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“HOTEL RWANDA”.


Enviado por   •  4 de Julio de 2016  •  Trabajos  •  2.431 Palabras (10 Páginas)  •  263 Visitas

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  1. ¿QUÉ ES UN NIÑO?

Un niño, es un ser humano con pocos años de vida, el cual no llega a ser un adolescente. Se encuentra en una etapa de niñez, la cual implica una serie de aprendizajes que van a ser claves para su desarrollo y para su formación posterior en adolescente y luego en adulto.

Dentro de esos aprendizajes, el primero que se observa es el lenguaje, que le será útil después para aprender a leer y a escribir.

En esta etapa de la niñez, los niños se guían más por las emociones, por lo que necesitan de la protección y el cuidado de sus padres, familiares y personas del colegio.

  1. “LOS NIÑOS DE HOY NO SON COMO LOS DE ANTES”

A. IDEA SOBRE INFANCIA Y LA ESCUELA EN LA MODERNIDAD Y EN LAS ÚLTIMAS DÉCADAS DEL S XX Y PRINCIPOS DEL S XXI

     

      La infancia es una construcción histórica, social y cultural. Es el resultado de un conjunto de ideas, valores y maneras de actuar, propias de una época.

Según Philippe Ariés, la infancia se concibe como una institución ligada a las prácticas familiares, modos de educación y clases sociales.

Durante muchos años, el concepto de niño, se establecía socialmente en conjunto entre la escuela, la pedagogía y la familia, “niño no se nace, sino que se forma en la escuela”.

Para Cristina Correa, es un conjunto de significados que las prácticas estatales instituyeron sobre el cuerpo del niño durante tres siglos. Esas prácticas, produjeron ideas con las que la modernidad trató, educó y produjo niños.

En la modernidad, la escuela fue un aparato del estado, se encargaba de transmitir las normas y pautas necesarias para que los nuevos niños se inserten en la sociedad.

Por ejemplo, en Argentina, los niños no solo van para saber leer y escribir, sino también para aprender a ser “argentinos”. Podríamos mencionar un lema de la escuela moderna, tal como “educar al niño, educar al ciudadano”, para saber el rol de la escuela.

La escuela fue el lugar en donde se construyó el “espíritu colectivo”, sobre todo en un país receptor de inmigrantes. Fue en las aulas donde se construyó una visión del mundo donde, la niñez, era un tiempo de maduración, donde el niño era incompleto, inacabado y solo en su etapa de adulto alcanzaba el título de ciudadano de bien.

En las últimas décadas del siglo XX y principios del siglo XXI, esta configuración de la escuela moderna cambió. Se vio obligada al cambio por el avance del mercado, que logró posicionarse como un nuevo agente.

Esto modificó el conjunto integrado por colegio, pedagogía y familia, para que pasen a competir y negociar con agencias comerciales, lo que generó que los niños comiencen a elegir y seleccionar desde antes de ser mayores de edad.

Con la inserción del mercado en la vida de los niños, estos dejaron de ser solo seres inacabados, sino una persona capaz de ser un consumidor, con solo pocos años de vida.

Hoy en día, conviven escuela y mercado, y es tarea del sistema educativo desenvolverse en esta nueva configuración, la cual tiene muchas preguntas relacionadas con la construcción de la identidad en la niñez, como ¿quién soy? ¿A dónde pertenezco?

B. ¿CUÁL ES LA INFLUENCIA Y EL FUNCIONAMIENTO DEL MERCADO?

Podemos describir que el mercado influye mucho sobre los niños, debido a la fuerte presencia de los productos de la industria y de los medios de comunicación en la vida cotidiana de ellos. Estos imponen qué gustos tener, qué usar, cómo hablar, con quién relacionarse, e inevitablemente esto ingresa en las escuelas, ya que este es el único espacio en donde los niños se relacionan con sus pares la mayor cantidad de tiempo. Entre ellos mismos, se generan influencias sobre lo que cada uno vio en las publicidades o distintos medios de comunicación.

Estas influencias, generan que los mismos niños empiecen a agruparse según gustos, y de esta manera se crean lo que conocemos como “grupos de pertenencia”.

Los adultos y docentes, muchas veces desconocen cual es personaje del momento, la música o la ropa, lo que genera un distanciamiento del niño, lo cual puede ser peligroso porque con el avance de las nuevas tecnologías, los niños tienen acceso a contenidos no acordes a su edad.

Esta brecha generacional, es cada vez más profunda y los niños crecen cada vez más autónomos e independientes, y el adulto adquiere el rol de “proveedor del mercado”, y tenga cada vez menos poder de decisión sobre que debe y que no, consumir el niño.

El mercado, es ahora un nuevo agente de socialización, encargado junto con los medios, de la nueva “pedagogía cultural”, no solo es la venta de un producto destinado a los niños, se trata también de crear un entorno en donde ese producto adquiera valor, el suficiente para ser consumido por los niños.

A través de este entorno, el producto se torna deseoso y significativo, lo cual no responde a una clase social determinada, sino a un grupo de niños con las mismas creencias simbólicas.

El mercado presenta productos y propone reglas para su uso, es aliado de los medios de comunicación, porque es a través de estos, donde se crea ese entorno para el producto y que sea visto a la vez por ese grupo de niños. Los canales de televisión para niños, son un claro ejemplo de esto, donde vemos en los cortes publicitarios, cantidades de propagandas en donde se presenta un nuevo producto al que se le creó todo un entorno para que sea deseoso de ser usado por los niños. La publicidad cumple su función de ser transmisora de un conjunto de creencias, de exponer modelos de conducta social, vinculados con una economía de mercado, además de cumplir con una función educativa, no solo marca que cosas se deben tener y que usar, sino que avanzan sobre los por qué y para qué de cada producto, enseñando un modo de tener amigos, de comunicación, vocabulario y pertenencia.

Así mismo, es importante aclarar que no solo los niños son los que consumen el mercado, sino también los adultos, con productos relacionados a su edad, entonces surge la pregunta de ¿cómo lograr que los niños se vean menos influenciados por el mercado, si los adultos que los rodean son consumidores también? Los programas de TV, las publicidades, programas de radio, entre otros, forman parte hoy en día de la vida familiar en cada hogar, debido a la sistemática presencia de estos. Por ejemplo, cenar a determinado horario porque es el momento en que esta la novela, o realizar las actividades de la vida cotidiana antes o después de tal programa, esta presencia de los medios, genera que se modifique nuestra conducta social y la relación con los nuestros, esto sucede por ejemplo, durante una cena familiar, en donde no se habla entre la familia por querer prestar más atención al programa de TV.

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