INFORME EPISTEMOLOGIA Y EDUCACION
Daniela.Calderon4 de Mayo de 2014
8.470 Palabras (34 Páginas)249 Visitas
UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN LUIS
FACULTAD DE CIENCIAS HUMANAS
LICENCIATURA DE EDUCACION INICIAL
INFORME
EPISTEMOLOGIA Y EDUCACION
CALDERON, DANIELA
INTRODUCCION
En el presente trabajo se abordan temas sustraídos de una selección de distintos documentos desde una visión que va desde lo general a lo específico.
Dichos temas tienen que ver con la infancia y los cambios de su concepción en el transcurso de la historia universal, asimismo con la escuela como institución, debido a la estrecha relación que siempre ha habido entre infancia y escuela. Concepciones que fueron mutando y sufriendo abordajes a veces extremos.
Es por eso que paralela a la historia de la infancia tratamos aquí también los cambios particulares que fue sufriendo la escuela como institución y su imposición cada vez mas fuerte ante la sociedad como tal, como institución posibilitadora de saberes específicos y de finalidades especificas, las cuales fue persiguiendo conforme pasaba el tiempo.
Luego, para ir adentrándonos hacia nuestro objetivo, abordamos la cuestión de la escolarización en América Latina, las diferentes miradas y los distintos cambios del sistema educativo, siempre sesgados por determinados intereses que provenían del Estado de turno y las ideologías hegemónicas.
Más adelante y casi aproximándonos al objetivo final, y debido a que, hablar de infancia y de sistema educativo es implícitamente hablar de alumnos, docentes y conocimientos, no podemos soslayar el lugar que fueron ocupando los sujetos bajo la condición de alumnos o bajo la condición de docentes y la relación entre ellos de acuerdo a las diversas concepciones de las distintas épocas.
Por último, y porque somos docentes en formación pero también en desempeño, abordamos aquí y a modo de cierre, la problemática de la Práctica Docente en los contextos actuales, en la diversidad y desde una mirada abierta y critica, planteándonos temas que van estrechamente ligados a nuestra profesión y oficio como lo son las opciones epistemológicas, la relación docente-alumno-conocimiento, la relación entre teoría y práctica, la transmisión del conocimiento científico, la Investigación de la Práctica Docente, entre otros temas de igual urgencia.
DEL LIBRO: ESCUELA, PODER Y SUBJETIVACION (de Jorge Larrosa)
Tomamos las siguientes ideas como principales:
INTRODUCCION
Las categorías de pensamiento varían en función de las culturas y de las épocas históricas, están rehaciéndose constantemente y no son, como pensaba Kant, categorías a priori de la sensibilidad sino conceptos, representaciones colectivas, que están relacionadas de algún modo con las formas de organización social, y más concretamente con las formas que adopta el funcionamiento del poder del saber en cada sociedad.
Para saber con más precisión lo que significan estos marcos de inteligibilidad y de sociabilidad no basta, señala Durkheim, con buscar en nuestro interior sino que «hay que mirar fuera de nosotros, hay que observar la historia, hay que construir de arriba a abajo una ciencia; ciencia compleja que no puede sino avanzar lentamente, en base a un trabajo colectivo». En realidad esta ciencia, destinada a dar cuenta de la génesis del desarrollo, y de las funciones sociales de las categorías de pensamiento, dista aún de haber alcanzado la mayoría de edad, pero no cabe duda de que su construcción supone en la actualidad un apasionante reto.
A partir de la información de los Estados modernos, y sobre todo, con el desarrollo de las sociedades industrializadas, las exigencias sociales que pesan sobre la determinación del tiempo y del espacio se hacen cada vez más apremiantes en el interior de «el proceso de civilización» (3). De este modo, la paulatina y cada vez más intensa red de reguladores temporales va a permitir vivir el tiempo como un continuum, como un flujo invariable, lo que facilitará que la propia existencia sea percibida también como un continuum que sirve de fundamento a la categoría de identidad personal tan arraigada en nuestras sociedades occidentales.
Los controles socialmente inducidos a través de la regulación del espacio y del tiempo, contribuyen, al interiorizarse, a ritualizar y formalizar las conductas, se incardinan en la estructura misma de la personalidad al tiempo que orientan una determinada visión del mundo ya que existe una estrecha interrelación entre los procesos de subjetivación y de objetivación.
Medir y regular el tiempo de una determinada forma implica no sólo relacionar los acontecimientos de un modo específico sino también percibirlos y vivirlos de un modo peculiar. La categoría de identidad personal y la percepción de la propia vida como un continuum están, pues, en íntima relación con el hecho de que en nuestras sociedades no sólo se mide el tiempo con una puntual exactitud, sino que además es percibido socialmente como un flujo que va del pasado al presente y del presente al futuro lo que ha supuesto la elaboración conceptual de un símbolo para referirse a una relación, que no es causal, entre estos diferentes períodos temporales. Todo el libro citado de Norbert Elias es un intento de descifrar cómo en las sociedades occidentales se ha llegado a pensar el tiempo físico, el tiempo social y el tiempo subjetivo o individual como si fuesen diferentes, como si coexistiesen yuxtapuestos y no estuviesen relacionados entre sí.
El punto de partida de este estudio es la idea de que los procesos de socialización de los sujetos en las instituciones escolares ponen en juego determinadas concepciones y percepciones del espacio y del tiempo. Para entender los procesos escolares de socialización y las diferentes pedagogías es necesario tener en cuenta la configuración que en cada período histórico adoptan las relaciones sociales y, más concretamente, las relaciones de poder que inciden en la organización y definición de los saberes legítimos, así como en la formación de subjetividades específicas. Categorías espacio-temporales, poder, pedagogías, saberes y sujetos constituyen dimensiones que se cruzan, se imbrican y se ramifican en el interior de las instituciones educativas. Desarrollar las interdependencias complejas que se han producido y se siguen produciendo entre estos procesos supera con mucho las posibilidades y el objetó de este trabajo.
DEL «TIEMPO MÁGICO» DE LAS EDADES DE LA VIDA AL TIEMPO
DISCIPLINARIO: LA FORMACIÓN DEL INDIVIDUO MODERNO
Tomamos las siguientes ideas como principales:
Para los sociólogos clásicos, y en especial para Marx, Weber y Durkheim, uno de los rasgos que caracteriza la Modernidad es el proceso de individualización. A partir del siglo XVI, y sobre todo de la constitución de los Estados modernos, dicho proceso se intensifica.
Todos estos sociólogos se ocuparon, por tanto, del proceso de individualización —al que consideran el reverso del proceso de estatalización—, partiendo del análisis de procesos de carácter estructural y sin relacionarlo, más que de forma indirecta, con la construcción de las categorías de pensamiento (E. Durkheim)
En la segunda mitad del siglo XVI se configuran nuevos modelos de educación que marcan la pauta para la socialización de las jóvenes generaciones de los grupos sociales dominantes. La intensa preocupación de los reformadores y humanistas por «el gobierno de la tierna edad», los programas de enseñanza que a tal efecto diseñan, así como su aplicación, constituyeron un dispositivo fundamental para definir el nuevo estadio temporal que hoy denominamos infancia
Todavía en el Renacimiento «las edades de la vida» eran conceptos que suponían la existencia de una unidad fundamental entre los fenómenos «naturales», «cósmicos», y «sobrenaturales». El movimiento que describían los planetas en sus órbitas celestes, el ciclo de las estaciones, las fases de la luna y el ciclo de la vida humana se regían por la misma lógica. El microcosmos era un reflejo del macrocosmos y el hombre se relacionaba con todos los seres del universo a través de lazos profundos y misteriosos. Las edades de la vida expresaban una continuidad cíclica e inevitable, inscrita en el orden general de las cosas.
Con el inicio de la Modernidad el hombre tendrá que convertirse en un ser «civilizado», un ser cada vez más individualizado que, con el paso de los siglos, se transformará en el «átomo ficticio» de una «sociedad formada por individuos».
A partir del siglo XVI y que no son ajenos a esta importante mutación. La moderna definición de infancia, las nuevas formas que adoptó la educación de los niños contribuyeron, junto con otros muchos factores, a poner fin a un tiempo cósmico, mágico y cíclico.
La educación institucional, predominantemente urbana y elitista —que encontró una de sus figuras paradigmáticas en los colegios de jesuitas— supuso la elaboración de una pedagogía que al mismo tiempo que se movía y transmitía siguiendo una nueva concepción del espacio y del tiempo —como vamos a ver a continuación— concurre a la producción de l'honnéte hom me, es decir, del individuo burgués.
Este poder disciplinario, por razón de su economía y de sus efectos, tendió a extenderse por todo el cuerpo
...