Caso Samsung

Samsung es una de las compañías de telefonía móvil y artefactos electrónicos más importantes a nivel mundial. Fue fundada en Corea en el año 1938 y con el paso del tiempo comenzó a expandirse territorialmente, llegando a todos los continentes del mundo. Hoy en día produce y vende tecnología de todo tipo, adaptándose a la necesidad y comodidad de los consumidores.

En agosto del año 2016 Samsung presentaba su nuevo smarthphone de la serie Note, el Samsung Galaxy Note 7, una versión mejorada del smarthphone estrella de la marca en ese entonces, el Galaxy S7 que fue bien recibida por la crítica en su momento, como consecuencia, las expectativas del nuevo Note 7 eran muy altas.

Días posteriores a la presentación del Note 7, usuarios de todas partes del mundo empezaron a reportar explosiones en sus equipos móviles y casos de incendios, producto de ello Samsung decide suspender las ventas del Galaxy Note 7 en todo el mundo, cuando ya se cumplía 1 mes de la presentación del móvil.

EL PRIMER LLAMADO

Samsung reconoce que existen unidades defectuosas en relación a la batería, por lo cual la empresa inicia un proceso de reemplazo de todas las unidades vendidas hasta ese momento, llamando a los clientes que hayan adquirido uno de esos modelos a devolverlos a las tiendas, para cambiar a un móvil nuevo con una batería “Más segura”. Para desgracia de Samsung, ya existían más de 2 millones de modelos circulando en los mercados, lo que provocaría perdidas millonarias.

Conclusiones emitidas por Samsung en esta etapa:

• Habrá un cambio del teléfono para los usuarios que hayan tenido problemas y tengan unidades que puedan estar en esas condiciones.
• La compañía coreana confirma que el problema está en la batería, defectuosa.
• La cantidad de unidades defectuosas detectadas es de 35.

Comunicado oficial de Samsung por parte del jefe de la división móvil de Samsung, Koh Dong-jin, que fue emitida en la web oficial: [pic 1]

Durante este proceso de cambio, siguen apareciendo cada vez más casos de explosiones e incendios en el modelo, llevando incluso a que diversas aerolíneas prohibieran el uso del Samsung Galaxy Note 7 durante el vuelo. Estas noticias se expandían a través de diversos medios de comunicación, logrando afectar la imagen de la empresa cada vez más. La totalidad de estos problemas ligados al Galaxy Note 7, provocaron que se hundieran las acciones de Samsung, cayendo en un 7% al cierre, la caída más relevante del año, en un solo día.

Como medida preventiva, hasta que se complete este plan de remplazo, Samsung lanza una actualización general en los Galaxy Note 7 que limita la capacidad de carga de las baterías a un 60%.

China se vería exento este “Primer llamado” ya que según informó Samsung, las unidades vendidas en ese mercado, no tendrían fallas, ya que se utilizó otro tipo de proveedor de baterías.  

1 MES DESPUÉS DEL PROGRAMA REMPLAZO

Tras haber transcurrido un mes del proceso de reemplazo, Samsung afirma que más de 1 millón de usuarios estaría utilizando la nueva versión, con la batería ya arreglada y segura. Sin embargo en esa misma semana se vuelven a reportar explosiones e incendios en los Galaxy Note 7 de reemplazo, los dispositivos nuevos también experimentaron problemas. Esto pone a Samsung en una situación aún más compleja.

EL SEGUNDO LLAMADO

Como era de esperarse, Samsung detiene la producción del Note 7 y llama a retirar el producto del mercado, solicitando a todos sus socios a dejar de vender los Samsung Galaxy Note 7, contemplando también a la versión de reemplazo. Se solicita a todos los usuarios dueños de este equipo a apagar el teléfono y devolverlo para su rembolso o cambiarlo por otro teléfono en su defecto.

Comunicado oficial, vía web:  

[pic 2]

El 11 de octubre, Samsung anuncia el fin del modelo Samsung Galaxy Note 7, la retirada permanente del mercado. El producto no volverá a las tiendas y la empresa se compromete a realizar una investigación más detallada, además se establecerán criterios más estrictos en los próximos lanzamientos. Todo este problema le provocaría a la empresa 5.000 millones de euros en pérdidas.  

IMPACTOS DE LOS HECHOS

Los principales afectados del problema fue el segmento de clientes de Samsung, que adquirió un Samsung Galaxy Note 7, a un mes del lanzamiento del móvil se registraron 2.500.000 unidades vendidas. Un total de 35 denuncias de explosiones e incendios se notificaron.

Entre los principales casos se encuentra:

• El incendio de un automóvil en Estados Unidos, producto de la explosión del Note 7.
• Explosión de un Note 7 en una habitación de un hotel en Australia.
• Un niño de 6 años de Nueva York fue llevado al hospital después de que su teléfono Galaxy Note 7 se incendiara y le produjera quemaduras en las manos.
• Explosión de un Note 7 en un avión, que obliga a evacuar a los pasajeros.

La administración federal de Aviación de Estados unidos pide a las aerolíneas solicitar a los pasajeros no llevar este modelo de teléfono, lo que no solo afecta aún más a los usuarios del teléfono, sino también a la empresa. Estas medidas de prevención además de aplicarse en las aerolíneas, también se replicó en los autobuses y trenes.

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