INTERACCIONES EN LA ESCUELA

UNIDAD II. LA PRÁCTICA DOCENTE COMO PRÁCTICA SOCIAL PROPIA

TEMA 1:

“EL PROFESOR Y SU INTERACCIÓN CON EL ALUMNO”

El autor señala que la vida cotidiana se divide en dos sectores, los rutinarios y los problemáticos y que se vive un proceso de incorporación de ambos aspectos que puede diferenciarse de los comunes. También señala que la vida cotidiana se estructura en función de una temporalidad y espacio que parten de la conciencia de los individuos sobre sus nociones de tiempo y la forma como se estructura la temporalidad en relación a su propia historia.

La vida cotidiana se presenta como una realidad interpretada por los hombres y que para ellos tiene el significado subjetivo de un mundo coherente.

En el cuadro de la unidad anterior se describe de manera general lo cotidiano de los participantes de la vida escolar de la institución en la que realizo mis practicas y lo describo desde mi perspectiva, de lo que había observado hasta el momento de la elaboración del cuadro.

En la lectura la realidad se centra como una realidad interpretada por los humanos el cual tiene un significado subjetivo de un mundo coherente. La vida cotidiana se origina en los pensamientos y acciones que están sustentados por estos como real. Lo cotidiano se divide en sectores, los cuales se pueden aprenden por rutina y otros que se presentan como problemas de diversas clases. El mundo de la vida cotidiana se estructura por el espacio y por el tiempo, el tiempo en la realidad cotidiana es continuo y limitado, mi existencia en este mundo está ordenada continuamente por su tiempo. La realidad de la vida cotidiana es algo que comparto con otros.

En la lectura de Berger y Luckmann nos enseña que la vida cotidiana se origina en las pensamientos y acciones de cada persona y que lo que para nosotros es real para los demás no lo es y que cada quien tiene un punto de vista diferente de cierto tema y debemos de tener en cuenta que debemos actuar y dirigirnos hacia los demás de acuerdo a la relación que tenga con la persona ya sea mi asociado, contemporáneo, antecesor o sucesor.

El docente debe ser una persona real en su relación con los alumnos debe ser un facilitador del aprendizaje, el propósito valido para la educación en el mundo moderno es el cambio y la confianza en el proceso y no en el conocimiento estático. El profesor debe ser una persona autentica, obra según es y entabla relación con el estudiante sin presentar una máscara, su labor será mayor a alcanzar una eficiencia mayor. El profesor va al encuentro del alumno de manera directa y personal estableciendo una relación de persona a persona.

El docente en su práctica necesita ser autentico, dirigirse al alumnado de forma personal, de modo que se pueda formar una imagen como persona y no solo como la encarnación del programa educativo; otra característica de los que tienen éxito es apreciar al alumno, su sentimientos, opiniones y toda su persona ,el aprecio, la aceptación, o la confianza son actitudes que se manifiestan en variedad de formas y si el docente adopta estas actitudes podrá aceptar el miedo y las vacilaciones con que el alumno enfrente un nuevo problema, como también la satisfacción del alumno por sus progresos . La apreciación o aceptación del alumno por parte del profesor es la expresión funcional de su confianza en la capacidad del ser humano.

A través del tiempo y la experiencia, sabemos que en el proceso enseñanza aprendizaje inciden múltiples factores para el éxito o fracaso del mismo que determinarán la calidad de los resultados.

En la interacción del proceso participan dos elementos de vital importancia como son el profesor o profesora y el estudiante, quienes de acuerdo a sus expectativas, interés y perspectivas hacia el aprendizaje desarrollarán una buena o mala relación.

El maestro como líder de su clase, coordinador de las actividades del aprendizaje, propiciará que el alumno pueda adquirir sentimientos de superación, de valor personal, de estimación, un concepto de sí mismo o todo lo contrario, sentimientos de discapacidad mental o física, frustración, apatía e inadecuación en el aula.

Los maestros y futuros maestros, como parte esencial de la relación educativa estamos obligados a promover un ambiente óptimo para que se generen buenas relaciones maestro-alumno basadas en la confianza y respeto mutuos.

Se cree que es fundamental que exista una interacción entre el profesor y el alumno ya que esto les da la confianza necesaria para que expresen sus ideas, opiniones y dudas.

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