Ensayo Argumentativo Nro.4 El ejercicio de la profesión docente

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                                      Maestrías en Ciencia de la Educación

                                      Mención Administración Educativa

Ensayo Argumentativo Nro.4

El ejercicio de la profesión docente

Autor:

Lcdo. Dulce María Ceballos C.I. 13.469.432

Facilitador:

Prof. Numidia Ugueto

Caracas, 17 de Marzo de 2018

INTRODUCCIÓN

       El ser un profesional de la docencia, nos sitúa en un escenario de mucha atención, y por lo menos, nos da cierto orgullo por las competencias intelectuales, morales y de humanidad que debemos desarrollar para ser buenos en esta labor. Y es que ser docente nos coloca en la posición de ejemplo a seguir o imitar, por lo que nuestras actuaciones deben estar orientadas en consonancia con estas premisas. 

      No obstante, lo anteriormente expuesto no quiere decir que el cumplimiento de esa labor en ese escenario sea sencillo, ni mucho menos un camino fácil de transitar. Es fundamental la vocación, no solo es el puesto o la remuneración, porque ejercer la labor docente implica una gran y extenuante  inversión emocional y exigencia física, sobre todo si corresponde atender secciones numerosas.  Y es que esa interacción diaria, con tantas personas nos somete a prueba en muchos aspectos, y surgen dilemas ético morales que exigen que se les haga frente, y nuestros recursos, son nuestros valores, el código de ética profesional y las leyes que se han creado para regular los actos de nuestra profesión.    

     Es por ello importante, recorrer en este ensayo los diversos aspectos que envuelven el ejercicio de la profesión docente, tales como el código deontológico de la profesión docente, el reglamento del ejercicio de la profesión docente y otras normas que nos orientan en cuanto a la conducta ética y moral que debe seguirse.

    Que reflexionemos a diario en nuestra conducta al ejercer nuestra labor docente, nos permitirá alcanzar el objetivo para el cual vamos a las aulas, que de acuerdo con Paulo Freire, “la educación no cambia el mundo: cambia a las personas que van a cambiar el mundo”. Vamos a transformar, y solo con un desempeño ético lo lograremos.

El ejercicio de la profesión docente, código de ética, deontología profesional y normativas.

     De todas las profesiones, la docencia, ha sido desde tiempos remotos, una labor excelsa, una actividad, donde se tiene la enorme responsabilidad de formar, de moldear y conducir. Un verdadero docente no se limitara a conocer los contenidos de su materia, todo lo contrario, se esforzara por conocer a sus estudiantes y las condiciones particulares de ellos, de modo que la docencia es más que impartir conocimientos, es una convivencia con los que están en el aula, o el entorno de estudio, conocer sus gustos, y aceptar sus diferencias para brindarles una formación integral.

      El docente como profesional, debe necesariamente contemplar requisitos y cualidades éticas y morales, para ejercer honestamente la profesión. Nos encontramos en un mundo revolucionado, una época crucial donde se están perdiendo los valores, y es desde la educación de donde se puede empezar a rescatar lo perdido, es el profesor, el encargado de propiciar este retomar de los valores, y para lograrlo deberá reunir cualidades éticas.     

      Todas las profesiones se rigen por reglas para orientar su ética y moral, los educadores son un factor de suma importancia para las sociedades de todo el mundo, como formadores de las generaciones de relevo también cuentan con un código de ética, ya que su labor requiere de la concientización del docente en la importancia de profundizar en todos los aspectos  metodológicos, sicológicos y sociológicos que permitan la transformación de las personas y para ello se precisa que como docentes estemos orientados por valores morales que permitan que el ejercicio profesional tenga los resultados esperados y necesarios.

     Es pertinente, en este sentido que el desempeño del docente este regulado por lineamientos que nos permitan orientar nuestra conducta, y lograr ser un referente de comportamiento social y de desempeño profesional. Las relaciones entre docente y alumno debe en este sentido estar orientada por el respeto, la honestidad, la justicia y la discreción.

     De acuerdo con el artículo Código de ética encontramos la siguiente  definición aportada en la siguiente página web, donde señala que “es un conjunto de normas y pautas que reglamentan los comportamientos de las personas dentro de una organización”. (Recuperado de http://designificados.com/codigo-de-etica/)

     Interesante también es el comentario de Angulo y Acuña (2005) que expresa sobre el código de ética que su fin es suministrar  principios generales, que ayuden como regla de decisión para cubrir las situaciones que enfrentan los docentes, y que dado nuestro entorno actual, son muchas.(Gibson,1990; citado por Angulo y Acuña,2005)  

     Un código de ética para que logre sus fines debe contemplar características como las que se mencionan a continuación:

 Declarativa: formula cuales son los valores fundamentales sobre los que está basada la ética profesional. Esto le da forma a la profesión y la distingue de otros ámbitos.

 Identificativa: permite dar identidad y rol social a la profesión, mediante la uniformidad de su conducta ética. Cuando se cumple, es de esperar que todos los profesionales actúen igual en todas partes.

 Informativa: comunica a la sociedad cuales son los fundamentos y criterios éticos específicos sobre los que se va a basar la relación profesional-personal. En este sentido, las personas ya saben que esperar del profesional de este campo.

 Discriminativa: diferencia los actos lícitos de los ilícitos, los que están de acuerdo con la ética profesional y los que no están. De esta manera, no hay razón para confundirse, dentro del campo profesional, lo malo y lo bueno está claramente definido. Nada es turbio ni confuso.

Metodológica y valorativa: da causas para las decisiones éticas concretas y permite valorar determinadas circunstancias específicamente previstas por los códigos éticos. Esto permite, aclarar los hechos, y ayuda a la decisión para resolver las situaciones que se presenten.

Coercitiva: se establece para el control social de las conductas negativas desde un punto de vista ético. Se espera, que esto contribuya a disminuir la cantidad de hechos cuestionables en el ejercicio de la profesión.

Protectiva: protege a la profesión de las amenazas que la sociedad puede ejercer sobre ella. Dado que son tantos los peligros a los que nos enfrentamos, tener a quien acudir es un alivio, pues nos recuerda la norma a seguir sin discusión.

     En vista de lo anterior, se destaca así la importancia de contar con estas normas profesionales para actuación del docente, y es preciso conocerlas muy bien, de manera que ante situaciones de índole ética, no haya duda sobre lo que debe resultar la conducta y/o decisión a tomar.

    La Deontología profesional, no es más que  un conjunto de principios y reglas éticas que regulan y guían una actividad profesional y es el gremio por lo general quien determina estas normas y las pone por escrito en un código deontológico. Es bien conocido que la deontología, en todos los campos profesionales tiene como objeto de estudio el deber y las norma morales, busca aquellas conductas que no forman parte de leyes o códigos  dentro del campo del derecho, o que no están sometidas a la supervisión de la legislación del país, y las expone con el fin de impregnar la dimensión moral en ella, y de esta forma pone de relieve que comportamientos son exigibles a los profesionales aunque no estén delimitados en el plano jurídico.

     Un ejemplo de ello lo encontramos en la lectura del código deontológico de los profesionales de la educación desarrollado en España por el Consejo General de Colegios de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras y en Ciencias, actualizado en 2010, donde se cita dentro de los compromisos y deberes en relación con los compañeros lo siguiente “Guardar el secreto profesional en relación con los datos personales de los compañeros de que se disponga en el ejercicio de cargos de responsabilidad” .(Recuperado de http://www.consejogeneralcdl.es/codigo-deontologico-de-la-profesion-docente/

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