PEDAGOGIAS ALTERNATIVAS

LA MISION

Contribuir a la formación integral y permanente del ser humano mediante la generación de espacios que permitan a los niños que viven en condiciones vulnerables construir un imaginario de mundo posible sin la imposición de las normas establecidas por una institución por medio del dialogo, la participación, la tolerancia, el respeto a su condición permitiéndole ser.

LA VISIÓN

La escuela comunitaria se debe proyectar como una esperanza para una comunidad que sufre todo tipo de problemas sociales cultural y ético y que mediante el compromiso de su Comunidad Educativa, (maestros voluntarios) contribuye a mejorar la Calidad de Vida, el Desarrollo, la Paz y la Convivencia Ciudadana.

PRINCIPIOS

Refiriéndonos a la acción educativa, la metodología en la escuela comunitaria debe estar basada en los siguientes principios:

Educación popular

Aprendizaje activo centrado en el alumno basado en:

Aprender haciendo la Escuela dará igualdad de oportunidades a los estudiantes para el acceso a los servicios, al material didáctico al desarrollo de su facultad psicomotriz.

Aprender comprensivamente, hoy en día se ha llegado a la conclusión que para lograr un aprendizaje comprensivo, deben tomarse en cuenta que:

Los estudiantes aprendan por medio de situaciones que ellos puedan manipular y observar diariamente.

Los estudiantes deben aprender a través del juego y el trabajo.

LOS OBJETIVOS GENERALES

Favorecer la capacidad de los niños y niñas de expresar y comprender su entorno de acuerdo a los procesos educativos permitiendo reconocer sus derechos fundamentales.

OBJETIVOS ESPECIFICOS

Generar espacios de convivencia y tolerancia dentro de la escuela

JUSTIFICACIÓN

La educación en Derechos humanos, en este contexto, parte del fortalecimiento de la identidad del sujeto y la cultura escolar en el que sea fundamental los derechos humanos. Considero que abrir espacios de acción-reflexión-acción en y para los derechos humanos en la escuela popular fortalece el compromiso a desarrollar una práctica educativa participativa y dialógica.

Desde la condición humana del sujeto, se debe asumir la responsabilidad de recuperar su propia fuerza y conciencia, esto sólo se logra relacionándonos desde la realidad; sólo así se podrá recordar que la vida exige un profundo respeto en todas sus formas.

El tópico de los derechos humanos, ofrece una visión exterior e interior. Lo alarmante es la necesidad de transformar, primero desde lo individual ó colectivo –interior- y así lograr el cambio desde lo exterior. Es así, como, la validación de todos los saberes se vuelve inherente, en la medida en que se entienda que el conocimiento no solo reside en las personas con educación, en los especialistas y en los técnicos; sino en la emociones y en los sentimientos de todo aquel que haga parte de una comunidad.

No obstante, quehacer del educador radica, intencionar el conocimiento, la toma de conciencia y la transformación de acciones en la dirección de los Derechos Humanos; abandonando la imparcialidad, y sin reparos se propone abiertamente para influir en la formación de sujetos que empoderen y facturen los derechos humanos.

El conocimiento en y para los Derechos Humanos, requiere de la intuición, imaginación, de lo subjetivo, de lo cotidiano. Este conocimiento debe ampliarse con la experiencia concreta individual y colectiva del sujeto. Estos serán considerados marco referencial que compromete tanto en su dimensión particular como en la colectiva.

El educador debe trabajar en la toma de conciencia de los derechos humanos, la que se facilita a través de un proceso educativo, desarrollando en el educando una capacidad crítica y reflexiva cuando se han irrespetado o violado sus derechos y los de los demás.

El quehacer del educador en y para los Derechos Humanos no solo caduca en la transmisión y obtención de conocimientos, ni mucho menos en la toma de conciencia. En Derechos Humanos, en forma especial, es capital aprender a actuar y a comportarse en la defensa de la promoción y vigencia de los derechos propios y el de los demás. Estos comportamientos no surgen de manera espontánea, sino que hay necesidades de practicarlos.

El conocimiento, es un proceso individual que se construye gracias a la interacción del sujeto con todo lo que existe en su contexto y no como se suponía en la racionalidad tradicional que era desde la autoridad, debido a que, el conocimiento impuesto no genera un nuevo conocimiento sino, una repetición de esté al ser transmitido por otro ser humano que se cree superior a sus semejantes.

Las experiencias de la cotidianidad de los educandos, su contexto familiar y comunicativo, es decir, su propia realidad, constituyen el contenidos sobre el cual se estructura un lenguaje conceptual en Derechos Humanos.

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