LA ESCUELA MULTICULTURAL

“LA ESCUELA MULTICULTURAL”, UN RETO PARA EL PROFESORADO

TEMA #1

LOS PROFESORES ANTE LA EDUCACIÓN Y LA ESCUELA MULTICULTURAL.

En torno al concepto de educación multicultural.

Los maestros trabajan con unos conceptos de cultura y de educación multicultural “humanistas” (el respeto por sus formas de vida por su folklore, a sus valores, productos etc.) sin preguntarse acerca de la cultura y de la educación multicultural de una manera más pragmática/social (como una forma de adaptarse a la vida o de disponer a los alumnos para prepararse ante una sociedad plural, para tener igualdad de oportunidades etc.)

Causas…

El pensamiento pedagógico del maestro es poco reflexivo, poco crítico con los conceptos de cultura.

Algunos maestros piensan que trabajar con una escuela multicultural significa algo aparte del contenido ordinario de su enseñanza, a modo de “lecciones” sobre otras culturas.

Se tiende a darle escaso valor y por lo tanto a desplegar pocos esfuerzos por ponerlos en práctica seriamente.

Se piensa que trabajar con la multiculturalidad es casi exclusivamente en términos prácticos. (La buena dinámica de las aulas).

Si lo que se desea es una EM profunda y auténtica en nuestros centros escolares, uno de los primeros pasos es que el profesorado la entienda como una condición indispensable para el éxito escolar y las buenas relaciones de todos los alumnos de la clase.

Educación Multicultural.

Algunos profesores se mostraban dudosos en su aceptación y muchos la acogían de forma débil.

Educación especial.

La totalidad del profesorado estaba de acuerdo en que merecía una atención e importancia de primer orden. Los profesores de educación especial se mostraban mucho más sensibilizados que los maestros ordinarios con respecto a la necesidad de una EM seria en nuestras sociedades pluralistas.

¿Hacia una escuela multicultural?

Muchos maestros tienden a ignorar o negar que la multiculturalidad existente en los centros en que ejercen constituya algún tipo de problema.

Actitud denominada por C.A. Grant y R. A Koskela como “síndrome de exención”, es más abundante en contextos geográficos y colegios que tienen pocos alumnos minoritarios.

¿Por qué no poner en práctica la EM?

Suficiente contacto con otros profesores que ya estaba trabajando bien la EM en otros centros.

Una competencia pedagógica sólida para enseñar a niños culturalmente diferentes.

Recursos adecuados para poner en práctica fluidamente la EM que se les sugería etc.

La función de la escuela en contextos multiculturales.

Un primer aspecto de interés gira en torno al tipo de escuelas en que suele encontrarse el alumnado pluricultural.

Dicho alumnado se concentra en centros escolares públicos y situados en contextos marginados.

Esta realidad incide en la visión que tiene el maestro respecto a ésta categoría de niños en su cultura, y por supuesto, al papel que ha de jugar una escuela de tales características.

Las percepciones que tienen los profesores albergan una ambición pedagógica realmente baja respecto a lo que la escuela (y ellos) pueden hacer por este tipo de alumnados. Los maestros están cegados para pensar en la posibilidad de implicarse en proyectos que busquen hacer precisamente de estas escuelas auténticos lugares de excelencia educativa.

El gran peligro de los maestros que tienen en sus aulas niños procedentes de clases pobres o de minorías marginadas es pensar que los más “útil” que pueden hacer por sus alumnos es adaptarse a sus ritmos lentos, a sus escasas posibilidades y a sus pocas motivaciones.

Si ese peligro se hace realidad debido a la curiosa dinámica de las bajas expectativas, dichos alumnos rinden paradójicamente cada vez menos.

La escuela ante las culturales minoritarias.

Muchos docentes acostumbrados a una enseñanza tradicional o escasamente formados en EM, consideran que la cultura originaria que llevan consigo los niños minoritarios, entorpece, más que ayudar, a una buena integración en la escuela y en la sociedad.

En esta perspectiva, los elementos culturales de los niños minoritarios son vistos como algo que más bien interfiere en el desarrollo escolar y social de dichos alumnos, por lo que lo más conveniente es excluirlos del currículum y de la vida de la escuela, incluso de negarles la entrada.

Lo que se genera es que el alumno tenga un rechazo de sus raíces culturales.

TEMA #2

LAS ACITUDES DEL PROFESORADO ANTE LOS ALUMNOS CULTURALMENTE DISTINTOS

Si los profesores que ejercen en contextos multiculturales consiguiesen de sí mismos unas actitudes positivas en relación con los alumnos que tienen y a la enseñanza en esas situaciones, entonces la problemática que analizaremos quedaría resulta en su totalidad.

ACTITUDES EXPLÍCITAS Y ACTITUDES TÁCITAS

Sondear las actitudes de los profesores a través de cuestionarios de diversos tipos.

El cuestionario compuesto de 75 ítems, pretendía extraer información pertinente sobre aspectos como: opinión de los maestros acerca del papel que se debe jugar la escuela respecto a los alumnos minoritarios, si la presencia de este tipo de niños altera o dificulta el nivel de rendimiento en los centros educativos.

Entre los resultados de este estudio se destacaron: Los profesores más jóvenes sostienen opiniones y actitudes más positivas y abiertas que aquellos pertenecientes a los grupos de mayor edad.

¿CÓMO SUELEN VER LOS DOCENTES A LOS NIÑOS MINORITARIOS?

La mayoría de los maestros desean ayudar a los alumnos desaventajados, es decir, presentan una buena voluntad.

Tendencia a tratarlos igual intentando evitar cualquier asomo de discriminación.

Muchos profesores ven a los alumnos como “el alumno modelo”.

Intentan negar la diferencia a través del “trato igualitario”

Ven aspectos deficitarios y problemáticos, en distintos planos de su relación escolar.

El alumno modelo es aquel que ajusta su aprendizaje a las expectativas clásicas de la institución escolar.

Lo que más irrita a los maestros son los aspectos comportamentales y socio afectivos que contrastan con el alumno modelo.

Wong nos muestra que la forma de ver o percibir a los alumnos minoritarios viene por el alumno modelo.

Wong parece demostrar que a os niños asiáticos se les ve como muy buenos alumnos por el sistema de valores que fundamenta la cultura japonesa y el sistema de valores que sostiene la estructura de la clase americana.

A. Los profesores prefieren o rechazan a los niños según el cuidado personal, urbanidad, forma de hablar, etc...

B. Los niños inmigrados son los que siempre se llevan los calificativos de: indiferencia, antipatía o repugnancia.

C. Los niños obreros inmigrantes también se ven afectados

D. Rechazos de tipo racista: alergia a la piel, sus olores, sus modales, vestido, peinado, etc...

LA ILUSIÓN DEL TRATO IGUALITARIO

W. Kool encontró que aunque aparentemente se daba a todos un trato semejante bajo los eslóganes de: para mis todos son iguales: blancos y negros, se podía apreciar una discriminación clara y se tenían expectativas más bajas respecto al rendimiento académico o haciendo comentarios negativos.

Algunos profesores que se vanaglorian de tratar a todos los alumnos de igual forma, más que demostrar una disposición democrática, ponen de manifiesto la falta de preparación para enseñar en clases pluralistas, como las de nuestras escuelas.

¿LOS PROBLEMAS ESTÁN FUERA?

La mayoría de los profesores creían que los problemas de los niños se reducían a la educación informal recibidos en sus contextos, a su ambiente o características personales.

Todos los maestros se quejan de estos alumnos, los consideran desordenados, desorganizados, fantasiosos que son desvalorizantes. Los maestros atribuyen una gran parte de responsabilidad a los padres, porque no ejercen un control en el hogar y por el ritmo de vida de la familia.

EXPECTATIVAS DOCENTES

A. Los profesores se forman una imagen de cada alumno, cuando apenas lo conocen y las primeras percepciones suelen ser bastantes decisivas.

B. Aquellos niños pertenecientes a la cultura de la pobreza y los marginados se les suele etiquetar negativamente, adornando su imagen con antivalores

Si las escuelas de alto magisterio empezaran a enseñar que las expectativas de los maestros sobre el rendimiento de sus alumnos pueden convertirse en profecías, expectativa que los niños pueden aprender más de lo que se espera de ellos.

Las formas en que los profesores comunican sus expectativas a los alumnos son muy diversas:

A. Prestando menos atención.

Proporcionando a este tipo de niños un curriculum menos rico en general.

Criticando a estos alumnos por cualquier error de aprendizaje.

Preguntándoles con menos frecuencia.

Los

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