TEORIAS CONTEMPORANEAS EN EDUCACION

LAS TEORIAS CONTEMPORÁNEAS DE LA EDUCACIÓN

La concepción del ser humano se ha ido transformando a través del tiempo. Las diversas ideologías de pensamiento en todas partes del mundo le han conferido diferentes significados a la existencia humana. Cada concepción de la humanidad ha tenido un impacto en la educación.

En primer lugar el paradigma conductista, que si bien es cierto tiene su origen teórico en los fundamentos de John Watson, reconociéndose sus antecedentes en la filosofía de Aristóteles, Sócrates y Platón, el conductismo es la forma más antigua de aprendizaje, y, aún, después de la incorporación de diversos enfoques que posicionan al sujeto como el centro del proceso de aprendizaje, que le incorporan una connotación proactiva y sobre los cuales se ha basado el currículum de todos los niveles educativos, las prácticas docentes conductistas predominan. Y lo anterior no es únicamente responsabilidad del profesor, dicho paradigma se encuentra arraigado en las exigencias de los directivos y padres de familia.

Muy vinculado al anterior paradigma aparece el cognoscitivismo, donde se postula que también existen estructuras internas y que el aprendizaje depende de cómo el sujeto procesa la información proveniente del exterior. Desde mi punto de vista ambos paradigmas, no son excluyentes, más bien complementarios, de hecho en psicología existe la teoría cognitivo-conductual donde se combinan ambos enfoques al intervenir los problemas de la mente humana.

De esta manera, las aportaciones cognitivas son superadas o podría decirse complementados por otras posturas, que aunque de manera inicial su objetivo no estaba dirigido al campo educativo, debido a sus fundamentos epistemológicos, han sido considerados la base de todo el sistema educativo vigente, tal es el caso del humanismo y por supuesto de la concepción constructivista del conocimiento.

Piaget, con el establecimiento de las etapas del desarrollo cognitivo y las funciones invariantes, Vigotsky con el constructivismo socio-cultural y la zona de desarrollo próximo, Bruner con la organización en espiral de la instrucción y Ausbel con la teoría del aprendizaje significativo, forman la teoría constructivista del aprendizaje, que a su vez es el fundamento teórico de modelo académico actual: el aprendizaje basado en competencias.

La exigencia de atender las necesidades educativas genera que se incorporen otros enfoques a la educación, tal es la propuesta de la programación neurolingüística, que se considera un enfoque práctico que enseña al sujeto a pensar, sentir y actuar de manera diferente. De igual manera la PNL basa sus premisas en la teoría conductista del comportamiento, aunque también se fundamenta en la teoría constructivista del conocimiento.

Pero con todo y lo anterior, la pregunta obligada es ¿Por qué si la educación se ha ido transformando con la perspectiva de “proporcionar una formación integral y permanente los sujetos y que les permita el desarrollo de competencias profesionales y ciudadanas y los capacite para insertarse y promover el desarrollo humano sustentable” lo que observamos sociedad nuestras aulas y en nuestra sociedad en general dista significativamente de los propósitos que el sistema educativo se ha generado.

Si la educación tradicional proporcionaba sólo conocimientos memorísticos y la disciplina se forjaba principalmente a través del castigo, lo que actualmente es reprobable, surge de nuevo otra pregunta ¿Por qué la sociedad se regía por un sistema de valores firme que se reflejaba en el desempeño de los sujetos en la vida diaria y en el campo laboral? Nosotros mismos, aquellos que pasamos los 30, somos resultado primordialmente de esta escuela tradicional con sustento en el conductismo.

Probablemente no es que la educación tradicional sea mejor, posiblemente

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