Protección auditiva

PROTECCIÓN AUDITIVA

Ana Hombrados García

3M España. Asesoría Técnica-Productos de Protección Personal y Medio Ambiente

En el campo de la prevención de riesgos laborales, los programas de reducción de exposición al ruido resultan un gran reto. Los empresarios se ven afectados por una legislación (RD 286/2006) más exigente que su predecesora.

Además, muchas veces es difícil convencer al trabajador del riesgo que supone la exposición al ruido. Por un lado, el ruido está asociado a muchas de nuestras actividades diarias y no pensamos en él como en un riesgo. Por otro, nuestro cuerpo nos da muy pocas señales del daño que se está produciendo. La pérdida de audición tiene lugar de manera muy lenta, generalmente durante muchos meses e incluso años.

La sordera tiene un carácter progresivo e irreversible. Comienza por una pérdida significativa de agudeza auditiva a los 4000 Hz que no representa ninguna molestia. Si la exposición continúa, la pérdida auditiva se desplaza a una zona de frecuencias donde tiene lugar la conversación. Con exposiciones más prolongadas, la persona oirá ruidos desagradables tales como silbidos y zumbidos que en muchos casos no podrán ser eliminados.

La pérdida de audición no es el único efecto del ruido sobre el organismo. La exposición al ruido se asocia también con enfermedades relacionadas con el estrés, en particular, hipertensión, insomnio y fatiga nerviosa. Otras quejas frecuentes incluyen dolores de cabeza, aumento de la tensión muscular, ansiedad e irritabilidad. Todos estos efectos pueden ser causa de accidentes pues comprometen la capacidad de reacción del trabajador.

Motivar a los trabajadores para que utilicen los protectores auditivos no resulta una tarea sencilla. Las claves del éxito pasan por:

I. Evaluación higiénica de ruido del puesto, los niveles de exposición, y los planes de control y minimización puestos en marcha.

II. Una correcta selección del protector para que resulte adecuado al puesto, teniendo en cuenta factores fundamentales que desarrollaremos como características inherentes al puesto, a la persona, a la tarea y al tipo de actividad.

III. Formación sobre el uso y cuidado de los protectores auditivos.

A continuación desarrollaremos cada uno de estos puntos.

I. EVALUACIÓN HIGIÉNICA DE RUIDO DEL PUESTO

El técnico de Prevención debe realizar la evaluación de ruido en la empresa como parte del proceso total de la gestión preventiva.

Un vez realizadas las mediciones y establecidos los niveles de exposición de los trabajadores se compararán con los valores de acción legales. Estos niveles de acción definidos nos guiarán a través del proceso para la reducción de la exposición.

RD 286/2006 Niveles de exposición y planes de control

La Directiva Europea del Ruido 2003/10/EC supone una reducción de 5 dB en el primer nivel de acción respecto a la directiva anterior. Esta reducción nos lleva a establecer el nivel inicial de acción en 80 dB, nivel al que el empresario debe tomar varias acciones, entre ellas ofrecer al trabajador equipos de protección auditiva.

En España esta directiva se incorpora al Derecho español mediante el RD 286/2006, derogando el anterior RD 1316/1989. El último sector en incorporarse a esta nueva legislación ha sido el de la música y el ocio (en febrero de 2008). Existe aún un último sector, el personal a bordo de buques de navegación marítima, cuyo plazo de adaptación se extiende hasta febrero de 2011.

Otro nuevo concepto que introduce la directiva, y por tanto el RD, en España de forma novedosa es el concepto de valor límite de exposición diaria fijado en 87 dB. Este se fija con la finalidad de evitar daños irreversibles en el oído del trabajador. Representa un nivel de exposición que, como hemos indicado anteriormente, no debe superarse en ningún momento y tiene en cuenta la utilización del protector auditivo.

Esta es una diferencia importante con respecto a la legislación anterior: el límite que se establece en cuanto a exposición personal al ruido permite tener en cuenta el uso de la protección auditiva. Esto significa que cualquier industria no queda limitada en su actividad siempre que haya hecho todo lo posible para reducir el ruido y que los trabajadores lleven protección auditiva adecuada.

En la determinación de los valores de exposición que dan lugar a una acción no se tienen en cuenta los efectos producidos por los protectores auditivos.

A continuación les mostramos un cuadro comparativo de ambas legislaciones y acciones a tomar asociadas a estos niveles.

TIPOS DE PROTECTORES AUDITIVOS

Existen fundamentalmente dos tipos de protectores auditivos: orejeras y tapones.

Los tapones pueden ser desechables, reutilizables o con banda.

Las orejeras pueden utilizarse también acopladas a cascos de seguridad. Algunas orejeras disponen de control electrónico que ofrece una atenuación dependiente del nivel de ruido o incluso integran emisoras que permiten una perfecta comunicación entre los trabajadores. Otras disponen de una radio FM con límite de sonido para trabajos monótonos y repetitivos.

Cada uno de los grupos tiene beneficios y diferencias entre ellos que van a ser definitivos en su selección. De forma general podemos decir de cada grupo:

1. Tapones. Este grupo a su vez se subdivide en tres subgrupos cuyas características generalmente suelen ser:

Tapón desechable 3M 1110. 1.1. Tapones desechables.

⊠ Comodidad.

▪Espuma suave que se amolda al tamaño del canal auditivo

▪Forma anatómica.

▪Suelen ser hipoalergénicos.

⊠ Eficacia.

▪Alto nivel de atenuación cuando se llevan bien ajustados (hasta 39 dB).

⊠ Aceptación

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