DIARIO DE CAMPO

El ser humano si bien sabemos nace con la necesidad de aprender, de experimentar y por consiguiente su curiosidad aumenta tratando de explicar el medio que lo rodea, pero veamos ¿Por qué se pierde esta curiosidad en las aulas de clase?, ¿será por falta de interés, por falta de motivación, por falta de recursos, por falta de un buen maestro?, en siguiente ensayo trataremos de contestar estas interrogantes.

Se supone que la educación científica debe promover al alumno para que este adopte e interprete como propio el aprendizaje que va adquiriendo, es decir, no solo aprender por aprender. Para esto nosotros como docentes debemos hacer que los alumnos reflexionen acerca de la importancia de la ciencia, ya que como en la mayoría de las materias de secundaria y por mi experiencia el contenido queda en mayor parte aprendido por cómo te lo enseñen, por cómo te den a conocer conceptos, y las actividades que se desarrollen, como queremos que los alumnos mantengan interés en la clase si nosotros no la mostramos o simplemente y con el paso de los años se nos vuelve tedioso, como es posible que pase esto si la biología como bien sabemos es el medio que nos rodea, es el contexto en el cual nos desenvolvemos.

1 “Durante la educación obligatoria, coincidiendo con la adolescencia, es cuando los alumnos, debido a su propio desarrollo personal, comienzan a fijarse sus propias metas, a establecer sus preferencias y a adoptar actitudes que no siempre favorecen a la ciencia. La investigación psicológica ha demostrado la importancia de la motivación en el aprendizaje. Sin motivación no hay aprendizaje.”

En esta frase podemos encontrar gran parte del por qué los adolescentes no se interesan por la ciencia ya que se encuentran pasando por una fase muy difícil en su desarrollo en la que muy pocas veces el alumno tiene definido lo que quiere y cuando lo quiere haciendo mas difícil que realmente la ciencia se vuelva una prioridad en su vida.

Consideramos que aprender a enseñar ciencias comporta adquirir conocimientos sobre las bases teóricas en que se fundamenta la didáctica de las ciencias experimentales. Los futuros profesores deben saber que hay más de una forma de explicar qué es la ciencia y que las decisiones sobre que contenidos enseñar en el aula y para que enseñar ciencias a los alumnos de secundaria se toman en base a una de las posibles explicaciones sobre la naturaleza de la ciencia. Esto requiere un profesional habituado a cuestionar y cuestionarse sobre su pensamiento y su práctica; un profesor con autonomía para aprender desde su práctica al reconocer sus aciertos y fallas y que tome decisiones, apoyándose en la teoría. Por otra parte, debe ser capaz de reflexionar sobre como aprenden los estudiantes y conocer las teorías actuales sobre el aprendizaje, en particular las propuestas desde el campo de la didáctica de las ciencias para interpretar las dificultades de los alumnos en su aprendizaje, así como los factores personales y sociales que influyen en dicho proceso. Además han de aprender que las decisiones sobre cómo enseñar, no son independientes de los aspectos antes mencionados y que en función de éstos, el profesor

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