ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Inteligencia Emocional


Enviado por   •  23 de Octubre de 2014  •  3.406 Palabras (14 Páginas)  •  165 Visitas

Página 1 de 14

La inteligencia emocional, porque es más importante que el cociente intelectual?

Goleman Daniel

Hoy en día en las noticias aparecen con más frecuencia casos en que padres de familia matan a sus hijos, personas que tal vez tratan de quitarse la vida, personas que prendieron fuego a sus casas, entre otros accidentes. Este libro se enfoca en la inteligencia emocional, como manejar las emociones ya que tal vez las personas que se mencionan en casos como los de la noticias no sabían controlarlas y tomaron decisiones solo por impulso sin pensar en las consecuencias de sus actos.

Se piensa que gran parte de la de las decisiones del ser humano no exactamente se basa en la inteligencia o coeficiente intelectual de un individuo si no; el ser humano se basa en una gran parte en las emociones o sentimientos para tomar cualquier tipo de decisión. Este proceso de ante mano se sabe que se hace un poco de manera automática llamados programas de reacción.

En un sentido muy real, todos nosotros tenemos dos mentes, una mente que piensa y otra mente que siente, y estas dos formas fundamentales de conocimiento interactúan para construir nuestra vida mental.

Existe una proporcionalidad constante entre el control emocional y el control racional sobre la mente ya que, cuanto más intenso es el sentimiento, más dominante llega a ser la mente emocional.., y más ineficaz, en consecuencia, la mente racional. Ésta es una configuración que parece derivarse de la ventaja evolutiva que supuso disponer, durante incontables ocasiones, de emociones e intuiciones que guiaran nuestras respuestas inmediatas frente a aquellas situaciones que ponían en peligro nuestra vida, situaciones en las que detenernos a pensar en la reacción más adecuada podía tener consecuencias francamente desastrosas.

Cuando estamos atrapados por el deseo o la rabia, cuando el amor nos enloquece o el miedo nos hace retroceder, nos hallamos, en realidad, bajo la influencia del sistema límbico.

Cuando una persona entra en algún momento de pánico su sistema se satura neurológicamente hablando y tiende a responder sin pensar, tal vez hacer cosas que no quiere hacer, después de esto la persona no sabe bien lo que ocurrió en el transcurso de pánico. Esto le llaman secuestro límbico.

La interrupción de las conexiones existentes entre la amígdala y el resto del cerebro provoca una asombrosa ineptitud para calibrar el significado emocional de los acontecimientos, una condición que a veces se llama «ceguera afectiva».

La alarma neuronal es un poco rudimentaria ya que asocia hechos pasados con los que estamos viviendo y hace que las reacciones se parezcan a situaciones que ya hemos pasado antes. Por esto que nos hace reaccionar al presente con respuestas que fueron grabadas hace ya mucho tiempo, con pensamientos, emociones y reacciones aprendidas en respuesta a acontecimientos vagamente similares, lo suficientemente similares como para llegar a activar la amígdala.

Investigaciones dicen que la amígdala tiene un alto impacto en cuanto a los registros de emociones y esta nos puede hacer reaccionar mucho antes que el neocortex que este es el que se encarga de la inteligencia racional.

Las conexiones existentes entre la amígdala (y las estructuras límbicas relacionadas con ella) y el neocórtex constituyen el centro de gravedad de las luchas y de los tratados de cooperación existentes entre el corazón y la cabeza, entre los pensamientos y los sentimientos. Esta vía nerviosa, en suma, explicaría el motivo por el cual la emoción es algo tan fundamental para pensar eficazmente, tanto para tomar decisiones inteligentes como para permitimos simplemente pensar con claridad.

Las conexiones existentes entre la amígdala (y las estructuras límbicas relacionadas con ella) y el neocórtex constituyen el centro de gravedad de las luchas y de los tratados de cooperación existentes entre el corazón y la cabeza, entre los pensamientos y los sentimientos. Esta vía nerviosa, en suma, explicaría el motivo por el cual la emoción es algo tan fundamental para pensar eficazmente, tanto para tomar decisiones inteligentes como para permitimos simplemente pensar con claridad.

En palabras de John Mayer, un psicólogo de Universidad of New Hampshire que, junto a Peter Salovey, de Yale, ha formulado la teoría de la inteligencia emocional, ser consciente de uno mismo significa «ser consciente de nuestros estados de ánimo y de los pensamientos que tenemos acerca de esos estados de ánimo».

La tristeza, en suma, proporciona una especie de refugio reflexivo frente a los afanes y ocupaciones de la vida cotidiana, que nos sume en un periodo de retiro y de duelo necesario para asimilar nuestra pérdida, un período en el que podemos ponderar su significado, llevar a cabo los ajustes psicológicos pertinentes y, por último, establecer nuevos planes que permitan que nuestra vida siga adelante.

Para combatir la depresión son las actividades sociales, es decir, salir a comer, ir a ver un acontecimiento deportivo o al cine; en resumen, compartir algún tipo de actividad con los amigos o con la familia. Este tipo de actividades puede ser muy eficaz siempre que quede claro que el objetivo que se pretende lograr es que la mente se olvide de su tristeza porque, en caso contrario, sólo conseguirá perpetuar su estado de ánimo. En casos donde se sufra de algún sentimiento negativo el punto es no fomentarlo si no realizar actividades que nos ayuden a hacer que pensamientos o sentimientos negativos se vayan, como por ejemplo haciendo actividades con los amigos, como ir al cine y entretener en otras cosas y no solo pensar de forma negativa y mucho menos fomentar esos pensamientos ya que solo pueden ser perjudiciales.

Algunos consejos o algunas actividades que menciona el libro que puede ayudar a no fomentar la depresión o malos pensamientos es consentirse a uno mismo, como ir de compras, comer la comida preferida, un cambio de imagen aunque sea en la ropa, y en personas religiosas la oración también brinda una sensación de mejora.

Se debe considerar, el importante papel que desempeña la motivación positiva ligada a sentimientos tales como el entusiasmo, la perseverancia y la confianza sobre el rendimiento de una persona.

La preocupación es, en cierto modo, una respuesta útil aunque desencaminada, una especie de ensayo mental ante la previsión de una amenaza Pero este ensayo mental se convierte en un auténtico desastre cognitivo cuando nuestra mente se queda atrapada en una rutina obsoleta que captura nuestra atención e impide todo intento de focalizarla en cualquier otro sitio.

Según los modernos investigadores, la esperanza no sólo ofrece consuelo a la aflicción sino que desempeña un papel muy importante en dominios tan

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (21.1 Kb)  
Leer 13 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com