dirigir sus movimientos según las necesidades de su vida. Aprende con sorprendente rapidez todo lo que se halla a su alrededor; costrumbres, religión, se fijan en su mente de forma estable. Por eso nuestros salones de clases tienen un ambiente especialmente preparado para que el niño asimile cualquier cultura difusa en el ambiente sin necesidad de enseñanza.

Los tiempos son variables de acuerdo a las características individuales de cada niño.

Normalización:

María Montessori utilizó este término para describir el proceso con el que el niño pasa de un estado de desviación, principalmente caracterizado por la ociosidad indisciplinada, a un estado normal, lleno de paz interior y orden.

Observó que la mayoría de los niños al llegar por primera vez a un aula Montessori, en un estado No Normalizado, que poco a poco se lograba en el ambiente adecuado. De esta forma, los niños lograban alcanzar un estado de armonía con su ambiente, mediante la interacción intencional de los distintos materiales especializados de cada parte del aula. Esta interacción intencional es basada en el interés espontáneo de cada niño.

Se logra la sublimación del instinto de posesión: el niño normalizado se interesa en la función y el conocimiento del objeto,

Logra superar su instinto de posesión por el interés intelectual que le lleva a procesos de aprendizajes superiores y comprensión del objeto en el medio, que le lleva a respetarlo y amarlo, tratar el medio con delicadeza.

El fenómeno de la Normalización a través del trabajo es sumamente importante, ya que la aptitud del niño para el trabajo representa un instinto vital, pues sin alguna clase de actividad, su personalidad no puede organizarse y se desvía de las líneas normales de su construcción. Este trabajo del niño se puede diferenciar al de los adultos, ya que el propósito del primero es fomentar el desarrollo de cualidades internas (concentración y orden), mientras que el objetivo del adulto es generalmente llevar a cabo algún cambio exterior en el ambiente. Por estos motivos, el trabajo forma parte integral del proceso normal del desarrollo del niño, por ende debe ser fomentado.

El niño normal no es posesivo y manifiesta un alto grado de autodisciplina. Cuando el niño recibe confianza y libertad para vivir su propia vida, en un ambiente preparado, se muestran sus cualidades puras. Sólo permitiendo el trabajo en un ambiente de respeto y libre elección, el niño se normaliza. Ls niños normalizados abandonan incluso el espíritu de posesión y competencia, sustituyéndolo por ayuda mutua.

Si el niño se acostumbra a trabajar según su orden interior enseguida accede al orden exterior, a la calma, a la autodisciplina.

El niño busca el orden en los elementos exteriores para liberar su actividad creadora.

La normalización se produce en el ofrecimiento de un trabajo tan interesante que permita concentrar toda la atención y la energía infantil.

Libre elección y Grados

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