EXPOSICION ESCUELA POSICIONAMIENTO

Miguel Caballero, el “Armani” de la ropa blindada, comenzó en este negocio hace 20 años con solo diez dólares y explica que el auge de este negocio "forma parte de una cultura cada vez mayor hacia la prevención".

Caballero tiene entre sus clientes a líderes políticos como Hugo Chávez, Rafael Correa o Mauricio Funes, además del actor de Hollywood Steven Seagal. Pero no sólo a ellos, aunque no quiere descubrir la identidad de otras personalidades destacadas del mundo de la política y los negocios.

El Armani de la ropa blindada

El mundo lo conoce como el Armani de la ropa blindada. Y aunque tiene una boutique en México, otra que está próxima a ser inaugurada en París, y a que entre sus clientes se encuentran los Príncipes de Asturias, el actor Steven Seagal y el presidente venezolano Hugo Chávez, él prefiere que lo llamen por su nombre: Miguel Caballero.

"Discreción, comodidad, seguridad y diseño", en eso pensaba Caballero a comienzos de la década de los 90, cuando se dio cuenta de que los escoltas de su mejor amiga de la universidad siempre dejaban los chalecos en el carro por pesados y engorrosos.

La primera prenda que confeccionó fue una chaqueta de cuero. "En ese momento usamos material de blindaje vehicular. Pesaba alrededor de seis kilos". Algo absurdo si se tiene en cuenta que hoy sus creaciones no alcanzan ni la mitad de ese peso. "Sueño con diseñar un traje que no supere los 500 gramos", anota. Para ese momento la chaqueta blindada pesaba mucho y no era muy discreta, sin embargo era una novedad. A Miguel, entonces, se le ocurrió llamar al noticiero QAP para averiguar si existía alguna posibilidad de que le hicieran una nota. Habló con Jorge Alfredo Vargas, quien accedió a entrevistarlo siempre y cuando le disparara a él en vivo y en directo. "Yo no quería disparar porque nunca lo había hecho. Era muy arriesgado, pero un colega me convenció de hacerlo y finalmente me atreví. Aunque no le disparé al presentador sino a él".

Desde entonces Caballero ha jalado el gatillo más de 300 veces y su ropa nunca le ha fallado. Tiene tres líneas de diseño: la clásica, conformada por chalecos blindados tradicionales; la gold, de ropa informal como camisetas y chaquetas sport, "ahí están las guayaberas de los presidentes Uribe, Chávez y Lula"; y por último, la colección platinum, de "ropa elegante y formal, que incluye desde gabardinas y corbatas, hasta vestidos enteros para la noche".

El año pasado, en México, Caballero presentó el primer desfile de ropa blindada que se ha hecho en el mundo y unos meses más tarde inauguró su primera boutique. Por si fuera poco, el próximo 7 de octubre lanzará su nueva colección en París, donde abrirá las puertas de su segundo almacén.

Con el tiempo, el rumor de que un bogotano hace ropa de alta seguridad y costura traspasó las fronteras y llegó a oídos de los Príncipes de Asturias, quienes a través de la Embajada consiguieron dos chaquetas cazadoras que actualmente usan.

Pero el príncipe Felipe y su esposa no son los únicos clientes VIP de Caballero: en su lista también figuran el Rey de Jordania, el Presidente del Congo y el actor norteamericano Steven Seagal, con quien entabló una buena amistad desde que éste lo llamó en octubre del año pasado. "Pensé que era una pega", dice. Pero, en efecto, se trataba del famoso actor norteamericano, quien estaba muy interesado en conocer su colección, así que se pusieron una cita en Hollywood, y hoy en día Seagal usa prendas de alta costura y seguridad hechas en Colombia.

Aunque Caballero compite con 600 empresas expertas en blindaje en el mundo, es el único que confecciona ropa de alta costura para particulares. Sus sofisticados clientes lo prefieren porque es mejor llevar una gabardina de gamuza blindada, que un rústico chaleco antibalas. Así van sobre seguro. .

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La moda antibala se dispara

Miguel Caballero recuerda con una sonrisa el día en

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