Pedagogía y política educativa

INTRODUCCIÓN

Las instituciones de enseñanza constituyen espacios donde se llevan a cabo y se configuran las prácticas de los docentes; estos escenarios son formadores de docentes, debido a que modelan sus formas de pensar, percibir y actuar (Lella, 1999). La práctica docente es concebida como la acción que el profesor desarrolla en el aula a través del proceso de enseñar teniendo como escenario un salón de clases generalmente.

La práctica docente se concibe según (Cabrero, Loredo Enríquez, & Carranza Peña, 2008) como “el conjunto de situaciones dentro del aula, que configuran el quehacer del profesor y de los alumnos, en función de determinados objetivos de formación circunscritos al conjunto de actuaciones que inciden directamente sobre el aprendizaje de los alumnos.”

Hoy en día el papel de los formadores no es tanto "enseñar" (explicar-examinar) los conocimientos que tendrán una vigencia limitada y estarán siempre accesibles, como lo es en realidad el ayudar a los estudiantes a "aprender a aprender" de manera autónoma en esta sociedad en constante cambio, además de “promover su desarrollo cognitivo y personal mediante actividades críticas y aplicativas que consideren las características del alumnado y les exijan un procesamiento activo e interdisciplinario de la información para que construyan su propio conocimiento y no se limiten a realizar una simple recepción pasiva-memorización de la información.” (Cea, 2012)

(Cabrero, Loredo Enríquez, & Carranza Peña, 2008) dice que la práctica educativa de los docentes es una actividad dinámica, reflexiva, que comprende los acontecimientos ocurridos en la interacción entre maestro y alumnos. No se limita al concepto de docencia, es decir, a los procesos educativos que tienen lugar dentro del salón de clases, incluye la intervención pedagógica ocurrida antes y después de los procesos interactivos en el aula.

El presente ensayo pretende enfatizar en determinados puntos con relación al desarrollo y función del docente ante un grupo de individuos al impartir clase, mostrando las características e importancia de la docencia en la práctica educativa, mediante la preparación y requerimientos de la misma. La calidad del docente tendrá mayor repercusión e impacto en una educación de calidad; considerando una buena técnica y método de docencia, involucrando teorías de educación propuestas donde se desarrolle el intelecto y consciencia del individuo, y por ende, un mejor aprendizaje.

- ¿Cómo debe influir la pedagogía en la práctica educativa?

La pedagogía es un conjunto de saberes que buscan tener impacto en el proceso educativo, en cualquiera de las dimensiones que este tenga, así como en la comprensión y organización de la cultura y la construcción del sujeto; la pedagogía tiene como objeto de estudio la “formación”: En palabras de Hegel, es aquel proceso en donde el sujeto pasa de una “conciencia en sí” a una “conciencia para sí” y donde el sujeto reconoce el lugar que ocupa en el mundo y se reconoce como constructor y transformador de éste.

La pedagogía ha evolucionado desde su aparición como término en Grecia hace muchos años, pero siempre ha tenido como base “la reflexión sobre la educación”, la pedagogía entonces se centra en los principios que guían la práctica educativa, teniendo en claro los objetivos que ésta pretende alcanzar; siendo el conjunto de saberes que pretenden tener gran impacto e influencia en el proceso educativo, a partir de la comprensión del educando como ser individual, cultural y social.

Tomando en cuenta un conjunto de teorías, las teorías pedagógicas tienen como finalidad una guía de la conducta y que se deben considerar para una mayor calidad de educación y de educandos. Retomando la práctica educativa propuesta por (Freire, 1970) se tiene una fuerte influencia de la pedagogía libertadora, eliminando doctrinas y “adiestramiento”, al establecer dialogo con el alumno y generar una retroalimentación.

(Freire, 1970) establece que el docente deberá lograr una enseñanza que involucre una igualdad e inclusión, de modo que se genere una identificación de los individuos con el docente. Es de gran importancia contar con una educación de calidad que exige la sociedad y su evolución, puesto que brinda un mejoramiento de la humanidad partiendo de la liberación de los individuos y su inclusión en su entorno.

El educador tiene como prioridad y responsabilidad el fomentar al individuo un punto de vista cada vez más crítico de su realidad, con la alta responsabilidad que este acto requiere. Al mismo tiempo, tanto el educando como el educador aprenden mutuamente por medio de la retroalimentación; tomando como base fundamental que el aprendizaje no se da con la transmisión de conocimientos, sino implica más factores.

 - ¿Cómo debe vincular el formador los conocimientos teóricos a su labor de enseñanza?

Los profesores en ejercicio van elaborando, como consecuencia de su práctica docente, un cuerpo de conocimientos profesionales sobre la enseñanza que les sirve de base en las diferentes situaciones que se encuentran en sus aulas. En definitiva, son los sujetos que unen la teoría con la acción práctica (Villar, 1986).

El conocimiento práctico, profesional o pedagógico está relacionado con la acción misma, y tendría fundamentalmente cuatro características: experiencial, ya que el profesor se encuentra con los problemas cotidianos del aula, y día a día va perfilando las estrategias necesarias para su solución; personal, puesto que el bagaje de creencias, valores, actitudes y sentimientos es diferente para cada persona; grupa/, dado que la permanencia con un grupo de compañeros, que viven y participan de una tarea común, les sirve para contrastar las propias ideas, y con textual, ya que la experiencia tiene lugar en un contexto social determinado. (Mingorance, 1989).

Las prácticas de formación crean las condiciones para la superación de los obstáculos que  afectan la relación teoría-práctica en la medida que permiten objetivar y analizar al conjunto de representaciones y significados conscientes e inconscientes que pueden entrar en contradicción con las teorías pedagógicas trasmitidas en la formación del docente. Para que ello ocurra, es necesario que se genere a partir de la experiencia, un “espacio transicional”, en el que el docente va construyendo un personaje que contiene elementos de sí mismo pero de un sí mismo moldeado por las exigencias del rol a desempeñar. (Alonso, Martini, & Ormaechea, 2000)

(Tamir, 1991) considera que los profesores tienen un conocimiento práctico, que guía su conducta, y un conocimiento teórico, que constituye parte de su estructura cognitiva, y que puede no afectar a su práctica. La transición del conocimiento teórico al práctico depende, a menudo, de las experiencias personales de cada profesor.

El docente debe establecer una relación y conexión de los conocimientos teóricos con la práctica, al momento de transmitir conocimientos al alumnado, y no sólo transmitirlo, sino fomentar una comprensión y no sólo la memorización de los conocimientos; asegurándose del aprendizaje de los individuos.

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