ESCUELA TRADICIONAL VS ESCUELA NUEVA, Y MI PRÁCTICA DOCENTE

ESCUELA TRADICIONAL VS ESCUELA NUEVA,

Y MI PRÁCTICA DOCENTE

Mucho se habla en educación de los tipos de escuelas, en este sentido sabemos de dos  de ellas que al parecer van en sentidos contrarios; la primera y más antigua la escuela tradicional, la otra es la llamada escuela nueva o escuela progresista.

Pero en que consiste cada una de ellas, para comenzar podemos poner en perspectiva alguna de las características que las distingue. La escuela tradicional es un modelo de enseñanza del tipo deductivo basado en la explicación que el maestro pueda dar acerca de un tema, para este modelo es de mucha importancia el orden y la autoridad que ejerce el docente. Mientras que la escuela nueva o progresiva nace a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, con el objetivo de  superar la enseñanza tradicional.

La escuela tradicional tiene rasgos que lo distinguen como el autoritarismo y verbalismo ejercido por la figura del maestro, además que existe una postergación del desarrollo afectivo, es decir, se pone poco énfasis en las relaciones establecidas entre los miembros de la comunidad de aprendizaje. En la escuela tradicional se ve al alumno de una manera pasiva – receptiva, siendo este como un ente que no tiene conocimiento al cual se le debe “llenar” de estos a través de la enseñanza realizada por una persona que es poseedor del conocimiento: el maestro.

En la escuela progresista  la enseñanza es libre y activa es decir, no solo proviene del maestro, el alumno aprende de todos lados, haciendo que el espacio educativo no solo se limite al aula  sino a todo el contexto que rodea al alumno. En este tipo de escuela el maestro toma en cuenta  los puntos de vista del alumno ofreciendo una evaluación formativa en donde se corrige errores y retroalimenta el proceso enseñanza-aprendizaje.

Existen diferencias en los principios metodológicos que sustentan a una u otra escuela. El autoritarismo del docente se hace presente en la escuela tradicional puesto que se aprende lo que  él conoce y sabe; en la escuela nueva se revaloriza el papel del docente siendo este un guía de los aprendizajes de los alumnos por eso debe estar más informado y más capacitado. Otro aspecto importante que se toma en cuenta es que la escuela nueva gira en torno al aprendizaje que alumno manifiesta  y desarrolla, en cambio en la escuela tradicional existe una adaptación del estudiante a lo que la escuela aporta a su aprendizaje. También la escuela tradicional promueve el estímulo del aprendizaje a través de premios y castigos, en tanto la escuela progresista cambia la estimulación por la cooperación, es decir, en la escuela se fomenta la solidaridad entre los estudiantes para el desarrollo de sus capacidades.

Podemos reflexionar también el papel que juegan los dos principales actores de la educación en ambos tipos de escuela: el maestro y el alumno. El maestro en la escuela tradicional es quien ocupa el lugar preponderante pues es quien diseña e imparte el conocimiento, en torno a él gira toda la actividad educativa puesto que es el poseedor del conocimiento y es quien debe enseñar a los alumnos. La escuela tradicional ve al alumno como el receptor de toda la actividad diseñada por el maestro, es quien “debe aprender”, y el aprendizaje que se fomenta es de tipo memorístico y repetidor. En la escuela nueva el maestro cede el papel preponderante de la educación al alumno y se convierte en un apoyo, guía y/o auxiliar del desarrollo del alumno; este nuevo tipo de relación está basado más en el afecto y la camaradería que en el poder y la sumisión, fomentando en el alumno la necesidad de autogobernarse y así crear y observar reglas que le ayuden en el desarrollo de su aprendizaje.

        A continuación explicamos algunas de las características de las dos tipos de escuelas que hemos hablado en este documento:

Escuela tradicional:

• Se orienta más en el enseñar que en el aprender, es decir, es más importante la función que desempeña el docente que el alumno, puesto que cree que el maestro es poseedor del conocimiento y es quien los transmite a sus alumnos; las formas de enseñar están muy apegadas al orden y disciplina que ejerza el docente sobre sus alumnos.
• Fomenta el conformismo, puesto que los alumnos están a disposición de lo que el maestro les enseñe; el alumno juega un papel pasivo de su aprendizaje.
• Se centra en los contenidos como forma del saber,  los contenidos que aporta la escuela son el único conocimiento que los alumnos deben aprender.

Escuela nueva o progresista:

• Sus actividades se basan en la observación, experimentación y manipulación, es decir el aprendizaje no se desarrolla de manera pasiva (escuchando y memorizando), sino de manera activa (haciendo y creando).
• El alumno es el centro en torno al que gira la educación, acá se toman en cuenta los intereses del alumno, las capacidades y los intereses que muestra para desarrollar libremente su conocimiento.
• La enseñanza realizada fomenta la cooperación, no solo la cooperación entre los estudiante se estimula para el desarrollo de sus capacidades, también es la importante el apoyo de la familia y las relaciones que el alumno establezca con los diferentes actores del proceso educativo.

Derivado de lo anterior y haciendo un análisis de mi práctica docente no puedo descartar que mi labor docente tenga  poco o mucho de las escuelas analizadas anteriormente, pero antes de esto quisiera contextualizar el espacio en donde desarrollo mis labores.

Así pues debo decir que las escuelas telesecundarias van dirigidas a comunidades rurales de menos de 2000 habitantes en donde el desarrollo económico y social de estas es muy marginado, y por ello los estudiantes de mi escuela carecen de algunas necesidades básicas que afectan el desarrollo de actividades y como consecuencia su aprendizaje; podemos observar casos en donde un pobre desarrollo económico de las familias repercute en la falta de una buena alimentación y debamos priorizar el cuidado de la salud, así como las mismas familias priorizan en sus hijos tener actividades económicamente favorables dejando en segundo término las escolares.  

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