ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La Vida En Las Aulas


Enviado por   •  18 de Noviembre de 2013  •  1.795 Palabras (8 Páginas)  •  336 Visitas

Página 1 de 8

La vida en las aulas

Ph. W. Jackson

Capítulo primero

Los afanes cotidianos

Los padres se preocupan por el condimento de la vida escolar más que por su propia naturaleza.

También los profesores de interesan sólo por un aspecto muy limitado de la experiencia escolar de un pequeño.

Como los padres, los profesores rara vez reflexionan sobre el significado de los millares de acontecimientos que se combinan para formar la rutina del aula.

I

La escuela es un lugar donde se aprueban o suspenden exámenes, en donde suceden cosas divertidas, donde se tropieza con nuevas perspectivas y se adquieren destrezas. Pero también un lugar en donde unas personas se sientan, escuchan, aguardan, alzan la mano, entregan un papel, forman cola y afilan lápices.

Para apreciar el significado de los hechos triviales del aula es necesario considerar la frecuencia de su aparición, la uniformidad del entorno escolar y la obligatoriedad de la asistencia diaria.

La cantidad de tiempo que los niños pasan en la escuela puede ser señalada con una precisión considerable, aunque el significado psicológico de los números es cuestión sea materia enteramente distinta.

II

El aula es un lugar activo aunque no siempre parezca así al visitante casual. La enseñanza supone hablar y el profesor actúa como un regulador que controla el flujo del diálogo en el aula.

Otra tarea del profesor es la de servir como proveedor.

La tarea de distribuir los recursos materiales se halla estrechamente relacionada con la de otorgar privilegios espaciales a alumnos que los merecen.

Las cosas que este hace cuando opera dentro de los límites físicos, temporales y sociales del aula poseen un efecto limitador sobre los acontecimientos que podrían ocurrir si se diese rienda suelta a los impulsos individuales.

La cuarta responsabilidad del docente, exige prestar atención a un aspecto de la vida en el aula, es la de servir como cumplidor oficial de horario. El es que se encarga de que las cosas comiencen y acaben a tiempo, en términos más o menos exactos.

En las aulas donde los alumnos gozan de una considerable libertad para desplazarse durante el trabajo individual y en los periodos de estudio, el propio profesor se convierte a menudo en centro de pequeños grupos de alumnos que aguarden.

Otro tipo de demora que pueden observarse en el aula, la de la situación en la que se asigna un grupo un problema que resolver o un ejercicio para terminar y algunos estudiantes acaban mucho antes que los otros. Esperar no es malo y puede resultar incluso beneficioso cuando suceden las cosas que aguardamos. Pero, a veces puede esperarse en vano.

El rechazo de un deseo es el resultado último de muchas de las demoras que tienen lugar en el aula. A veces se ignora la mano alzada, en algunas ocasiones de se entiende a la pregunta formulada al profesor y en otras se niega el permiso solicitado. No es posible escuchar a todo lo que se quiere hablar, ni se puede responder satisfactoriamente a todas las interrogantes del alumno, ni acceder a todas sus peticiones.

Otro aspecto de la vida escolar relacionado con los fenómenos generales de distracciones e interrupciones es la repetida demanda de que el alumno ignore a los que tiene alrededor.

Un aula no es conjunto de extraños en un momento puntual, se trata de de un grupo cuyos miembros llegarán a conocerse muy bien, y establecerán una relación de amistad en muchas casos.

Cuatro rasgos de la vida escolar que no se mencionan: demora, rechazo, interrupción y distracción social.

Una alternativa de estudiar las formas en que profesores y alumnos aborden estos hechos de la vida, y tratar de descubrir como ese proceder deja su impronta en sus reacciones ante el mundo en general.

Si los alumnos han de enfrentarse equilibradamente con las exigencias de la vida en el aula, tienen que aprender a ser pacientes. Eso significa que deben ser capaces, al menos por un tiempo, de desligar sus sentimientos de sus acciones. Esto quiere decir que los alumnos aguardarán su paciencia a que llegue su turno, pero cuando esto suceda, tiene que ser capaces de participar correctamente.

El hecho de que docentes y compañeros contribuyan a que el alumno mantenga la conducta debida no significa que puedan ignorarse las propias demandas.

III

Mucho antes de llegar a la edad escolar, cada niño experimenta el dolor del fracaso y el júbilo del éxito; pero sus logros, o la ausencia de éstos, no se hacen oficiales hasta que ingresa al aula.

La escuela no es el único lugar en donde se intenta que un estudiante tome conciencia de su fuerza y de su debilidad, sus padres le evalúan en el hogar y sus amigos hacen otro tanto a la hora de jugar. Sin embargo el proceso de evaluación que se desarrolla en el aula es completamente distinto de que acontece en otros ambientes.

Los exámenes constituyen la forma clásica de la evaluación.

Las dinámicas de evaluación en clase son difíciles de describir, principalmente por su complejidad. La evaluación procede de más de una fuente, las condiciones de su comunicación pueden variar de formas muy diversas, es posible que tengan uno o más referentes y pueden que su calidad se extienda desde lo intensamente positivo a lo intensamente negativo.

La fuente principal de evaluación en el aula es, sin duda, el profesor. Se le exige continuamente que formule juicios sobre el trabajo y la conducta de los alumnos y que los comunique a éstos y a otras personas.

Una

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (10.9 Kb)  
Leer 7 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com