Cual es la Crisis Subprime

Crisis sub-prime es la denominación para la primera recesión financiera luego de la segunda guerra mundial, a pesar de que las crisis son el resultado de un conjunto de variables, se especificó el inicio de esta recesión el 15 de septiembre del año 2008 cuando quiebra el banco de inversiones Lehman Brothers. Generando un colapso en Estados Unidos y en el resto de las economías desarrolladas.^[1] 

Las causas de esta crisis se deben al colapso de la burbuja inmobiliaria formada en Estados Unidos, una burbuja inmobiliaria es un incremento excesivo e injustificado de los bienes inmuebles o bienes raíces, ocasionado generalmente por la especulación. Esto trajo sus efectos sobre la deuda hipotecaria de la banca de inversión y el sistema financiero tanto nacional como internacional. Ya que la perdida fue mayor en los segmentos hipotecarios más riesgosos se le da el nombre de “Subprime”.^[2]

Estados Unidos:

En el año 2001, la economía comenzaba a sufrir los efectos de la explosión de la burbuja de internet, que se refiere al periodo de crecimiento en los valores económicos de empresas vinculadas a internet. La reserva federal de EEUU, para evitar un colapso económico comienza a bajar las tasas de interés (presionado también por los atentados del 11 de septiembre). La idea era que, a una tasa de interés más baja, las empresas pudieran pedir más dinero prestado y así hacer más inversiones. Pero las personas también comenzaron a aprovechar esa rebaja en las tasas.

        Aprovechando las bajas tasas, los vendedores de hipotecas comenzaron a entregar créditos a personas naturales sin ningún comprobante de ingresos. Al vendedor de hipoteca no le importaba que el cliente no pagara, porque era el banco quien realmente prestaba el dinero, el solo obtenía su comisión por venta de hipotecas a los clientes. Cuando los bancos comienzan a notar que se están quedando sin dinero deciden vender todas hipotecas a Wall Street. Esperando que solucionen la situación. Los genios de WS al ver que las hipotecas eran muy riesgosas, deciden crear un instrumento financiero respaldado por estas hipotecas y venderlos a inversiones, ofreciéndoles unas ganancias increíbles. (Siempre cuando las personas siguieran pagando las mensualidades de las hipotecas a tiempo). Sabiendo que las hipotecas como tal eran muy riesgosas y que, por tanto, era difícil que se interesaran en ellas, deciden revolverlas con otras de mejor calidad, empaquetándolas de tal forma, que fueran percibidas como una inversión atractiva para los inversionistas. Por ejemplo, una hipoteca con una probabilidad de incumplimiento de 60% empaquetada con otra de solo 10%, generaba un promedio de incumplimiento de tan solo un 25% lo que además se respaldaba con el supuesto de que las casas siempre subirían sus precios por lo que si alguien dejaba de pagar rematarían su casa y aun así obtendrían ganancias.

Los banqueros decidieron cortar las “cajas” en 3 paquetes llamándola “seguros”, “normales” y “riesgosas”. Quienes invirtieran en “seguros” se les pagaría primero, asegurándoles tener siempre rentabilidad, pero no en altos porcentajes de interés. Los inversionistas del paquete “normales” se les pagaba a continuación quienes obtenían un interés mayor que con el paquete “seguros” por lo tanto tenían más ganancias, pero con un poco más de riesgo. Finalmente, se le pagaba a los inversionistas del paquete “riesgoso” quienes a pesar de asumir mucho riesgo se les prometía intereses muchos más altos que en los anteriores por lo que las ganancias serían mucho mayores.

A la parte buena o “seguros” se les compra un seguro, para que las agencias calificadoras le dieran una calificación de AAA. Al parte medio o “normales” se les da una calificación de BBB, pero no se les asigna un seguro.

Luego de que Wall Street generara toda esta idea para vender las hipotecas le venden la parte buena y normal, a inversionistas institucionales como compañías de seguro, fondos de pensiones, bancos y gobiernos extranjeros. Una porción de la parte mala, se la quedo el mismo banco de WS, lo que le genero altos rendimientos, durante un tiempo, arriesgándose a que en el futuro no pagarían.

Sin embargo, el porcentaje de incumplimiento empezó a aumentar y se realizaron un mayor número de embargos y remates de casas. Con el alto oferta de casas se generó un descenso en los precios de las viviendas provocando que la gente de clase AAA dejara de pagar también ya que las casas a su alrededor eran más baratas que las hipotecas que estaban pagando en la actualidad, por lo que se incrementó el porcentaje de morosidad. Con esto ya nadie quería comprarles a los bancos las hipotecas porque dejaron de generar rentabilidad. Dejando el ciclo sin dinero ya que ni si quiera la aseguradora de la calificación AAA tenía dinero para pagarle a todos.^[3] 

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