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Cuales son las mejores estrategias para trabajar con la diversidad en el aula Por Carol Ann Tomlinson Editorial Paidós SAICF Buenos Aires.


Enviado por   •  2 de Diciembre de 2015  •  Síntesis  •  2.248 Palabras (9 Páginas)  •  348 Visitas

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Estrategias para trabajar con la diversidad en el aula Por Carol Ann Tomlinson Editorial Paidós SAICF Buenos Aires (Argentina) Primera edición: 2005 Este material es de uso exclusivamente didáctico. ÍNDICE Prologo a la segunda edición............................................................9 Introducción..................................................................................13 1. Qué es -y qué no es- la enseñanza diferenciada…………………………………….15 2. El fundamento de la enseñanza diferenciada en aulas con estudiantes con habilidades diversas…………………………………………………….27 3. El rol del docente en un aula diferenciada………………………………………….....41 4. El ambiente de aprendizaje en un aula diferenciada………………………………51 5. Una mirada al interior de algunas aulas diferenciadas……………………………61 6. Estrategias para manejar un aula diferenciada……………………………………….71 7. Preparar a los alumnos y a los padres para un aula diferenciada..........................................................................83 8. Procedimientos para planificar clases diferenciadas por la aptitud…………………………………………………………………………………………………95 9. Procedimientos para planificar clases diferenciadas por el interés..................................................................................107 10. Procedimientos para planificar clases diferenciadas por el perfil de aprendizaje…………………………………………………………………………121 11. Diferenciación del contenido…………………………………………………………………141 12. Diferenciación del proceso……………………………………………………………………153 13. Diferenciación de los productos……………………………………………………………163 14. Las calificaciones en un aula diferenciada……………………………………………177 Un pensamiento final………………………………………………………………………………….185 Apéndice: Algunas estrategias de enseñanza y manejo para aulas con habilidades diversas……………………………………………………………187 Condensación…………………………………………………………………………………………189 Proyectos independientes………………………………………………………………………190 Centros de interés o grupos de interés…………………………………………………191 Tareas escalonadas………………………………………………………………………………..192 Agrupamiento flexible…………………………………………………………………………….193 Centros de aprendizaje………………………………………………………………………….194 Preguntas variadas…………………………………………………………………………………19s Tutorías…………………………………………………………………………………………………..196 Contratos………………………………………………………………………………………………..197 Bibliografía………………………………………………………………………………………………..199 Lecturas complementarias…………………………………………………………………….203 Índice analítico…………………………………………………………………………………………207 Capítulo 4 El ambiente de aprendizaje en un aula diferenciada El clima de cualquier aula ejerce un marcado efecto en quienes la habitan y en el aprendizaje que allí se realiza. En las clases que tienden a la diferenciación, el ambiente del aula es un factor muy importante para el logro de las metas de aprendizaje. Un aula diferenciada debe promover la conformación, y contar con el apoyo, de una comunidad de aprendizaje. Esto significa que el docente orienta a sus alumnos a desarrollar el tipo de actitudes, creencias y prácticas que caracterizarían a una buena vecindad. CARACTERÍSTICAS DE UNA COMUNIDAD DE APRENDIZAJE Una comunidad de aprendizaje presenta las siguientes características:  Todos se sienten bienvenidos y contribuyen a que los demás se sientan bienvenidos. Muchos detalles hacen que los estudiantes se sientan bienvenidos. La atención directa y positiva del docente es sin duda una forma de bienvenida. La aceptación de la presencia de todos los compañeros de clase por parte de sus pares es otra. Un salón de clase colmado de trabajos y objetos que han sido realizados por los alumnos y son interesantes de observar resultará especialmente acogedor. Una disposición flexible y optativa de los pupitres también es una forma de brindar un buen recibimiento. Un momento de la jornada en el que los alumnos y el docente puedan hablar sobre las actividades del día, o sobre la vida en general, sirve para construir puentes entre el aprendizaje y el mundo del estudiante. Piense en las cosas que a usted lo hacen sentirse bienvenido (o tienen el efecto contrario) en la casa de un vecino, en una tienda, cuando entra en su lugar de trabajo, etcétera. Es importante saber que el aula es un lugar de pertenencia. Recuerde, además, que para sentimos realmente bienvenidos en un sitio, debe haber en él personas dispuestas y dedicadas a conocernos y entendernos.  El respeto mutuo no es negociable. No es probable que lleguemos a apreciar o comprender a todas las personas con las que pasamos nuestro tiempo. Pero sí podremos mejorar el ambiente del aula si entendemos que todos compartimos la necesidad de tener algunos sentimientos comunes, como aceptación, respeto, seguridad, éxito, etcétera. Una lección de vida importante es que, más allá de nuestro género, cultura, ritmo de aprendizaje, idioma, vestimenta y personalidad, todos sentimos angustia, alegría, dudas, satisfacción, es decir, las emociones humanas. Nuestras vidas mejoran cuando se las considera valiosas y dignas de respeto. En un aula diferenciada, el docente ayuda a los alumnos a distinguir entre su impresión por lo que alguien hizo y el valor de esa persona. Además, los ayuda a aprender a resolver conflictos de maneras constructivas que apunten al problema en cuestión, sin hacer que ninguna persona o grupo se sienta menoscabado. El respeto rara vez se logra sin esfuerzo. El docente es inevitablemente el catalizador de ese esfuerzo. Es importante recordar que el humor juega un papel central en un aula acogedora y respetuosa; no así el sarcasmo ni las palabras punzantes.  Los alumnos se sienten seguros en el aula. La seguridad presupone la ausencia de peligro, no sólo físico sino también emocional. Los alumnos de una clase diferenciada deben saber que está bien pedir ayuda cuando se la necesita, que está bien decir que no saben algo, que una pregunta honesta recibirá una respuesta honesta, que no habrá gestos de impaciencia cuando alguien exprese algo que parezca insólito o evidente, que la ideas incipientes tendrán ocasión de ser desarrolladas, y así sucesivamente. La seguridad implica que si al ensayar una nueva destreza hago un esfuerzo o arriesgo una idea creativa, no me tomarán por tonto o insensato. La seguridad se da cuando nos sentimos aceptados como somos y valorados lo suficiente como para que quieran ayudamos a ser aun mejores.  Existe una expectativa generalizada de crecimiento. La meta, en un aula diferenciada, es ayudar a cada estudiante a crecer todo lo posible, tanto en sus habilidades generales como en sus talentos específicos. El docente se entusiasma con el crecimiento de cada alumno y con el de toda la clase. Los estudiantes aprenden a planear su propio crecimiento y a hablar sobre sus metas de aprendizaje y los medios para alcanzarlas. Todo crecimiento es digno de atención. En un alumno, el crecimiento podría significar que por fin comienza a entender el concepto de las fracciones, y en otro, que percibe la relación entre las fracciones, los decimales y la resta. En un aula diferenciada, el crecimiento de cada uno de los alumnos es motivo de celebración, y no es ni más ni menos valioso que el de otro.  El docente apunta al logro de las expectativas. A veces, la escuela se caracteriza por encarar la enseñanza como si fuera una especie de juego, en el que se trata de ver si el docente puede formular una pregunta o diseñar un ejercicio de examen que haga tropezar a los estudiantes, y así "ganarles". En una clase diferenciada, el objetivo del docente es determinar dónde está cada alumno en el camino hacia las metas de aprendizaje y luego proporcionarle experiencias didácticas que lo hagan ir más allá, y con mayor rapidez, de lo que le resulta fácil y cómodo. Cuando un estudiante ponga real empeño en una tarea, el docente se asegurará de brindarle el respaldo necesario para ayudarlo a lograr una meta que parecía no estar del todo a su alcance. Este tipo de ayuda suele llamarse "andamiaje". En la Figura 4.1 se enumeran algunos tipos habituales de andamiaje empleados en las aulas. Se denomina andamiaje a todo tipo de ayuda necesaria para que cualquier estudiante avance de un nivel dado de conocimientos y destrezas al siguiente. En una buena clase diferenciada, el docente eleva continuamente las expectativas de logro de cada alumno, haciendo luego lo necesario para ayudarlo a dar el próximo paso. Recuerde que ese próximo paso no será el mismo para todos, y que todos los alumnos requieren de un andamiaje para avanzar-  Prevalece una nueva clase de equidad. Solemos considerar que la equidad en un aula significa tratar a todos de la misma manera. En una clase diferenciada, la equidad debe redefinirse. Aquí, ser equitativo implica tratar de asegurarse de que cada alumno obtenga lo que necesita a fin de crecer y lograr resultados satisfactorios. Docente y estudiantes por igual son parte del equipo encargado de garantizar que la clase funcione bien para todos.  Docente y estudiantes colaboran para lograr el crecimiento y los logros mutuos. En un aula diferenciada, como en una familia numerosa, cada uno tiene que hacerse responsable de su propio bienestar y del de los demás. En este tipo de ámbito, si bien el docente es sin duda el líder del grupo, los estudiantes pueden ayudar a elaborar modalidades de trabajo, contribuir a resolver problemas y perfeccionar los hábitos, prestarse ayuda mutua, mantenerse al día en sus estudios, etcétera. Diferentes alumnos estarán en condiciones de asumir distintas cuotas de responsabilidad en un momento dado, pero a todos hay que orientarlos a que tengan más responsabilidad e independencia como estudiantes y como miembros de una comunidad de aprendizaje. Esto no sólo es esencial en el aula, sino también necesario para salir adelante en la vida. El docente crea el ambiente en el aula. Es una gran responsabilidad y una excelente ocasión para ayudar a los alumnos a encaminar sus vidas. Los docentes, como todas las personas, tenemos algunos días buenos y otros que preferiríamos olvidar. Aunque nunca logremos hacer todo lo posible para crear un ambiente positivo en el aula, tal como lo haríamos si pudiéramos predeterminar los acontecimientos, sí podemos dar un ejemplo cada vez mejor de lo que buscamos que aprendan los alumnos: a trabajar con alegría, disfrutar la compañía de los demás, ser bondadosos y demostrar afecto. Estas cosas ayudan a los estudiantes a llevar una vida más sana y gratificante, y el empeño en lograrlas ayuda al docente a ser más sabio como persona y más eficaz como profesional. PAVIMENTAR EL CAMINO AL RESPETO Y AL ÉXITO Hay dos recomendaciones prácticas para lograr un ambiente de aprendizaje positivo en el aula diferenciada que complementan la orientación más teórica hasta ahora ofrecida. Ambas indican que los alumnos de una clase diferenciada tienen que saber colaborar.  Estimule continuamente a los alumnos a ser miembros activos de un grupo. Los docentes a menudo trabajamos aislados, por lo que tenemos poca experiencia en el trabajo en equipo. Para saber cómo ayudar a los alumnos a funcionar en grupos pequeños, es conveniente que usted observe el trabajo en equipo en su aula y haga una lista de los aspectos que marchan bien y de los que marchan mal. Luego debe tratar de crear tareas y dar consignas que guíen a los alumnos hacia las modalidades de trabajo más positivas. Recuerde que los estudiantes pueden y deben ayudarlo a formar grupos que sean productivos si usted los alienta a fijar metas, reflexionar y resolver problemas. En la Figura 4.2 se proporcionan algunos lineamientos para el trabajo productivo en equipo. La Figura 4.3 muestra una serie de actividades para distintos tipos de agrupamiento. En general, recuerde que los grupos funcionarán mejor si los alumnos saben qué hacer, cómo hacerlo, qué se espera de los miembros del equipo y cuáles serán los índices de calidad tanto del proceso como del producto del trabajo. También tenga en cuenta que una tarea eficaz requiere que cada miembro del grupo haga un aporte significativo. Esto difícilmente ocurrirá si algunos integrantes del equipo conocen todas las respuestas y poseen las destrezas necesarias, y otros tienen un grado notoriamente menor de destreza y conocimientos. Los grupos no deben establecer un sistema de castas en el que algunos alumnos siempre son los aleccionadores y otros, los aleccionados. También recuerde disponer de una "salida" digna del grupo para el alumno que, por el momento, no pueda funcionar bien dentro de él aun con su ayuda y la del equipo. La alternativa no debe ser un castigo, sino la posibilidad de trabajar en otro ámbito en el que tenga más posibilidades de salir adelante.  Planifique agrupamientos flexibles. En un aula diferenciada, usted a menudo diseñará tareas basadas en su opinión personal acerca de cuáles son las aptitudes y el interés de los alumnos, así como del modo en que aprenden mejor. En esas ocasiones, seguramente asignará usted mismo la tarea más apropiada para cada alumno. Otras veces, tal vez quiera que los estudiantes discutan rápidamente una idea con el compañero de al lado o con otro que se les indique. O bien podría ser más conveniente que dispongan los pupitres en círculos y trabajen de a cuatro. En muchos casos, los alumnos pueden elegir a sus compañeros de trabajo, o quizá necesiten o prefieran estudiar solos. Al utilizar una variedad de estrategias de agrupamiento, usted podrá adecuar las tareas a los estudiantes cuando sea necesario, así como observarlos y evaluarlos en una diversidad de agrupamientos y condiciones. Esta flexibilidad también contribuye a que los alumnos no se sientan "atornillados" a un rincón determinado del aula. Durante el estudio de una unidad, en ocasiones será conveniente que los estudiantes con similar nivel de aptitud trabajen juntos o con el docente. También deberá haber ocasiones en que se propongan tareas destinadas a reunir a alumnos con distintos niveles de aptitud de un modo que resulte provechoso para todos. Algunas veces, estudiantes con intereses similares trabajarán juntos en un área que sea importante para todos, mientras que otras veces se reunirán alumnos con diferentes especialidades para contemplar una idea o tema desde varios ángulos distintos. En la Figura 4.3 se recomienda a los docentes planificar agrupamientos flexibles al comienzo de una unidad, preguntándose, por ejemplo: ¿en qué parte de esta unidad debería intervenir toda la clase?, ¿en qué momento debo planificar actividades en equipo?, ¿cuándo es más provechoso que los alumnos estudien en forma individual?, ¿cuándo debería reunirme con cada uno? El agrupamiento flexible es un componente esencial del respeto por todos los estudiantes, el reconocimiento de las diferencias individuales, la colaboración, la enseñanza orientada al logro de las expectativas y la cooperación en un aula diferenciada. *** El próximo capítulo presenta varios ejemplos del modo en que docentes de diferentes grados y materias han utilizado estos lineamientos para transformar su rol en el aula.

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