Gestión Estratégica De Las Finanzas De La Empresa
avilaj12 de Mayo de 2015
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“Gestión Estratégica de las Finanzas de la Empresa”
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN 3
LA DIRECCIÓN ESTRATÉGICA 3
ESTRATEGIA FUNCIONAL 4
ROL DEL ADMINISTRADOR FINANCIERO 4
LOS OBJETIVOS FINANCIEROS 5
PAPEL DEL FINANCIERO EN LA DIRECCIÓN ESTRATÉGICA 6
EL COSTO DEL CAPITAL COMO HERRAMIENTA FINANCIERA 7
CONCEPTO DE COSTO DE CAPITAL 8
FACTORES QUE DETERMINAN EL COSTO DEL CAPITAL 10
DEFINICIÓN DE LA ESTRATEGIA FINANCIERA 11
DISEÑO DE LA ESTRUCTURA DE FINANCIACIÓN 11
FINANCIACIÓN DEL CRECIMIENTO 12
RETENCIÓN DE BENEFICIOS 12
EL PRESUPUESTO EN LA GESTIÓN FINANCIERA 13
EL PRESUPUESTO 13
TIPOS DE PRESUPUESTO EN LA GESTIÓN 13
PRESUPUESTO ECONÓMICO Y FINANCIERO 14
PRESUPUESTO DE VENTAS 14
PRESUPUESTO DE PRODUCCIÓN 15
PRESUPUESTO DE GASTOS COMERCIALES 15
PRESUPUESTO DE GASTOS GENERALES 16
EL PROCESO PRESUPUESTARIO 16
LAS REVISIONES PRESUPUESTARIAS Y LAS PREVISIONES DE CIERRE 16
DESVIACIONES PRESUPUESTARIAS 17
EL PLAN FINANCIERO A LARGO PLAZO 17
FINANCIAMIENTO PROVENIENTE DE LOS ACCIONISTAS (PROPIETARIOS) 18
FINANCIAMIENTO PROVENIENTE DE TERCEROS 19
FINANCIAMIENTO DE INSTITUCIONES FINANCIERAS 19
LA CREACIÓN DE VALOR PARA EL ACCIONISTA COMO SÍNTESIS DE LA ESTRATEGIA 24
VALOR PRESENTE NETO 25
CONCLUSIÓN 27
BIBLIOGRAFÍA 28
INTRODUCCIÓN
El estudio del diseño, implantación y evaluación de las estrategias financieras, aplicadas en una organización empresarial, debe iniciarse con una referencia introductoria al proceso del que forman parte: la planificación estratégica de la empresa como un todo. Como es bien sabido, las finanzas constituyen una de las funciones claves de la organización, pero no operan aisladamente, por lo que la formulación de estrategias en esta área tiene que vincularse necesariamente con el resto de la compañía y con sus estrategias y objetivos globales de negocio.
LA DIRECCIÓN ESTRATÉGICA
El mundo actual de los negocios tiene como características más destacadas las de la globalización, es decir, la participación de agentes de cualquier parte del mundo y por tanto la posibilidad de realizar negocios a nivel mundial; la fuerte competencia, derivada principalmente de los procesos de liberalización emprendidos por prácticamente todos los países; un constante desarrollo de las innovaciones tecnológicas, en el propio terreno industrial, y de forma muy especial en el de las telecomunicaciones y la informática; y el papel protagónico adquirido por los consumidores, suscitado por el fácil, rápido y económico acceso a la información. Si hace ya décadas las empresas vienen desarrollando planes estratégicos para responder a los cambios del entorno, es en este nuevo contexto donde la dirección estratégica adquiere la condición de herramienta imprescindible para la gestión empresarial. Se precisa tomar decisiones para responder a los retos de este complejo, global y cambiante mundo de los negocios y sólo con un estudio a conciencia del entorno, de la competencia, de la tecnología, de la regulación, de las condiciones del mercado financiero y de las propias competencias y recursos se pueden tener garantías de supervivencia, crecimiento y rentabilidad. Este proceso de análisis del entorno y de respuesta a los cambios recibe la denominación de dirección estratégica, que podemos definir como el arte y la ciencia de poner en práctica y desarrollar todos los potenciales de una empresa, para asegurar su supervivencia exitosa a largo plazo. Hoy en día, la dirección y la planificación estratégica constituyen una asignatura obligada para todas las empresas; es la única forma de propiciar un futuro exitoso, con un crecimiento razonable, una rentabilidad suficiente y un riesgo acotado y controlado.
Este proceso de dirección y planificación estratégica se puede resumir en las siguientes etapas:
1ª etapa: Definir los objetivos estratégicos. Se trata de concretar la visión, la misión y los valores de la empresa/unidad de negocio y, a partir de ella, identificar los objetivos estratégicos para conseguirlo.
2ª etapa: Planificar la estrategia. Hay que estudiar y formular las estrategias posibles para alcanzar los objetivos, evaluarlas y seleccionar la más idónea y, al mismo tiempo, alinear la estructura de organización con la estrategia elegida.
3ª etapa: Implementar la estrategia. Para que la estrategia se convierta en algo alcanzable, medible y controlable, es necesario concretar en un plan estratégico a largo plazo, y en un presupuesto anual, los objetivos concretos y los recursos necesarios.
4ª etapa: Controlar la estrategia. Es necesario establecer un modelo de control, que identifique los indicadores correspondientes a los objetivos, la información a manejar y su concreción en un Cuadro de Mando que permita el seguimiento del plan y del presupuesto.
ESTRATEGIA FUNCIONAL
Tradicionalmente, la estructura organizativa de la empresa (o de una unidad de negocios) divide los procesos y actividades en áreas funcionales; con frecuencia estas áreas se relacionan con la producción, las finanzas, los recursos humanos, el mercadeo, investigación y desarrollo, entre otras, aunque su denominación suele variar de una organización a otra. Obviamente estas funciones no operan en forma aislada, ya que la interrelación y comunicación entre ellas constituyen un factor clave para el éxito de la estrategia global de la empresa. El plan estratégico diseñado para toda la organización establece claramente los objetivos globales que se desean alcanzar, y los cursos de acción necesarios para alcanzarlos, pero a un nivel genérico. Deben traducirse esos objetivos y estrategias a niveles más específicos para que cada área funcional pueda ejecutar adecuadamente su contribución al logro de los fines globales; de ahí la importancia de formular las estrategias funcionales en el marco del plan estratégico matriz.
La formulación de la estrategia funcional debe considerar como insumos clave los siguientes:
- La estrategia corporativa (estrategia de diversificación y estrategia competitiva).
- La estrategia de las unidades de negocio.
- Análisis funcional interno (capacidades requeridas en el área funcional, fortalezas y debilidades).
- Análisis funcional externo (oportunidades y amenazas pertinentes a cada área funcional).
Con esta información, se procede a formular el plan estratégico de cada área funcional, “especificando acciones, responsabilidades, objetivos, horizontes de tiempo y métodos para evaluar el cumplimiento de los planes estratégicos”.
ROL DEL ADMINISTRADOR FINANCIERO
El rol del administrador financiero está creciendo constantemente como consecuencia de la necesidad de las empresas de ser más competitivas financieramente, lo que lleva a buscar asesoría en los profesionales de las finanzas con el fin lograr mejores resultados económicos y generación de valor en la organización.
Se dice que el objetivo del financiero es maximizar el valor de la empresa, que debe enfocarse en las principales funciones financieras claves de la organización: la inversión, la financiación y las decisiones de dividendos.
Pero podemos establecer que los estados financieros y los indicadores son eficientes en la generación de información crucial para la organización; podríamos decir que aunque los indicadores financieros son de gran utilidad, estos requieren de la correcta interpretación y aplicación por parte del financiero con el fin de obtener información que puede utilizarse en la toma de decisiones, además de utilizar nuevas herramientas financieras como es el caso de los indicadores globales que complementan aún más la fuente de información y se logran tomar medidas en procura del crecimiento económico de la empresa.
El mercado globalizado debe cuestionar al futuro administrador financiero sobre el importante papel que juega en las empresas y en el entorno empresarial, además de la necesidad de anticiparse a los hechos que puedan afectar la estabilidad económica de la organización, en especial en la región latinoamericana, para el caso de las proyecciones financieras, el financiero debe calcular el costo que puede tener una errónea proyección en sus ventas o falta de liquidez en la organización para cubrir sus erogaciones de efectivo y algo importante, los cambios tributarios, fiscales y monetarios que puedan desviar totalmente la proyección realizada, es importante que el financiero esté atento a la economía global y determine cómo puede verse afectada la empresa ante los cambios en los mercados internacionales y los efectos en tasas de cambio, inflación y tasas de intereses.
Un objetivo importante es financiar la empresa al menor costo posible, siendo este un reto y compromiso en busca que la compañía utilice de la mejor manera estos recursos y logre valor económico agregado, para el caso de las inversiones el financiero debe determinar opciones de inversión recuperables en el menor tiempo posible.
De la misma manera como se analizan los factores anteriores, se debe entrar a determinar las políticas en materia de dividendos que la compañía más le conviene en el largo plazo, analizando si repartir de forma inmediata las utilidades logradas o por el contrario implementar una política de crecimiento constante. Aquí es donde el financiero entra a convencer a los accionistas sobre qué le sirve más a la empresa y plantear los objetivos financieros que tiene los propietarios de la organización en el largo plazo, todo esto acompañado
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