Fuerza laboral femenina en el Chile actual

Introducción a la Macroeconomía

Sección 04
 
Ensayo Final

“Fuerza laboral femenina en el Chile actual”
 
Universidad de Chile
Facultad de Economía y Negocios
Ingeniería en Información y Control de Gestión
Santiago, Chile
Semestre Primavera 2016

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Fuerza laboral femenina en el Chile actual

Contextualizados en un Chile del siglo XXI, donde la discriminación en todo ámbito sigue siendo un tema tan contingente, no cabe duda que el machismo característico de un país conservador como el nuestro estará presente. Esta combinación de elementos da lugar al tema que se desarrollará en el ensayo a continuación, el cual girará en torno a lo que es la discriminación laboral femenina en el Chile de hoy en día, y en cómo afecta ésta a la economía nacional, ya que, por un lado, como mujeres prontas a ingresar al mundo laboral nos involucra directamente y en consecuencia no podemos estar ajenas e indiferentes, y por otro lado y como veremos, es una gran barrera para lo que es el crecimiento económico.

A lo largo del curso de Introducción a la Macroeconomía hemos hablado con respecto a la importancia que tiene la fuerza de trabajo en la economía de un país, y hemos visto cómo la brecha de participación laboral entre géneros sigue siendo muy significativa, generando un claro estancamiento en la fuerza laboral nacional producto de esta situación. El 2015, según la INE^[1], sólo participó en el mercado laboral un 48,2% de las mujeres en edad de trabajar, mientras que los hombres tuvieron una participación del 71,5%. ¿Es esta brecha fortuita, o hay alguna otra razón para esta diferencia entre ambos grupos humanos?  Nosotras creemos que existe un profundo trasfondo que explica esta situación, y que implica una de las muchas forma que toma la discriminación femenina en la sociedad, por lo que a través de este ensayo pretendemos explicar este fenómeno, para corroborar lo que creemos, brindando argumento y contraargumentos que resulten de nuestra investigación. Como anexo al tema en cuestión, trataremos inevitablemente las razones de la baja participación femenina y las diferencias en las tasas de desempleo, salario y calidad de condiciones de este género, adentrándonos en las consecuencias que esto tiene para la economía nacional, en comparación con países latinoamericanos.

Si hay algo que está muy claro en la sociedad en la que vivimos, es que está formada por una serie de estereotipos que abarcan diversos ámbitos, siendo el tema que nos convoca en este ensayo, y el que provoca este gran problema en la sociedad el que involucra los roles de género. Según el estudio llamado “La teoría de la congruencia de roles”^[2], se señala que en el campo laboral, la evaluación del desempeño de un trabajador está regida ciertamente por el sexo del individuo, súper posicionando agentes masculinos sobre los femeninos bajo ningún criterio aparente. Esta perspectiva psicosocial explica la baja representación femenina en puestos de liderazgo, dando una negativa retroalimentación a aquellas mujeres que quieran ingresar al mundo laboral, o que estando en el mismo tengan aspiraciones a ascender, restando incentivos para estas mismas a ser parte de la fuerza de trabajo.

De la mano con lo anteriormente mencionado, tenemos que el mercado laboral es ciertamente perjudicial en condiciones para las mujeres, dado el mismo sentido que se les cree inferiores en su desarrollo profesional, se les retribuye su trabajo de peor forma que el género masculino. Estas adversidades abarcan muchos ámbitos, como menores salarios en promedio haciendo las mismas labores, bajo reconocimiento de títulos y calificaciones, menor empleamiento por conceptos de costos adyacentes a ser madre, informalidades en pagos relacionados a fueros maternales, entre otros que mencionaremos.

Si bien el Sernam ayuda e incita a que las mujeres logren una autonomía económica a través de sus habilidades y competencias en el ámbito laboral, estas medidas no han sido suficientes, y así lo reflejan las cifras brindadas actualizadas, por lo que es de suma importancia la implementación y desarrollo de mejores políticas públicas, para que se reconozca el importante rol de la mujer en la sociedad, disminuyendo las desigualdades de género y brechas existentes.

Acceder y permanecer en empleos fuera del hogar es un desafío constante para las mujeres en el Chile actual, en ellas hay mucho talento y es necesario que se les dé la oportunidad de crecer y desarrollarse personalmente ya que en ocasiones son el sustento principal de la familia o simplemente quieren desenvolverse personalmente. Pese al intento que se ha hecho por parte de las autoridades, la ansiada paridad aún no llega, debemos garantizar igualdad de oportunidades para mujeres y hombres, promover la presencia de mujeres y altos cargos y además proporcionar trabajos flexibles que permitan combinar el empleo con los deberes familiares.

Según el informe publicado el presente año del Instituto Nacional de Estadísticas (INE)^[3], al analizar el ingreso medio mensual de todas las personas ocupadas residentes en Chile de 15 años o más, según su sexo y bajo las mismas condiciones se observó que las mujeres presentaron ingresos medios mensuales menores que los hombres. Mientras que el ingreso medio mensual de una mujer va desde los $280.857 hasta los $382.253, los hombres presentan ingresos medios mensuales que van desde los $417.885 hasta los $543.996, en el mismo periodo. Podemos ver que las mujeres ganan menos que los hombres bajo una brecha de 28,7%, pero, ¿Por qué se produce esta diferencia en salarios siendo que se estableció un contexto de iguales condiciones? Esto se atribuye en muchas ocasiones a que se desvaloriza la labor que las mujeres pudiesen cumplir, producto de una sociedad machista y visión peyorativa que tienen muchas personas sobre nosotras en el ámbito laboral, y en el desarrollo como profesionales, a la cual ven como inferior, vulnerable, dependiente, menos capaz, y que trae por otra parte, más costos asociados.

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