Iniciarse en la carrera de Derecho.

Iniciarse en la carrera de Derecho.

Normalmente cuando pensamos en estudiar Derecho, creemos que estudiar es obtener los conocimientos de las Leyes y que con ello tendremos la palabra de la Ley con ese Potencial para decidir cómo se solucionaran los problemas con los que nuestros futuros representados darán solución a sus puntos de vista, ya que el conocimiento de las Leyes será la base de todas nuestras soluciones, sin saber que en realidad no existe nada más lejano que esto, sin tomar en cuenta que el conocimiento de la Ley (que si es muy importante) solo será la herramienta que fundamentará y auxiliará a encuadrar los hechos o acciones que se presentan, pero uno de los puntos de mayor trascendencia son las bases de apreciación, interpretación y aplicación de estas, donde la correcta interpretación, es fundamental básica y determinante, ya que de ello dependerá que sea aplicable en favor de quien tiene la razón, (punto a desarrollar), pues con el conocimiento de la Ley obtengo las herramientas que se adecuen o fundamenten mi razonamiento y estrategia, por ello se dice que lo expresado por el Abogado debe estar debidamente Motivado y Fundamentado, donde el motivo que me lleva a usarlas es la parte Subjetiva de mi hacer y la parte Adjetiva son esas Leyes. Por lo que, si no se interpretarlas, aplicarlas, medirlas, razonarlas, motivarlas y fundamentarlas se puede convertir en sólo un cúmulo enorme de material que debió dar solución a dichos problemas y se puede convertir en un enemigo en contra de quien la aplica, por lo que es igualmente de importante aprender a razonar bajo los principios tan acertados que señalan las competencias tan nombradas en la actualidad del Ser, Saber Ser y Saber hacer, en donde el ser es esa esencia que en todo momento se debe pensar como Abogado, cernir los hábitos, costumbres y pensares para convertirlos en una filosofía dentro del aprendizaje, con pensamiento mesurado, adecuado y acertado, en cada momento y ante cada situación que participamos, para hacer determinante una correcta aplicación sobre la acción o el hecho en estudio, debe ser perspicaz, detallista, analítico, investigador y humanitario, pues debe saber entender lo más claro posible la realidad del sujeto, de la situación, del entorno, de la sociedad y del hecho u acción, donde igualmente debe poner énfasis a disciplinarse en los tiempos y sobre todo ser muy analítico al interpretar el fondo del asunto en cuestión, no dar nada por hecho y descubrir más allá de la simple exposición del solicitante del servicio, ya que se es portador de soluciones, y no solo de teorías, es determinante no sacar conclusiones a priori del caso en cuestión, por lo que es de vital importancia la capacidad de interpretar debidamente este valioso material, adicionar en muchas ocasiones, si no es que en todas, el complemento de otras investigaciones que se relacionen, buscando declaraciones, acontecimientos fortuitos, leyes que lo complementen agraven, atenúen o dirimen según sea el caso, muchas veces por la simple combinación de leyes entre si. Un claro ejemplo que no con el simple hecho de saber que privar de la vida a alguien es un delito, porque así lo marca la Ley, por lo que se debe ver más delante, pues se corre el riesgo fatal de que a la persona que llevó a cabo dicho acto, se le condenara injustamente, por lo que otro punto importante es investigar, el fondo de la intensión, de la situación, del tiempo y del entorno, recurrir a que otra Ley lo contempla, etc.

Por lo que al entrar en el estudio del Derecho se da uno cuenta que se trata de una profesión que adicionalmente a que requiere gusto por la lectura, buena dicción, redacción, analítico, cultura general, etc. requiere también de valor, de ser frío para ejercer ciertas acciones que algunas veces pudiera intimidarnos.

Pues bien yo contemplo la carrera del derecho como una suma elementos desde subjetivos, adjetivos y objetivos así como de ser sistemático al razonar, estudiar, y analizar adecuadamente, entre otras cosas, para tener los elementos suficientes que nos permitan la correcta acción, presentación, gestoría, la intermediación, la asesoría que tenga como consecuencia la solución de las inquietudes de quienes recurren a nuestra ayuda.

La belleza que encierra la carrera de derecho es poder ser garante de respeto de los derechos de las personas, buscando la Paz en sociedad dirimiendo sus diferencias o inquietudes personales, donde lo más importante consiste en dar a cada quien lo que merece, situación que muchas veces se antoja engañosa o que en ocasiones pareciera que se beneficia más al delincuente que al afectado, es una labor que requiere el conocimiento acertado basado en el sano razonamiento y comprensión del individuo y la sociedad en la que vivimos, donde no solo es con la crítica o imponiendo nuestra verdad la que es válida, pues muchas veces puede estar muy fuera de la realidad, muchas veces heredados por los principios educacionales mal aprendidos aunado a la visión personal captada del entorno de la vida que rodea y formó como los seres que ahora somos, contenidos en los tan mencionados principios Froidianos y Lacanianos de los cuales también debemos estar conscientes de su influencia, pues el individuo no está como anacoreta aislado de la sociedad al que defendemos, sino que ese ser es resultado de la sociedad y mundo en donde le tocó vivir, donde al Derecho le corresponde poner su grano de arena cuando trata de hacer entrar en razón muchas veces en forma coercitiva (pero recordemos que la violencia genera violencia) por lo que deben ser respetados como seres sea cual sea su situación y que es a nosotros a quienes nos toca el ayudar a veces el lado del que delinque y otras tantas la del afectado, pero el principio de participación debe ser buscando dar a cada quien lo que le corresponde, de forma individual, defendiendo que la finalidad es dar paz y calidad de vida dentro de la sociedad de la cual inicia en la familia, que es a quien le compete esa formación inicial y que dependerá muchas veces de sus antecedentes o del entendimiento de la realidad para cumplir con el objetivo, siendo el que debería estar llena de principios, respeto e igualdad, pues es donde se aplica por primera vez el principio de dar a cada quien lo que le corresponde y no culpar o dejar a esa labor a la sociedad, los centros de Educación, amistades etc. Si bien esta labor es ardua, en medida de nuestro actuar ético, de razonamiento y profesionalismo podrá ser parte importante para formar un desempeño ético y de satisfacción personal.

Desde el origen de los tiempos el problema ha sido lo que se revierte a la misma sociedad, pues son los problemas que ellos mismos como individuo o sociedad genera, la mayor de las veces por carecer de los conocimientos de límites individuales dentro de la

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