Escuela de periodismo

El periodismo escolar constituye un avance en la concepción de la escuela como el lugar de intercambio de relaciones y de comunicación de todos los sujetos que integran el proceso escolar, humano y social que se cumple en la institución escolar.

Por otra parte, el periódico escolar sirve como instrumento formativo para que el estudiante exprese libremente sus emociones, pensamientos, aptitudes, su concepto sobre la vida, sus relaciones con la comunidad escolar, compañeros, maestros, bedeles y sus inquietudes cívicas y sociales.

Los primeros pasos del Periódico Mural en el ámbito escolar los dio el maestro Celestin Freinet, al crearlo en una escuela rural en Francia, quien en medio de las publicaciones de sus periódicos escolares impresos, decide buscar otra forma de publicación que desembocó en la creación del Periódico Mural Mudo, luego en un periódico llamado 4 columnas y el Estructurado.

Esta experiencia liderada por Freinet se inicia en Francia y desde ahí logra expandirse a Bélgica, Alemania, Inglaterra, Suiza, Italia y la Unión Soviética y en América llega a Estados Unidos, Argentina, Colombia, México y Venezuela.

En nuestro país el periódico mural hace su aparición por unos chilenos que llegan a nuestro país después de la muerte del General Juan Vicente Gómez, para asesorar a las autoridades educativas venezolanas en la apertura pedagógica que se planteaba en ese momento.

En ese momento no se solidifica el periodismo escolar en nuestras escuelas, es en 1960 cuando el maestro y periodista Jesús Rosas Marcano llega con un postgrado de París con un extraordinario cúmulo de conocimientos sobre la pedagogía Freinet.

Marcano plantea que el niño que compone un texto lo siente nacer bajo su mano, le da una nueva vida, lo hace suyo. No existe ningún intermediario en el proceso que conduce desde el pensamiento iniciado y después expresado hasta el periódico que lo leerán las demás personas. Allí están todos los pasos: escritura, composición y dibujos.

TIPOS DE PERIÓDICOS

Periódico Mural Mudo

Se llama mudo porque son los niños que a través de escritos, los van hacer hablar. Este se basa en la técnica del texto libre. Ésta técnica marca un gran movimiento de la pedagogía hacia una mayor confianza en el niño.

La necesidad de producir un texto propio despierta temprano en el niño. Dejemos al niño que escriba cuando quiera y lo que quiera.

Un texto libre debe ser verdaderamente libre. Es decir, que se escriba cuando se tenga algo que decir, cuando se sienta la necesidad de expresar por la pluma o el dibujo.

Un periódico escolar debe nutrirse de un texto libre, que sean simples y correctos, que sean historias vividas por los niños, bajo la orientación del maestro.

El maestro velará por las correcciones gramaticales necesarias, la ortografía y las formas sintácticas que el texto haya exigido para hacer clara la expresión y más eficaz el aprendizaje de la lengua materna.

En el momento que el niño termine de realizar su escrito, debe escribir su nombre al final, y el próximo niño que escriba deberá escribir con un color diferente para diferenciar de lo que escribe un niño del otro.

Al finalizar la semana, se convoca a una asamblea donde cada niño explicará lo que escribió, se nombrará a un secretario y un orador de orden.

Entre tantas de las manifestaciones de la expresión libre tenemos: palabras, dibujo, gesto, texto escrito e historias vividas.

La práctica del texto libre permitirá abrir la escuela a la vida para que los niños:

1. Se expresen espontáneamente en el medio en que viven, alargando y enriqueciendo la escuela.

2. Hagan el análisis crítico de la realidad dominante.

3. Interpreten objetivamente esa realidad.

4. Desarrollen una actitud constante de observación.

5. Cultiven y desarrollen la originalidad,

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