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Preguntas psicoanálisis 3er parcial


Enviado por   •  10 de Noviembre de 2018  •  Exámen  •  6.910 Palabras (28 Páginas)  •  159 Visitas

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1) Cuáles son los vasallajes del yo de acuerdo a la Segunda Tópica? Desarrolle

 El yo se somete a tres servidumbres, lo amenazan tres peligros: el mundo exterior, la libido del ello y la severidad del súper yo.

Las primeras identificaciones que toman las investiduras del ello se contraponen al yo como una instancia particular dentro de éste, el superyó (identificaciones iniciales de un yo endeble y heredero del complejo de Edipo) así como el niño obedece a sus padres el yo se somete al imperativo del superyó. El superyó puede subrogar al ello frente al yo. Reacción terapéutica negativa: sentimiento de culpa que halla su satisfacción en la enfermedad y no quiere renunciar al castigo de padecer, resistencia a la curación el enfermo no se siente culpable sino enfermo. El superyó da pruebas de su independencia del yo cc y de sus íntimos vínculos con el ello icc. La energía de investidura del superyó la aportan las fuentes del ello. El ello es totalmente amoral, Eros y pulsión de muerte luchan en el ello. El ello es el gran reservorio de la libido. Desvalido hacia ambos costados el yo se defiende en vano de las insinuaciones del ello asesino y de los reproches de la cc moral castigadora del superyó. Las pulsiones de muerte en parte se tornan inofensivas por mezcla con componentes eróticos, en parte se desvían hacia afuera como agresión y buena parte prosigue su trabajo interior sin ser obstaculizadas. El yo sustrae libido al ello y la transforma en conformaciones del yo.  El yo se desarrolla desde la percepción de las pulsiones hacia su gobierno y desde la obediencia a las pulsiones hacia su inhibición. El superyó es una formación reactiva contra los procesos pulsionales del yo. El psicoanálisis posibilita al yo la conquista progresiva del ello. El yo quiere mediar entre el mundo y el ello, hacer que el mundo haga justicia a su deseo, no sólo es auxiliador del ello también es su siervo sumiso que corteja el amor de su amo. El yo es la parte del ello alterada por la influencia directa del mundo exterior con mediación del Prcc, se afana por reemplazar el ppio de placer que rige irrestrictamente en el ello por el ppio de realidad. El yo suele trasponer en acción la voluntad del ello como si fuera la suya propia. Amenazado por los tres peligros el yo es el genuino almácigo de la angustia.

3) Cómo explica Freud la ruptura del principio de placer en Más allá del principio de placer? Qué fenómenos clínicos utiliza para dar cuenta de eso? Desarrolle uno de ellos

Basado en tres fenómenos clínicos: neurosis traumática, juego del fort-da y compulsión a la repetición Freud descubre que existe una barrera anti estímulos que el aparato utiliza para protegerse de la hipertrofia de los estímulos externos, en el caso de la neurosis traumática se produce la ruptura de esta protección, aparece el terror dado que falta el apronte angustiado que es la última trinchera de la protección anti estímulos. Los sueños traumáticos buscan desarrollar la angustia que faltó en su origen, esta función del aparato si bien no contradice el ppio. placer es independiente de él, estos sueños ya no son cumplimientos de deseo. El aparato busca ligar la energía desde el estado de libre fluir al estado quiescente.

Las compulsiones de repetición en el juego infantil así como en el tratamiento analítico muestran un carácter pulsional que se opone al ppio de placer, el enfermo se comporta de manera infantil indicando que las vivencias más tempranas se encuentran en un estado de no ligadura y son insusceptibles del proceso secundario. En el juego del fort-da se repite una escena desagradable, esta repetición va conectada a una ganancia de placer de otra índole, el niño trueca la pasividad del vivenciar por la actividad del jugar abreaccionando la intensidad de la impresión y adueñándose de la situación.

El enfermo repite lo reprimido como vivencia presente en lugar de recordarlo, lo reprimido insiste, lo inconsciente resiste, la resistencia del yo cc y prcc están al servicio del ppio placer, quiere ahorrar el displacer que se produciría si se libera lo reprimido. La compulsión a la repetición provoca displacer al yo, es displacer para un sistema y placer para el otro. Pero existe una compulsión de repetición que se instaura más allá del ppio placer, es el eterno retorno de lo igual, se repiten vivencias pasadas que no contienen posibilidad de placer ni fueron placenteras en aquel momento.

5) ¿Cómo formula Freud la entrada y salida del complejo de Edipo en el varón y la niña? Sus diferencias.

Existe una asimetría entre el complejo de Edipo  del varón y el de la niña,  ya que existe un distingo entre la castración consumada y la mera amenaza de castración. En la etapa fálica hay una equivalencia entre el clítoris y el pene sostenida en que ambos aportan una satisfacción de la misma índole. Ambos sexos ignoran la existencia de la vagina.

El niño sale del complejo de Edipo como consecuencia de la amenaza de castración, en la niña en cambio, el complejo de Edipo es posibilitado e introducido por el complejo de castración. Inicialmente la madre fue para ambos el primer objeto de amor, el niño conservará el objeto pero la niña lo resignará y tomará a cambio al padre como objeto, la niña también deberá cambiar de zona rectora del clítoris a la vagina.

 Ante la amenaza de castración en el varón  las investiduras de objeto son resignadas y sustituidas por identificación, la autoridad de los progenitores introyectada en el yo forma el núcleo del superyó que toma la severidad del padre y perpetúa la prohibición del incesto, estas aspiraciones libidinosas son en parte desexualizadas y sublimadas, y en parte mudadas en mociones tiernas. Todo este proceso salvó a los genitales y canceló su función comienza entonces el período de latencia. Este proceso más que una represión equivale a una destrucción y cancelación del complejo.

Respecto de la niña diremos que acepta la castración como hecho consumado, excluida la angustia de castración no habría motivo para interrumpir la organización genital, la muchacha se desliza por una ecuación simbólica que va del pene al hijo, de querer el pene del padre pasará a querer parirle un hijo. Ambos deseos el de poseer un pene y recibir un hijo permanecen en lo icc donde se conservan con fuerte investidura.

Significatividad del complejo de castración en la fase del primado del falo. Un daño narcisista remite al cuerpo propio, el complejo de castración en cambio se define en relación con la premisa universal del pene.

7) ¿Cómo conceptualiza Freud el Yo a partir de la segunda tópica? ¿Qué diferencia puede establecer con el Yo del narcisismo?

El yo de la segunda tópica es un yo vasallo, escindido estructuralmente, un yo de funciones pero que falla en su función de síntesis, es un yo alterado por la fijación de los mecanismos de defensa. El yo gobierna los procesos de la motilidad, traspone en acción la voluntad del ello como si fuera propia. Es un cuerpo simbólico. Su núcleo es el ello, el yo es una modificación del ello, al principio era todo ello. El yo es esclavo de la realidad exterior, del ello y del superyó. El yo tiene reservada la tarea de ligar propia del campo de las representaciones y de la pulsión de vida. Es el genuino almácigo de la angustia, que es siempre un procesamiento de la angustia de castración.

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