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Terminando Con Los Saltos De Tu Perro

(De una forma rápida, sencilla y fácil de seguir

¡Abajo Terry! ¡Abajo princesa! ¡Abajo chiquito! ¡Abajo Benji!… ¡Abajo Jack! ¡Abajo Cheto! ¡Abajo Rulo y Bianca! He oído este comando muchas veces, de muchos dueños de perros desesperados, dirigido a muchos perros determinados. El problema de un perro saltador es un problema universal, pero una mejor comprensión de lo que motiva el comportamiento puede generar un camino hacia la solución del problema.

Las dos razones por las que los perros saltan sobre las personas

En primer lugar, y probablemente el más común, es el salto del perro que saluda de esta manera. Esto puede ser simplemente por un exceso de entusiasmo, que “salta de alegría”. Los perros guardianes también señalan saltando ya que es un comportamiento que se debe en parte a su instinto. Los perros se lamen la cara unos a otros cuando quieren dar un saludo muy agradable, un reflejo probable de los miembros de un rango inferior de una manada de lobos que lamian la cara de los lobos con un rango superior cuando regresaban de caza. Además, los cachorros en una madriguera saltaban por encima de uno a otro cachorro para llamar la atención de su madre. Más específicamente, los cachorros orientaban la cara de su madre, ya que ella solía regurgitar la comida para su camada, un reflejo más de la manada de lobos.

Además, este comportamiento se refuerza con las felicitaciones de parte de los dueños, cuando un perro se encuentra con su propietario se emociona saltando y este inmediatamente lo alaba, lo alimenta, camina y / o juega con su mascota después de conseguir “un salto”, por así decirlo. El salto se convierte en parte de esta rutina para el perro. Con el tiempo se premia y refuerza.

Una segunda razón para el salto, que es menos frecuente dado el caso, es que pueden estar tratando de establecer su dominio. Los perros saltan el uno al otro a través de lo que se conoce como “primer golpe”. En particular, descansan su cabeza o la pata (o ambas patas) en el hombro de un perro que quieren dominar y ejercen un poco de presión hacia abajo. Porque nosotros los humanos caminamos en dos patas, somas más difíciles de dominar, pero la motivación es la misma para el perro. El perro puede estar tratando de expresar el estado dominante. En estos casos, a menudo los perros saltan de una vez y más o menos se apoyan en uno.

Identificando el comportamiento dominante

Es importante identificar este comportamiento viéndolo en el contexto más amplio de tu relación. En primer lugar, tienes que darte cuenta de que un perro desobediente no es necesariamente un tonto. Si no te escucha, y presiona y tira a tu alrededor, puede haber decidido no reconocerte como su superior en la jerarquía de la manada (¡sin dejar de pensar en su mundo que sos un compañero!). Ya seas hombre o mujer, un perro que siempre te salta puede exhibir un comportamiento de los muchos signos de perro alfa. (El comportamiento del perro alfa es algo que abordamos en los bonos del libro “Adiestrador De Perros”, y también hay unos cuantos videos completos dedicados al tema en nuestros videos sobre los secretos del adiestramiento canino).

Si sospechas que el salto de tu perro es de hecho una expresión de dominio, entonces es probable que su entrenamiento tenga que involucrar correcciones más pesadas. Esto simplemente significa que podrías tener que hacer algo más que simplemente ignorar al perro cuando salta y entrenarlo a sentarse y resolverlo antes de conseguir su atención. Por ejemplo, lanzándole agua, gritándole fuerte o incluso forzando al perro hacia abajo y teniéndolo abajo hasta que estén todas las correcciones que hacen cortocircuito con este comportamiento.

Algunos dueños de perros no les importan cuando su perro le salta para saludarlos, es más dramático un hola halagador para decir lo mínimo. Ya que lo último que queremos hacer es convencer a nuestros animales domésticos que no tienen motivos para estar contentos de vernos.

Pero cuando el mismo perro salta sobre otras personas, como otros miembros de la familia o amigos, puede ser difícil e incluso peligroso. Un perro saltando en extraños es siempre un mal aspecto. La buena noticia es que un perro bien entrenado puede aprender a saltar sólo cuando hay un “invitado” si su dueño lo permite. Esto está bien para jugar un rato, por ejemplo. Pero vamos a aprender las reglas antes de romperlas.

Estableciendo las reglas

Durante los saludos, siempre trata de evitar que tu perro en primer lugar salte para arriba. Pon tu mano (o las dos manos) en frente tuyo y quédate quieto. Un perro entrenado será capaz de responder a este gesto con cierta rapidez con repeticiones. Al igual que con cualquier técnica de entrenamiento, no introducir ningún comando verbal hasta que el comportamiento correcto se ha demostrado. Sólo cuando tu perro se baja por su propia voluntad debes de empezar a usar el comando “abajo” para acompañar el comportamiento. Así es como aprende el comando, haciendo la acción correcta para asociarla con el comando.

Para la mayoría, este tipo de prevención no funciona de inmediato, especialmente para los cachorros que no tienen suficiente entrenamiento formal. Tiene que saber cómo reaccionar cuando tu perro empieza a saltar hacia arriba. Sobre todo, se trata de saber lo que NO hay que hacer. Por ejemplo, cuando tienes un problema de salto, no debes ser demasiado entusiasta durante su saludo. Esto, obviamente, refuerza el comportamiento. Y no empujar con fuerza al perro lejos de ti. Ellos interpretan esto como una forma de compromiso juguetón. El resultado: los perros siempre empujan hacia atrás. Es instintivo. El mismo principio es la razón de la mayoría de los casos donde los perros tiraran de la correa: son impulsados por la fuerza ejercida sobre ellos.

Dale la espalda e ignora al perro. Y tranquilamente le pides sentarse. Cuando se ha calmado, y lo ideal sería que haya respondido a la orden de sentado, entonces te puedes dar vuelta y saludar al perro. Si empieza a saltar de nuevo, repite el proceso. Tienes que ser paciente, aquí es donde se llega a enviar un mensaje principalmente a través de tu lenguaje corporal, y el perro seguramente tendrá varios ensayos para recibirlo. A menudo se recomienda que te pegues en la rodilla y que pongas al perro fuera de balance, que es casi un acto reflejo. Dando la espalda y evasivas es mejor si lo puedes manejar.

Una de las sugerencias más favorable que doy es saludar siempre a un perro tranquilo “a su nivel”. Ponte en

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