Enseñanza y filosofía de la enseñanza
Daniela CaquiasBiografía9 de Octubre de 2022
2.528 Palabras (11 Páginas)70 Visitas
Enseñanza y filosofía de la enseñanza
La enseñanza es una actividad, un hacer, una práctica.
Fenstermacher la establece como una actividad en la que debe haber al menos dos personas, una de las cuales posee un conocimiento o una habilidad que la otra no posee; la primera intenta transmitir esos conocimientos o habilidades a la segunda, estableciéndose una relación a fin de que la segunda los adquiera.
Enseñanza como un “intento”
Al tratarse de una relación entre personas no es posible asegurar que aquello que se debe o quiere comunicar sea efectivamente transmitido y adquirido.
La enseñanza y el aprendizaje
Fenstermacher sostiene que la relación que se establece entre la enseñanza y el aprendizaje es de dependencia ontológica y no de causalidad. El concepto de enseñanza depende del concepto de aprendizaje. Si no hubiera alguien que aprende, ¿de qué serviría desarrollar actividades de enseñanza? No se trata de una relación causal necesaria.
El aprendizaje puede realizarlo uno mismo; se produce dentro de la propia cabeza de cada uno. La enseñanza se produce estando presente por lo menos una persona más; no es algo que ocurra dentro de la cabeza de un solo individuo. El aprendizaje implica la adquisición de algo; la enseñanza implica dar algo.
- Podemos aprender sin que nadie nos enseñe y podemos enseñar sin que nadie aprenda algo.
- “el proceso de enseñanza – aprendizaje”: esta concepción es producto del hecho de que las actividades de enseñanza tienen como correlato la producción de aprendizajes. Enseñanza y aprendizaje son dos procesos diferentes.
- La enseñanza existe como actividad (y como conceptualización) porque el aprendizaje ocurre, pero ambos procesos no se identifican necesariamente.
La enseñanza es una actividad que busca favorecer el aprendizaje. Genera un andamiaje para facilitar el aprendizaje de algo que el aprendizaje puede hacerse si se le brinda ayuda.
La enseñanza es una guía que se intenta proporcionar en el proceso de aprendizaje; el objetivo de la enseñanza es el traspaso de competencias del enseñante al aprendiz.
La enseñanza sistemática existe en la medida en que se produce un proceso de comunicación entre docentes y alumnos, que permite que los primeros ayuden a los segundos a resolver problemas que no serían capaces de resolver por si mismos. El aprendizaje se da en un contexto social, histórico y cultural determinado. Los contenidos constituyen un repertorio de soluciones moldeadas por la sociedad y la cultura, la resolución de problemas es cultural y socialmente activa.
Lawrence Stenhouse afirma que: “la enseñanza es la promoción sistemática del aprendizaje mediante diversos medios”
Ángel Pérez Gómez sostiene que: ”la enseñanza es una actividad práctica que se propone gobernar los intercambios educativos para orientar en un sentido determinado los influjos que se ejercen sobre las nuevas generaciones”.
De la primera definición surge la promoción del aprendizaje como lo que es propio de la enseñanza. Esta promoción del aprendizaje es sistemática. La actividad práctica de la enseñanza afirma en un sentido sostenido y determinado una influencia social sobre los aprendices.
Podemos decir que el concepto (y fenómeno) de aprendizaje no existiría el concepto (nivel fenómeno) de enseñanza.
Aunque el aprendizaje y enseñanza sean procesos interdependientes, no es la enseñanza la causa del aprendizaje. Su razón de ser es favorecerlo y guiarlo de acuerdo con pautas culturales. Sin comunicación, contacto o significados compartidos no es posible desarrollar inducir o guiar el proceso del aprendiz.
La enseñanza como sostén y guía del aprendizaje
Sugerencias de Jerome Bruner: lo que el docente debe hacer para estimular el aprendizaje de los alumnos no es muy diferente de aquello que los adultos hacen con los bebes. Establecen diálogos o pequeñas secuencias de interacción por medio de las cuales el adulto y el niño entran en contacto. Los adultos guían el aprendizaje del niño mediante “andamiajes” o esquemas de intervención conjunta en las cuales el niño empieza por realizar las tareas más fáciles mientras el adulto se reserva las más complicadas. Se trata de un proceso de “aprendizaje guiado”, de experimentación apoyada por el adulto cuyo objetivo es el traspaso de competencias del que sabe al que aun no sabe.
En el aprendizaje sistemático en la escuela se puede provocar la delegación de competencias en el manejo de la cultura (del docente al aprendiz) mediante un proceso progresivo de apegos provisionales y la asunción paulatina de competencias y responsabilidades por parte del alumno.
La educación es una forma de dialogo en el que el niño aprende a construir imágenes y herramientas para interactuar con el mundo con la ayuda y guía del adulto. En este proceso de dialogo, el niño asume las capacidades simbólicas, técnicas y afectivas que le permiten acceder al mundo de la cultura, del pensamiento y de la vida social y política.
Cuatro factores presentes en todo proceso de enseñanza
Cualquier institución educativa supone la existencia de personas que desempeñan el papel de expertos/enseñantes y aprendices y un proceso de comunicación/influencia que permite a los primeros ayudar a los segundos a resolver problemas que no podrían resolver por si mismos. Estos problemas, en mayor o menor medida, se encuentran dentro del terreno del desarrollo potencial inmediato de los aprendices.
La educación no es simplemente un proceso de interacción/comunicación entre personas que cumplen el papel (transitorio y potencialmente reversible) de enseñante y aprendiz. Otros dos factores o elementos entran en interacción: los problemas y el conocimiento de como tratarlos en una sociedad y en una cultura o subcultura determinada.
La solución de problemas supone: a) un problema, b) saberes, recursos o capacidades que se pueden utilizar para resolverlo.
De estas consideraciones resulta que todo proceso educativo implica:
- Una persona o personas que se ubica/n o es/son ubicada/s en el papel de aprendiz.
- Una persona o personas que se ubica/n o es/son ubicada/s en el papel de enseñante.
- Algo que constituya un problema para el aprendiz (para lo cual requiere de la ayuda del enseñante) y
- El contenido necesario para resolver el problema.
La situación de enseñar y de aprender no puede describirse satisfactoriamente por una diada (docente-alumno) ni por un triangulo (docente- alumno- contenido/saber), sino que supone la interacción de un aprendiz, de un docente, de contenidos culturales y de problemas en un contexto determinado. Todos estos factores existen siempre en una particular interrelación y por el periodo en que el aprendiz tarda en resolver el problema; llegado ese momento, la relación entre los factores se redefine. El aprendiz ha desarrollado su potencial y se ha ubicado frente a nuevos problemas; lo que contaba como conocimiento a utilizar frente el problema se ha desplazado.
- Estos cuatro factores (docente, alumno, problema y contenido) interactúan en forma dinámica gracias a un proceso de comunicación.
- El aprendiz logra resolver un problema cuando establece relaciones significativas entre los recursos que le ofrece el docente (el contenido) y el o los problemas en cuestión. Y avanza en la comprensión cuando logra aplicar estos aprendizajes a otras situaciones y problemas no previstos por el planteo original del docente.
- La enseñanza y el aprendizaje se redefinen frente a un problema y un contenido determinado; ser enseñante y aprendiz es una situación provisoria y relativa.
- Nunca hay UN problema. Lo que es considerado o definido como problema depende de la perspectiva: el docente puede considerar como un problema significativo algo que sus alumnos ni siquiera alcanzan a comprender o sentir. Y, a la inversa, lo que puede ser problemático y ocupar buena parte de la preocupación de un alumno puede pasar totalmente inadvertido para el docente.
- Un contenido que el docente propone puede no ser el recurso que el aprendiz precisa para resolver el problema. Lo que define al docente experto es saber que estrategia, recursos y que contenidos son mas efectivos para ayudar a sus alumnos a resolver un problema en una situación determinada.
- En tanto proceso de comunicación, el progreso de la enseñanza y del aprendizaje es posible gracias al funcionamiento de sistemas de control.
La experiencia, la cultura y el saber de los que aprenden
Experiencia: conocimiento que se adquiere gracias a la práctica y la observación: la experiencia es madre de la ciencia.
Experimentar implica probar y examinar prácticamente una cosa, construir experiencia, obtener conocimiento a través de la práctica y la observación. No se adquiere experiencia por el solo hecho de permanecer en un lugar. Se construye experiencia a partir de una intención de aprendizaje; una experiencia se produce cuando algo se decanta, cuando una cosa se transforma o nos transforma.
...