Fundamentos de la gestión integral del aula

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Reseña critica de la lectura Foundation of comprehensive classroom management (Jons,2000) y de la Psicología de la educación y prácticas educativas mediadas por las tecnologías de la información y la comunicación. Una mirada constructivista (Coll, 2004).

Esta lectura del libro de los “Fundamentos de la gestión integral del aula”, en inglés llamada “foundation of comprehensive classroom management”, es una obra realizada por Jons V., publicado en el año 2000 en USA. La segunda lectura del libro de la “Psicología de la educación y prácticas educativas mediadas por las tecnologías de la información y la comunicación. Una mirada constructivista”, es una obra realizada por César Coll, publicada en el año 2004.

El primer libro trata sobre las siete técnicas generales que propone el autor para la motivación y control de la disciplina del alumno que los ayudará a tener un logro académico positivo, la relación del estudiante-maestro, pero sobre todo de la manera en la que el docente debe de influir en la gestión del aula. Por consiguiente, su objetivo principal es que el docente busque maneras eficaces para la gestión de las aulas y para buscar un buen beneficio académico en el alumno. En cambio, el segundo libro trata sobre la implementación de las tecnologías de la información y la comunicación (TICS) en la educación, por lo que su objetivo principal es buscar la manera en que las TICS ayudan o facilitan la educación tanto del maestro como del alumno, asimismo se busca determinar si es una buena estrategia para la educación en la gestión del salón. 

Como objetivo general del tema que se pretende abordar en esta reseña critica, es que en la gestión del aula ya sea de manera presencial o virtual, el docente busque y logre desarrollar aprendizajes en el alumno, además de brindarles una participación activa, que tengan una mejor comprensión de los contenidos que se aplican y que se busque una mejor manera para disciplinarlos. De igual manera, se espera que el docente tenga en cuenta las necesidades de los alumnos y siempre trate de mantener un buen clima en el salón de clases. 

Específicamente, en ambos tipos de gestión, las estrategias instruccionales indican las actividades, problemas o cualquier tipo de experiencia por parte del docente o el estudiante que tornen más efectivo el proceso de enseñanza-aprendizaje. Se supone que, como docentes, se debe reflexionar sobre la materia que se enseña, con el fin de lograr mejores resultados independientemente del tipo de gestión que se realice.

La gestión del aula de manera presencial, resulta más importante debido a que las estrategias didácticas aplicadas en el aula, el conjunto de orientaciones didácticas, los métodos, procedimientos, técnicas y recursos que se planifican para el logro de todos y cada uno de los aprendizajes son contemplados de forma más clara e inequívoca. Además, el docente se preocupa más en enseñarle a sus  estudiantes a conocerse mejor, a identificar sus dificultades, habilidades y preferencias en el momento de aprender, con el objetivo de tratar de comprender sus carencias durante el aprendizaje, y lograr así un mejor ajuste entre sus expectativas de aprendizajes y los resultados obtenidos, si esto se logra, se llega a la adaptación de las actividades y ejercicios presentados a sus propias características, y de este modo se le ayuda a construir su propia identidad cognitiva, alcanzando con mayor facilidad la adquisición de un aprendizaje significativo.

A pesar de que en las pantallas de los ordenadores donde hay alumnos que trabajan en el aula con su docente o toman clases a distancia (en línea), podemos encontrar los mismos recursos semióticos que aparecen a menudo en un aula convencional: letras y textos escritos, imágenes fijas o en movimiento, lenguaje oral, sonidos, datos numéricos, gráficos, etc., es decir, que las TICS nos ofrecen una serie de recursos semióticos para representar y transmitir la información.

El argumento central que Coll tenía acerca de la gestión del aula de manera virtual, es que tanto maestros como alumnos tenían una muy buena comunicación, los alumnos podían realizar exitosamente las tareas en equipo, participar mucho más y que el ambiente era un poco más relajado para los alumnos lo que los llevaba a tener una mejor comprensión de los temas, sin embargo, lo que el autor menciona va en contra de lo que piensa la mayoría de estudiantes, padres de familia y hasta maestros; esto debido a que se conoce que el alumno aprende de una mejor manera cuando asiste de manera presencial, además de que se disciplinan y mejoran su conducta de manera favorecedora.

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