PORTAFOLIO DE LA EVALUACIÓN DE LOS APRENDIZAJES"

El presente ensayo, tiene como principal objetivo realizar un breve análisis reflexivo en torno al uso del "Portafolio" como una estrategia para el aprendizaje significativo y su evaluación formativa en el ámbito educativo. En este, se mencionará y analizará diversos aspectos; para ello, nos centraremos en principales interrogantes que tanto el docente como el discente tienen acerca del portafolio, como son: ¿Qué es la evaluación por portafolio? ¿Cuáles son los aspectos característicos? ¿Cómo es el diseño del portafolio? y finalmente, ¿cuáles son las ventajas e inconvenientes que puede presentar el uso de este?. De esta manera se partirá con un breve mencionado, sabiendo que el portafolio tiene enfoque constructivista, por lo tanto enfatiza el papel activo del estudiante en la construcción del conocimiento y el del profesor como mediador en dicha construcción. Los aportes del constructivismo como corriente filosófica y pedagógica, brindan un soporte metodológico de trabajo en el aula y, proporciona estrategias y herramientas alternativas a los docentes. En tal sentido, este ensayo permite promover la implementación del portafolio como estrategia de base constructivista en el entorno educativo, contribuyendo así en el desarrollo de destrezas que en el plano heurístico puedan manejar los estudiantes, así como en la formación y actualización de los docentes.

Refriéndonos a evaluación se puede definir como un procedimiento sistemático y comprensivo en el cual se utilizan múltiples estrategias, tales como: cuestionarios, entrevistas, exámenes orales, portafolios, presentaciones, etc., para evaluar a través de la tutoría académica y personal del estudiante. La evaluación es pues, un conjunto de estrategias destinadas a la mejora de la calidad de la enseñanza. Arter y Spandel (1991) definen el portafolio como “una colección determinada de trabajos del estudiante que muestra, tanto a él mismo como a otros, sus esfuerzos o logros de aprendizaje.” (Palermo, 2007) Es decir, el portafolio, vendría a ser, la colección de evidencias que no solamente resumen el trabajo académico sino que explicitan procesos de aprendizaje, describen procesos metacognitivos individuales y grupales, etc. Para que los portafolios no se conviertan en simples archivos de trabajos que el estudiante va acumulando, se debe considerar detenidamente qué elementos se incluyen en los mismos, así como el proceso de selección y el uso que se hará de la información incluida.

A continuación se mencionará a un psicólogo educativo que ha hecho contribuciones notables al estudio y la evaluación de la enseñanza, Lee S. Shulman quién nos dice que “un portafolio didáctico es la historia documental estructurada de un conjunto (cuidadosamente seleccionado) de desempeños que han recibido preparación o tutoría y adoptan la forma de muestras del trabajo de un estudiante que sólo alcanzan realización plena en la escritura reflexiva, la deliberación y la conversación” (Sergio, 2010). En esta definición se puede apreciar la manera en cómo se producen los procesos de enseñanza – aprendizaje en diferentes momentos, a lo largo del proceso, en definitiva, la manera en cómo el estudiante inventa su propio camino de manera cuidadosa y con material seleccionado.

Así mismo este autor manifiesta que “El portafolio no debe entenderse nunca como un contenedor o una papelera de reciclaje, porque al elemento cuantitativo, y a su capacidad de almacenaje hay que unirle un elemento cualitativo: la posibilidad que nos ofrece de examinar procesos y resultados” (Sergio, 2010), mencionado esto se puede decir que ante las nuevas demandas del contexto escolar, es necesario que el discente indague, experimente y sea capaz de comunicar sus hallazgos y dificultades a los demás, como mencionaba el enunciado anterior, el estudiante no debe considerar al portafolio como una papelera de reciclaje sino como una colección de escritos, donde se incluye información relevante sobre sus procesos y sus reflexiones, recogidos con el objetivo de proveer información sobre la mejora a lo largo del proceso de enseñanza-aprendizaje de los mismos.

¿Qué es la evaluación por portafolio? Es una estrategia de evaluación que puede definirse de una manera simple, como una “hoja de ruta” del proceso de aprendizaje (Sergio, 2010), en otras palabras “La historia documentada de cómo se aprende” y por tanto tiene dos protagonistas: docente y dicente. A su vez permite que los estudiantes: 1) Demuestren lo que están aprendiendo a través de la organización de sus trabajos y 2) Sean evaluados sus aprendizajes a través de la colección de los trabajos que elaboran. La función principal del portafolio es documentar lo que ha aprendido el estudiante y su propósito es archivar el logro del alumno con relación a los objetivos de aprendizaje. Algo que se debe tener en consideración es que esta estrategia de evaluación no sólo está dirigido a docentes o estudiantes, sino también a padres de familia y autoridades escolares. Pueden usarse portafolios para promover el aprendizaje a través de la reflexión y para evaluar aprendizaje. Los usos relativos a la evaluación se refieren a guardar huella de qué es lo que los estudiantes saben y pueden hacer.

Aspectos característicos del portafolio: 1) Reflexión: Utilización de la reflexión, oportunidad que se le da al alumno para aprender a través de su propio proceso de aprendizaje.

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