Trabajo en equipo LIDERAZGO BASADO EN PRINCIPIOS

        LIDERAZGO BASADO EN PRINCIPIOS

CALIDAD HUMANA

NECESIDADES FÍSICAS:

Una salud excelente se basa en principios naturales. Se obtiene con esfuerzo en el tiempo a través de ejercicio fisico regular, una alimentación adecuada, el descanso apropiado, una forma de pensar sana y el rechazo de sustancias nocivas para el cuerpo y UNA RESPIRACION Sana, (el aire). No obstante en lugar de pagar el precio (LEY DE LA COSECHA, del esfuerzo, del sacrificio) caemos en la ficción que crea la apariencia, lo fácil, es decir, la fantasía de que las ropas adecuadas, el maquillaje conveniente, los programas para perder peso de forma rápida (de los que se ha demostrado que contribuyen a prolongar el problema en lugar de eliminarlo) satisfarán nuestras necesidades físicas. Resultan promesas vacías. Aportan satisfacción a corto plazo, son como un copo de azúcar. No poseen solidez alguna. Desaparecen con rapidez.

El bienestar económico se basa en los principios de frugalidad, laboriosidad y previsión de las necesidades futuras; en ganar intereses (ahorrar o invertir) en lugar de pagarlos (comprar al crédito). Pero nos domina la ilusión de que poseer "cosas" satisfará la necesidad, aunque la hayamos comprado a crédito y necesitemos meses o incluso años para pagar el doble de lo que valen a cambio de la satisfacción insustancial de la gratificación instantánea. O bien alentamos la fantasía de la "salvación", que llegará bajo la forma de un billete de lotería premiado, la ilusión de que alguien o algo resolverá mágicamente todos nuestros problemas y nos librará de la necesidad de adquirir competencia en cuestiones económicas.

NECESIDADES SOCIALES-EMOCIONALES

La realidad reside en que las relaciones de calidad se construyen sobre calidades personales, (riqueza  y belleza interior) en especial el principio de la confianza. Ésta nace de la confiabilidad, de la capacidad de establecer y mantener compromisos, (fidelidad), compartir responsabilidades, actuar de forma responsable y atenta, pertenecer y amar incondicionalmente. No obstante, cuando nos sentimos melancólicos y dolidos por una necesidad insatisfecha, no deseamos que nos digan que salgamos a ganar, que seamos dignos de confianza -dignos de la confianza y el afecto de otro-. Es más fácil creer en la ficción efímera de la gratificación sexual, en la idea de que la apariencia y la personalidad ganan el afecto o en que, con una llamada telefónica a un programa nocturno de televisión, alguien nos hablará con cariño. Es más fácil obtener un amor “instantáneo” que trabajar para llegar a ser una persona que brinda amor. (Amable) Y nuestra cultura -la música, los libros, la publicidad, las películas, los programas de televisión- está llena de engaños (cuyo interés es vendernos sus productos para  “encontrar” el amor en vez de trabajar para ser personas amables)

Alimento emocional, limpieza emocional aire emocional y ejercicio emocional (autocontrol)

NECESIDADES MENTALES

Con frecuencia recurrimos a la ficción de acumular mas conocimientos para tener mas cosas, pensamos que en vez de esforzarnos en estudiar y desarrollar nuestras facultades mentales de memoria, concentración, atención, abstracción, es mas fácil plagear, estudiar a ultima hora solo para “pasar” o “aprobar” y no para APRENDER. Acostumbramos a nuestra mente a lo fácil, la TV, juegos de video, ya no leemos, en vez de investigar y entrenar nuestra mente en analizar, resumir, compilar, comprender y poner nuestro aporte mental, bajamos de internet, pensando que podemos engañar al sistema, podremos buenas notas, obtenerle titulo, pero no la sabiduria ni el conocimiento, y menos aun una mente agil, inteligente y despierta, pero tarde o temprano el precio del no esfuerzo, se paga, no podemos vivir engañando a todos es mas ni a nosotros mismos, todo el tiempo, pues por dentro sabemos que hemos fracasado, que somos mediocres, debiles, falsos, nos detestamos a nosotros mismos ¿y que persona que se detesta si misma puede salir adelante?.

Alimento mental, descanso mental, aire mental y ejercicio mental

NECESIDADES ESPIRITUALES

Nos conformamos con la ficción que la sociedad nos vende, que indica que la felicidad y el significado se hallan en la concentración en el sí-mismo -la autoestima, el propio desarrollo, la superación personal- y en "lo que yo deseo", "déjenme hacer lo que quiero" y "lo hice a mi manera". No obstante, la literatura sapiencial de la historia milenaria valida repetidamente el hecho de que la  más grande realización en la superación personal proviene de la facultad de acercamos y ayudar al prójimo de forma más efectiva. La calidad de vida está del revés. El significado está en la  contribución, en vivir por algo superior a uno mismo. Los resultados de la ficción y de la realidad son tan diferentes como el  Mar Muerto -un extremo estancado en sí mismo donde no existe salida ni vida- y el Mar Rojo, donde las aguas fluyen y nutren la vida abundante que existe a su paso.

Asimismo las necesidades espirituales se deben nutrir de buen alimento, buen ejercicio, buen limpieza y buen oxigeno

    Los tiempos han cambiado. Ahora se sabe que los empleados mejores y más productivos no son quienes se entregan al trabajo con amargura para olvidar la pena de tener su vida personal desecha. La verdadera calidad y rendimiento sólo se da en gente realizada, plena y feliz. Nadie puede gobernar con cordura y equilibrio su trabajo si no ha logrado gobernar su vida como la empresa más elemental e importante. Es del dominio mundial en las altas esferas de mando que en esta era ya no ganan los tramposos, evasores y desleales. ¡En el siglo XXI sólo sobrevivirán las empresas ETICAS, cuya calidad comienza con su gente!. Por ejemplo: Un cohete no puede ponerse en órbita sin la ayuda de un lanzador, que es otro pequeño artefacto que explota y posteriormente se desprende. Ahí la respuesta; tú tienes la inteligencia, la capacidad, la energía para desempeñar el puesto, pero necesita un lanzador que te ponga en órbita. Ese lanzador es la gente (familia, compañeros de trabajo, comunidad etc. ). Es importante la capacidad técnica, pero la fuerza propulsora inicial está dada por nuestras buenas relaciones humanas. Las personas y no los conocimientos son, en principio, quienes nos abren las puertas, quienes nos promueven, apoyan e impulsan.

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