Teoría Pedagógica.

Introducción

Actualmente se viven tiempos difíciles en la sociedad mexicana. No sólo en el ámbito educativo, sino en todos los rubros que afectan la vida del mexicano promedio. Y la respuesta a estos problemas, se resume en una palabra: educación.

Pero si ya contamos con un sistema educativo “solido” ¿Cuál sigue siendo el problema? ¿Por qué si en México se invierten miles de millones de pesos en educación ésta sigue siendo un freno para el desarrollo? Como estás, muchas preguntas surgen al ver que el tejido social se deteriora cada vez más y que las escuelas, las aulas o el sistema educativo (que son lo mismo pero no son igual) no pueden detener esto. Por este motivo  es necesario replantearse hacia dónde vamos, pero sobre todo ¿qué camino hay que elegir? Y por medio de esta teoría se le busca dar respuesta a esta última interrogante.  

Para poder entender por qué es una teoría utópica, es necesario definir una utopía, qué es y para qué sirve. De modo que a continuación se describe porqué y por quién, esta teoría lleva ese nombre.

La fecha con exactitud no importa, el lugar es Brasil. En este calendario y en esta geografía, un reportero le preguntó al escritor Eduardo Galeano

- ¿Hay espacio para la utopía en el mundo de hoy? –

A lo que el maestro Galeano respondió:

- Sí, en el sentido que le dio Fernando Birri en una frase que injustamente se me atribuye a mí. En uno de mis libros yo cité una frase de él, diciendo que era de él, pero la gente me la atribuye a mí, y bueno, pobre Fernando; pero es de él.
Estábamos juntos en Cartagena de Indias, la bellísima ciudad de la costa colombiana y dimos una charla juntos en la universidad. […] Y al final, charlando con los estudiantes, uno se levantó y le preguntó a él, a él, no a mí: “¿Para qué sirve la utopía?”. Y él respondió de la mejor manera, yo nunca escuché una respuesta mejor.
Él dijo que esa pregunta se la hacía todos los días. ¿Para que servía la utopía? Si es que la utopía servía para algo. Dijo: “porque fíjense ustedes que la utopía está en el horizonte, y si está en el horizonte yo nunca la voy a alcanzar. Porque si camino diez pasos la utopía se va a alejar diez pasos, y si camino veinte pasos la utopía se va a colocar veinte pasos más allá. O sea que yo sé, que jamás, nunca la alcanzaré. ¿Para qué sirve? ¡Para eso, para caminar! 

Esta teoría sirve para eso, es una guía para caminar en la construcción de un país más justo y más libre.

I Educación

Antes de desarrollar una teoría pedagógica que involucre al ser humano en su totalidad, es indispensable definir y hasta delimitar qué es la educación. Muchos son los autores que manejan al derecho y al revés este concepto, sin embargo considero que dadas las nuevas condiciones sociales, políticas, y psicológicas de quienes ejercen este acto  es necesario situarla de una manera distinta, tratando de tomar en cuenta todos y cada uno de los aspectos que ésta engloba. Pues no es para menos, la palabra educación encierra un sinfín de contradicciones  y características que el actual sistema educativo ha preferido olvidar.

Por tanto, el primer acercamiento que concuerda con esta teoría pedagógica es la visión que tiene Paulo Freire acerca de la construcción de una misma teoría, él sostenía que “separada de la práctica, la teoría es puro verbalismo inoperante; desvinculada de la teoría, la práctica es activismo ciego.” De esta manera se espera que las aportaciones en los puntos que desarrolla esta teoría, sean lo más asertivas ya que de lo contrario estaría cayendo en una  paradójica contracción respecto a Freire. Sin embargo, el autor consciente de su inexperiencia ruega a la lectora del presente trabajo, sea benevolente si es que lo anterior llegara a pasar.

La primera pregunta a la que es necesario dar respuesta es ¿Por qué a Paulo Freire de entre una gama casi infinita de autores antiguos, clásicos y contemporáneos?

Paulo Freire, conocido por su aportación más importante de la pedagogía libertaria, viene a concretar las bases de una educación que más que libertaria, es popular. Y esta “Educación Popular” considero que tiene que ser el eje fundamental de esta nueva teoría pedagógica ya que como lo señala el mismo Freire, ésta tiene la ventaja de que al ser una educación netamente popular, puede adquirir la conciencia política necesaria en todo proceso educativo. Pues para él: no es posible hablar si quiera de una dimensión política de la educación, pues toda ella es política.  Y esta práctica  política es necesaria entenderla desde el punto educativo.

Quizá el ejemplo que más refleje esta necesidad, es con el movimiento estudiantil surgido en el 2012 en la  Universidad Iberoamericana llamado #YoSoy132. Pues gracias a esta conciencia política los estudiantes lograron encender una significativa mecha que marcaría la coyuntura en las elecciones del 2012 y que actualmente, las críticas de situaciones políticas  son generadas del sector estudiantil universitario. Pero es importante dar cuenta de que la universidad Iberoamericana figura dentro de las instituciones de educación superior más caras del país. Dicho lo cual, la educación popular abriría los canales necesarios de concientizar generaciones más críticas no sólo con su entorno social, sino a un nivel más amplio como lo es la política e inclusive a sectores según el interés y aptitudes de cada estudiante, ya sea economía, salud, transporte, etc.

Es por eso que la educación entendida desde esta nueva teoría educativa es un acto social comprometido con todas las clases sociales sin distinción alguna. Una educación que genere en todos y cada uno de los estudiantes un pensamiento duramente crítico hacia los aparatos de alienación y que además, no sólo entienda las necesidades sociales, sino que a través de su práctica sepa cómo darles solución.

II PEDAGOGÍA

En las primeras clases de la licenciatura en pedagogía, recuerdo  que una de las tareas obligadas en cierta materia fue “investigar” ¿qué es la pedagogía? Y dado que personalmente al principio de mi formación profesional tenía el penoso vicio de sacar las tareas de la poco confiable página Wikipedia, recuerdo con claridad que para cumplir con esa investigación acudí a dicha página web. La definición que se puede encontrar en el 2015 ha suprimido una palabra; pues ahora, Wikipedia define a la pedagogía como “ciencia que tiene como objeto de estudio la educación”.

Lo anterior me parece fundamental recalcar para poder establecer una visión clara sobre qué es la pedagogía para esta teoría utópica. Y es fundamental, no porque Wikipedia marque un camino a seguir, sino porque la palabra que fue suprimida de esa definición hace referencia a una discusión que se ha desatado sobre la postura si la pedagogía es un arte o una ciencia.

En el sentido estricto de la palabra, el arte es definido como  la manifestación de la actividad humana mediante la cual se expresa una visión personal y desinteresada que interpreta lo real o imaginado con recursos plásticos, lingüísticos o sonoros. Y dadas las necesidades de establecer una conexión entre esta visión y la función que puede desempeñarse en la educación, establezcamos que el arte en muchos casos puede ser subjetivo. Lo que para expertos y críticos del arte, el trabajo de Hermann Nitsch  (artista austriaco que utiliza en la elaboración de sus obras símbolos religiosos, sangre y viseras  de cerdo, reses, perros, etc. así como personas desnudas)  es un trabajo invaluable, para personas con distintos principios morales y éticos, él no debería de llamarse artista.

Algo similar pasa en esta pedagogía, especialmente en la forma de hacer y generar pedagogía (si es que se permite esa expresión). Pues dentro de ella, convergen diversas de ideas, conceptos y cosmovisiones de todas las realidades. Y si esta pedagogía no fuera ejercida como un arte, como una creación y transformación de saberes, no se lograría cumplir su objetivo: transmitir experiencias, valores, conocimientos, alegrías, amor, etc. Pues todos aquellos que se involucran en el proceso de enseñanza – aprendizaje pertenecen a un mundo completamente ajeno a sus compañeros  con diferentes costumbres y tradiciones.

Para Paulo Freire, esta visión pedagógica desembocó en su obra maestra “La Pedagogía del Oprimido”, en la cual entre otros muchos aspectos plantea cómo habrá de hacerse y ejercerse esta nueva pedagogía para que las clases oprimidas puedan liberarse de las clases opresoras. Y es en este punto, donde la pedagogía utópica simpatiza con la visión de Freire.

Pue sólo mediante la práctica de una pedagogía donde no se excluya a ninguna persona por su religión, su ideología, sus costumbres, tradiciones, color de piel, etnia, etc. y además de eso, los actores que generen esta pedagogía sepan mezclar todas las características anteriores en una “obra de arte”; sólo así se avanzará a una verdadera liberación.

III EPISTEMOLOGÍA

Adquirir conocimiento no es fácil, al menos cuando se trata de un verdadero conocimiento. A lo cual se tendría que aclarar ¿Qué es o cómo se da un conocimiento verdadero?  

René Descartes, proponía un método que principalmente consistía en someter a prueba todo aquello proveniente de los sentidos. Examinarlo con profunda consciencia para determinar si admisible para la razón. Esta estrategia, llamada “El discurso del método” me parece la más apropiada para conseguir, sino el conocimiento real, un conocimiento que no esté manipulado por medios de comunicación, aparatos gubernamentales, etc.

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